Grettel Morejón, Bailarina Principal del Ballet Nacional de Cuba, y Miguel Anaya, solista; precisan con la mirada algunos detalles innombrables. FOTO: Gabriel Dávalos
Quien se sienta en una butaca a disfrutar del ballet, muchas veces desconoce todo el ajetreo y la magia que se esconde tras el telón. Una mirada por dentro, a esos otros artistas que brillan a la sombra, nos propone el fotógrafo Gabriel Dávalos. Su lente y talento llegaron a la más reciente función de Don Quijote… y esta es la historia que nos cuenta a través de sus fotos.
Edwing, uno de los más reconocidos maquillistas de Cuba, prepara a Grettel Morejón para lucir una Kittri española; al fondo espera Fidelito, el estilista, quien luego preparará el peinado. FOTO: Gabriel Dávalos
Grettel escucha atentamente al Alfredo Ibañez, quien interpreta a Don Quijote, mientras termina sus estiramientos a telón cerrado. FOTO: Gabriel Dávalos
Primer intermedio; el doctor Ramsés Raymond le da un masaje a Grettel en el camerino. FOTO: Gabriel Dávalos
Martha, vestuarista del BNC, ajusta los tirantes del vestido de Kittri. FOTO: Gabriel Dávalos
Durante el Segundo Acto, la bailarina debe cambiarse de ropa; tiene apenas 5 minutos, no da tiempo a buscar un camerino. Para colmo, la flor roja se ha trabado con un gancho en su pelo. La música sigue, en unos instantes tiene que volver a salir. FOTO: Gabriel Dávalos
Cuando termina el Tercer Acto, Salvador Fernández, subdirector del Ballet Nacional de Cuba, se acerca para felicitarla. Grettel comparte una flor con Manuela, la Primera Bailarina Panameña, invitada, quien ha debutado en la Mercedes. FOTO: Gabriel Dávalos
Su profesora Maria Elena LLorente, ex bailarina, Maitre del BNC, y co autora de la versión coreográfica cubana de Don Quijote, se acerca visiblemente emocionada. FOTO: Gabriel Dávalos