Drones a domicilio

Cuando seis vacas de un vecino se pasaron a la finca de Rodney Brossart, y él no las devolvió, seguro nunca se imaginó que se convertiría en el primer ciudadano de Estados Unidos arrestado con la ayuda de un dron del Departamento de Seguridad Nacional. (Fuente: BBC)
Guillermo Tell

A estos aviones no tripulados y teledirigidos se les conoce bien, sobre todo las poblaciones paquistaníes de las fronteras con Afganistán, blancos frecuentes de sus mortíferas bombas, que tantas víctimas han causado en familias enteras, incluidos niños, en nombre de la guerra contra el terrorismo, y a los que la CIA ha echado mano para cometer crímenes selectivos a distancia.

Pero ahora también van a servir para el espionaje a los propios ciudadanos estadounidenses, tal como acaba de demostrar a modo de experimento el episodio noticiado, y que comenzó a levantar justo revuelo entre quienes se resisten a que se violen sus libertades civiles y sus privacidades.  Jay Stanley, un analista en esa materia apuntó que "tienen la habilidad de grabar todo lo que haces, a dónde vas, si vas al médico o a una protesta", sin ningún amparo judicial.

Los fabricantes de drones están que se frotan las manos y proyectan poner en el mercado más de 30 mil de estos aparatos en los próximos 10 años.

Otra pieza más que le faltó al Gran Hermano para controlar la sociedad, en la célebre obra de anticipación "1984"  del escritor George Orwell.  Y acaba de aparecer a domicilio.