Sin ingenuidades: No es solo sobre la economía, es sobre la existencia de Cuba

La economía del siglo XXI requiere un nivel de inserción internacional (globalización) muy superior al de los años 60. La economía del siglo XXI demanda una mayor dinámica de creación y extinción de empresas. La economía del siglo XXI funciona por redes y encadenamientos empresariales, nacionales y transnacionales. La economía del siglo XXI demanda empresas que cambien permanentemente sus productos y servicios, muchas veces de manera “no planificable”, y asumiendo los riesgos que eso conlleva.