- Cubadebate - http://www.cubadebate.cu -

El Capital

El capital es el título del último filme de Constantino Costa Gavras, lo trajo a La Habana dentro de la jornada del cine francés. Costa Gavras,  ahora con 82 años, no ha perdido su capacidad de análisis en temas complejos dentro del cine social.

Este filme es el análisis más lúcido de lo que está pasando hoy en el mundo de las finanzas y del capital que en pleno siglo XXI se expande y conduce al mundo a lo que se ha dado en conocer como el 99 % desposeído y el 1 % poseedor.

La historia comienza con una reunión de satisfechos financieros de avanzada edad que proponen a un joven para que dé mayor dinamismo al despojo capitalista. El nuevo jefe comienza quitándole privilegios al viejo (avión privado, gastos especiales, etc.).

En una subtrama se enlaza el romance de este nuevo supercapitalista con una super modelo, una mujer muy bella al estilo de la alta sociedad. El tipo de mujer cuya belleza y vestuario no son comunes forma parte evidentemente de los privilegios de los supercapitalistas. La modelo, mucho más joven, trata de estafarlo, pero termina siendo estafada y violada en una lujosa limosina.

El final es antológico. En una reunión, los financistas tiburones celebran nuevos éxitos mientras el protagonista mira directo a la cámara y le habla, evidentemente al público: “mírenlos, se divierten como niños cuando el final se acerca”.

El filme se deja ver con facilidad a pesar de lo compleja de su trama, porque tiene el ritmo y las habilidades narrativas de un gran maestro. Repasemos un poco la vida y la obra de Costa Gavras. Nació en Atenas en 1933, emigró a Francia con el objetivo de hacer cine, hizo estudios en el IDEC (Escuela de cine francés) y comenzó haciendo asistencias de dirección lo  que le permitió conocer el oficio y establecer conexiones con el mundo del espectáculo. Desde entonces tuvo una estrecha amistad con Yves Montand y Simone Signoret.

En 1969 irrumpe en el mundo cinematográfico con “Z” una película clásica. Costa Garvras la emprende en este filme lleno de humor negro contra la  dictadura de los coroneles en Grecia, una mancha en la Europa de los años 60.

En 1972 viene a latinoamerica, donde dirige “Estado de Sitio” una premonición de la sangrienta dictadura de Augusto Pinochet en Chile. En este filme es clásica una secuencia donde se escucha a través de alto parlantes la canción de Carlos Puebla: “Hasta siempre Comandante”. Los sicarios van desconectando bocinas tratando de apagar la música, pero no lo logran, es una sugerente forma de mostrar que la verdad no puede callarse.

Para este filme contó con la actuación de Yvez Montand, un antiguo amigo, quien a pesar de ser francés y no latinoamericano le dio un aire de verosimilitud al filme.

Costa Gavras insistió en acusar la dictadura de Pinochet en un filme posterior: “Missing” que cuenta la historia real de un joven norteamericano desaparecido durante el golpe de Estado.

El protagonista, padre del desaparecido, lo interpreto Jack Lemmom Missing se estrenó en Cuba con la presencia de este gran actor.

Fue en el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano en diciembre de 1985. El diario El País recogió el hecho así:

“La presencia del actor norteamericano Jack Lemmon en el festival de cine latinoamericano de La Habana ha constituido el hecho de mayor trascendencia para la política de expansión cultural prevista por este festival. Aunque Lemmon fuera precedido por Robert de Niro y Christopher Walker y por Harry Belafonte, que arribaron en su avión particular, el superior prestigio de Lemmon, su interpretación en la película Missing, que tanto entusiasmo despertó en Latinoamérica, y sus declaraciones sobre su "ardiente deseo" de conocer personalmente a Fidel Castro le han convertido en la estrella del festival cubano.”

Costa Gavras no vino en esa ocasión, pero se encontraba armando uno de sus filmes más importantes: “La Caja de música”, de 1989. La rodó en Estados Unidos con los protagónicos para Jessica Lange y el gran actor veterano Armin Mueller-Stahl. En este filme se desenmascara a un asesino fascista que emigró a América y se convierte en un furioso anticomunista apareciendo en público durante una actuación de una compañía de ballet húngara, dando gritos de abajo el comunismo y pidiendo que expulsaran a los artistas y esa demostración de propaganda roja.

Se filtra una denuncia de que Muller era un connotado fascista, la información llega a las manos de la letrada Anne Talbot (Jessica Lange), abogada e hija de un húngaro radicado en Estados Unidos. La joven no puede creer que su amoroso padre haya sido un fascista despiadado, su deber profesional habló más alto que el amor a su padre e inicia una investigación.

La búsqueda la lleva a visitar Hungría, país de origen del padre. La verdad sale a la luz de una forma inesperada: en una antigua  caja de música, reliquia de su padre, están guardadas fotos de su progenitor joven, vestido con el uniforme fascista húngaro.

La historia es un alerta al oportunismo a la par de un profundo drama humano. La película llevó a que Jessica Lange fuera nominada como mejor actriz a los  Oscar de ese año. Ya Costa Gavras había obtenido una estatuilla con “Z”.

El hecho de que Costa Gavras haya venido a Cuba con su última película, que desnuda y denuncia las nuevas formas de la opresión, sin dudas, es un acontecimiento importante para la cinematografía cubana, Costa Gavras nos mantiene así informados de su obra que hemos seguido atentamente en Cuba, y nos revela nuevos aspectos del mundo contemporáneo y su capacidad de crítica y denuncia desde el original “Z” hasta nuestros días.