Betto y su Catalejo rumbo al horizonte en nombre de la Cultura cubana

Los incansables hacedores de sueños del Proyecto socio-cultural “Betto y su Catalejo” de la Asociación Nacional de Ciegos (ANCI) parten nuevamente rumbo a otra de las zonas rurales de Palma Soriano. Foto: Ania Ortega.

Aún no amanece, pero hay que madrugar. Las tres es buena hora para emprender preparativos. Sombrero de yarey, pantalón holgado, camisa de mangas largas y unas buenas botas, porque el olor a tierra mojada augura un día húmedo y poco soleado.

Así comienza la marcha en varios hogares a la vez. Será un nuevo día para las andanzas comunitarias en pos de la alegría. Aún sin sol abundan semidormidos algunos saludos, el grupo va creciendo, mochila al hombro se cruzan las miradas a la espera del camión.

Bromas madrugadoras acomodan las expectativas del que todos ya avizoran como un largo día. Llega el camión, las habilidades de vivencias anteriores agilizan la partida.

Los incansables hacedores de sueños del Proyecto socio-cultural “Betto y su Catalejo” de la Asociación Nacional de Ciegos (ANCI) parten nuevamente rumbo a otra de las zonas rurales de Palma Soriano, la comunidad del 8 de Palmarito, del Consejo Popular Maibio, con la Cruzada teatral “Catalejo por la vida”. Junto a ellos, jóvenes de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) y la Brigada de Instructores de Arte José Martí, de este municipio santiaguero.

Muchas motivaciones inducen al festejo, por eso no importó la lluvia, ni el fango, ni el escabroso camino rumbo al poblado. En esta ocasión celebraban el octavo aniversario del Proyecto socio-cultural “Betto y su Catalejo” de la Asociación Nacional de Ciegos (ANCI), porque en tiempos de pandemia es bienvenida la sonrisa y porque en esta zona no había evidencias del virus, pero era urgente la alegría desde el arte.

Así acontecía en este agosto reciente, y así ocurre cada verano, pero también en otros eventos culturales como este especial 20 de octubre, día en que la cultura cubana está de fiesta.

Cuba celebra en grande por sus raíces, en nombre del devenir histórico cultural, avalado por prestigiosos artífices del entramado ancestral que engalana la cubanía. A ella se debe la creación de una Brigada que, con el nombre del héroe  nacional José Martí, acompaña siempre estas cruzadas teatrales.

Creadas oficialmente por Fidel Castro Ruz el 20 de octubre del 2004 con su Primera Graduación, compuesta por egresados de las Escuelas de Instructores de Arte nacidas de la Batalla de Ideas, surgió como un movimiento juvenil para encausar una de las más nobles misiones, llevar el arte hasta los más apartados rincones del  país.

“Los instructores de arte tienen una tarea muy importante que cumplir con la Revolución, (…) son artistas formadores de patriotas, formadores de revolucionarios y formadores de excelencias en el arte, en eso consiste su tarea, aunque es importante precisar que con las excepcionales cualidades que tienen algunos, pueden llegar a ser grandes artistas”. Fidel Castro.

Por eso, en Palma Soriano se integran desde los eventos del Proyecto socio-cultural “Betto y su Catalejo” de la Asociación Nacional de Ciegos (ANCI), para celebrar anualmente su aniversario con una cruzada teatral por zonas del Plan Turquino en el oriente del país.

Así, mochila en ristre y sin más recursos que su arte, han llegado hasta casi todas las zonas rurales de Palma Soriano consideradas vulnerables y de difícil acceso. Testigos de ello son los Consejos Populares de El Ramón de Guaninao, de Aguacate, el Caney, Dos Palmas, zonas cañeras como Carmelie, Oriente, Candonga, Las Coloradas, muy cerca de la Sierra Maestra; zonas serranas cafetaleras como La Clarita, La Marsellesa, hogares de ancianos del Yarayabo. Así, han cubierto casi 19 de los 20 consejos populares que componen el municipio palmero.

También Cienfuegos, Granma y Guantánamo han conocido del arte palmero gracias a estas cruzadas teatrales y sus Brigadas José Martí.

Betto y su Catalejo surgió un 22 de junio de 2012 gracias a la iniciativa de su director general, Roberto Puebla Griñán, presidente municipal de la ANCI, inspirado en el clásico de la literatura universal El principito, de Saint Exúpery.

Su concepto es promover valores humanos, el respeto a la diversidad, con énfasis en el reconocimiento del goce y ejercicio pleno de los derechos de las personas con discapacidad.

Respaldado por la Casa de Cultura municipal “Ángel Peralta Téllez” cuenta con el movimiento de artistas aficionados, dirigido por dos prestigiosas personalidades de la cultura de Palma Soriano: Mayda Hernández y Alfredo Quintana, junto al destacado instructor de arte y actor, Marcos Antonio Hernández Arévalo, Premio de Narración oral en el Concurso Nacional de música campesina “Eduardo Saborit” del 2019.

Cuentos, títeres, teatro, cantos y poesías llegan hasta allí, donde cualquier espacio se vuelve un escenario. No hay obstáculos para la hermosa misión de estos hacedores de vida y alegría, que al llegar olvidan aquellos más de 20 kilómetros de carretera, las horas robadas al descanso, la lluvia, el fango o el sol avasallante, cuando a cambio reciben las sonrisas de quienes, cada año o fecha especial, acogen esperanzados a sus creadores de sueños desde el arte.

De regreso, descansa el sombrero de yarey, la camisa pintada con los colores de la tierra y las botas, cuentan millas cargadas de historias que el próximo año retornarán para llevar al artista a su destino feliz.

Muchas motivaciones inducen al festejo, por eso no importó la lluvia, ni el fango, ni el escabroso camino rumbo al poblado. Foto: Ania Ortega.