El presidente del Barça, Josep Maria Bartomeu, junto a Leo Messi. Foto: AFP
La posible marcha de Leo Messi podría vivir un nuevo capítulo. Avanzado por la televisora TV3 y confirmado por La Vanguardia, el presidente azulgrana, Josep Maria Bartomeu, estaría dispuesto a dimitir siempre y cuando el argentino se lo pida públicamente y finalmente decida continuar en la entidad barcelonista.
Dentro del planteamiento de Bartomeu no entra en ningún momento la posibilidad de dar la carta de libertad al jugador n
i negociar su traspaso. El presidente prefiere marcharse antes que firmar el adiós de Messi. Si la justicia no dice lo contrario, la única vía de salida para Messi sería el pago de su cláusula, de 700 millones de euros. Una cifra totalmente fuera de mercado e inasumible por ningún club.
Esta decisión únicamente afectaría a Bartomeu, que sería el único directivo que dimitiría. La actual junta seguiría gestionando el club hasta las elecciones de marzo sin Bartomeu al mando. Tal y como marcan los estatutos de la entidad, si el presidente diera un paso al lado sería el vicepresidente primero, en este caso Jordi Cardoner, el que pasaría a ser el máximo dirigente del Barça.
Desde el club entienden que Messi debe hacer públicos los motivos que le han impulsado a querer marcharse del Barça y de ser Bartomeu el problema aún existiría la posibilidad de que el rosarino siguiera de azulgrana. La medida, sin embargo, podría llegar tarde, ya que la decisión de Messi sería firme, totalmente dispuesto a abandonar el primer equipo azulgrana tras 16 años.
Por el momento, Messi no ha expresado públicamente su intención de abandonar el club y únicamente ha comunicado su decisión a través de un burofax, donde además solicita salir gratis de la entidad acogiéndose a una cláusula liberatoria que en principio caducó el 10 de junio. El todavía ‘10’ del Barça tiene contrato con el club hasta el 30 de junio de 2021.
La primera aparición pública de Messi tras el burofax será el próximo domingo cuando los jugadores azulgranas se sometan a las pruebas PCR antes de empezar la pretemporada. Mientras su futuro se resuelve, el jugador se incorporará el lunes al inicio de los entrenamientos en la Ciudad Deportiva Joan Gamper.
Será entonces cuando vuelva a reunirse con sus compañeros en el vestuario y vuelva a verse las caras con el nuevo entrenador, Ronald Koeman, que poco después de aterrizar en Barcelona se reunió con Messi para conocer sus intenciones. En ese momento el ‘10’ ya trasladó al técnico sus dudas sobre su continuidad en el club.
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(Tomado de La Vanguardia)