Las Montañas Nubladas vistas desde el Este del Aguilero, hacia la Puerta del Trasgo (El Hobbit, capítulo 6).
La fama de John Ronald Reuel Tolkien como escritor es más que merecida. En la literatura fantástica fue el artífice de una de las sagas más importantes dentro del género, fundamental para su evolución dentro de la literatura en general, sin la cual sería difícil comprender creaciones contemporáneas como, por ejemplo, Game of Thrones. Desde el punto de vista literario, Tolkien fue también un escritor de gran valía, un refinado conocedor del idioma inglés que incluso ensayó una traducción del poema épico medieval Beowulf, cuya calidad ha sido comparada con la que realizó el poeta Seamus Heaney.
Y por si esto no fuera suficiente, Tolkien también era dibujante. Quizá no el mejor, pero al menos con el talento y la técnica suficientes para dar forma y color a algunas escenas, paisajes y personajes emblemáticos de sus obras. Esta no es la faceta más conocida del escritor de origen sudafricano, acaso porque los ilustradores de El Hobbit o El Señor de los Anillos son cuantiosos, pero quizá por eso mismo vale la pena revisar su trabajo en dicho ámbito.
Las imágenes que aquí compartimos son apenas una pequeña muestra de un archivo mucho más amplio que puede consultarse en este enlace.
Conversación con Smaug (El Hobbit, capítulo 12).
Nargothrond (El Silmarillion, capítulo 21).
El Bosque Negro (El Hobbit, capítulo 8).
Oso Polar cae de arriba a abajo sobre su nariz (Cartas de Navidad de Padre, 1976).
Los tres trolls convertidos en piedra (El Hobbit, capítulo 2).
Minas Tirith.
Viejo Hombre-Sauce (La comunidad del Anillo, Libro I, Capítulo 6).
(Tomado de Pijamasurf)