- Cubadebate - http://www.cubadebate.cu -

Punto Penal: Olvídate de todo, Higuaín

Higuaín, al momento de definir el choque. Foto: Peter Powell/EFE.

Higuaín, al momento de definir el choque. Foto: Peter Powell/EFE.

A todos mis amigos seguidores de la albiceleste

La primera lección fue la siguiente: si agarras un rebote dentro del área donde atacas, no lo pienses y pégale al arco. Olvídate de que el portero sea Courtois y esté entre los tres mejores del mundo y de que ahora mismo el Chelsea y el Atlético aún se lo sigan disputando. Olvídate de Van Buyten, defensa central de 1,97m y del recio capitán Kompany, aunque éste último no olvidará lo que le harás luego. Olvídate de Alderweireld, capaz de confiar en un Basanta con reservas para no subir a buscar la pelota toda vez que Lavezzi se haya movido hacia el centro. No mires tampoco a Vertonghen, quien acostumbrado al fútbol volátil de la Premier poco podrá hacer si imagina a Zabaleta o a Biglia incorporados a esa acción.

Ahora bien, olvida que no has estado bien en esta Copa. De todos modos Rodrigo Palacio, a quien verás más tarde, es apenas un actor de reparto y el Kun Agüero ha sido solamente alguien con un número en la espalda. No levantes la cabeza, puede que te arrepientas: recuerda que en ese lugar de la cancha, la sangre fría y la sobriedad son un par indiscutible. Messi no está cerca. Di María tampoco. Solo quedas tú olvidando miles de cosas. El momento para mofarte de cómo te cayó el balón en los pies vendrá después. Si quieres puedes celebrar luego chupándote el dedo, como cuando estabas en las inferiores de River y veías a Totti, en todo su esplendor, haciendo lo mismo al marcarle a la Lazio en el clásico de Roma.

Decidiste rápido. Dudo que te haya dado tiempo a acordarte de cuando en el Madrid ponían a Benzema de titular por pensarse las cosas con más ¿tino?, por amasar el balón y acomodárselo para su pierna más hábil. Es imposible que recordaras esto, ¿para qué recordar cosas así cuando lo que tratas es de olvidarte de todo lo que tienes alrededor? El balón salió de tus inmediaciones y buscó el segundo palo. Podrías haberla pisado y dejar que uno de los defensas pasara de largo, pero probablemente te acordarías de Benzema. Podrías haberla tocado hacia atrás de taconazo y que sucediera entonces algo parecido al primer gol de tu equipo en este Mundial, donde se la dejaste servida a Messi. La pulga no estaba cerca: en el día de la messindependencia pasan cosas así.

Courtois miraba aquello, como quien observa un performance. Tampoco se le ocurriría preguntarse en ese momento si lo que veía era arte o no. Más bien parecía una caída progresiva, un síntoma de dejadez por parte de una defensa mal parada en ese instante. El portero belga no les reclamará luego, su razón tendrá. El balón fue a parar a la escuadra. El joven arquero no se movió: así se interpretaban mejor ciertas cosas y le sería más rápido colocarse en posición para aplaudir. Nunca te enteraste si aplaudió o no. Nosotros, los sobrevivientes, tampoco.