La inesperada decisión, que coincide con el inicio de la campaña electoral para esa cita con las urnas, cambia de forma considerable la situación de Puigdemont
La justicia española retiró hoy la orden europea de detención contra el expresidente de Cataluña Carles Puigdemont y cuatro de sus antiguos colaboradores, afincados en Bélgica tras ser destituidos por el gobierno de Mariano Rajoy.
El juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena indicó que el mantenimiento de esa medida podría complicar la causa por rebelión, sedición y malversación contra el depuesto ejecutivo catalán, con varios de sus miembros en prisión o en libertad bajo fianza en España.
En su auto, el magistrado apuntó la posibilidad de que Bélgica deniegue parcialmente la ejecución de esas órdenes de arresto, provocando una restricción de las imputaciones que "dificultaría la respuesta homogénea".
Llarena argumentó que los delitos investigados requieren "una única contestación para evitar respuestas contradictorias", motivo por el cual pidió a las autoridades belgas devolver el formulario de orden de captura enviado por esta nación ibérica hace un mes.
Además, sostuvo que "los investigados parecen haber mostrado su intención de retornar a España, con la finalidad de tomar posesión y ejercer unos cargos electivos para cuyos comicios se han presentado", en alusión a las elecciones catalanas del 21 de diciembre.
La inesperada decisión, que coincide con el inicio de la campaña electoral para esa cita con las urnas, cambia de forma considerable la situación de Puigdemont y de los exconsejeros (ministros regionales) que se encuentran en Bruselas junto a él.
Precisamente, un tribunal de primera instancia belga tenía que decidir sobre su futuro el venidero 14 de diciembre, luego de no presentarse ante la justicia española por su presunta responsabilidad en la declaración unilateral de independencia de Cataluña.
Los cinco dejan de estar ahora en búsqueda y captura, lo cual no descarta que puedan ser detenidos si regresan a este país europeo.
Tras la proclamación de la República catalana por el parlamento de la próspera comunidad autónoma, el pasado 27 de octubre, la administración de Rajoy destituyó a Puigdemont y a todo su gabinete, disolvió la cámara y convocó a los comicios anticipados del día 21.
Al amparo del artículo 155 de la Constitución y con el aval del Senado, el mandatario tomó entonces el control de ese territorio del noreste español por incumplir sus obligaciones y desacatar las leyes.
(Con información de Prensa Latina)