Eurodisparos XII (+ Fotos)

Cristiano Ronaldo tiró del carro portugués y metió a su equipo en semifinales de la Eurocopa 2012, gracias a un testarazo que coronó su esfuerzo interminable por anidar la Tango 12 en meta checa. El "7" lusitano intentó el gol por innumerables vías hasta que lo logró a la altura del minuto '79, cuando ya el adversario daba claras señales de inferioridad moral y fatiga física. De ese modo, los pupilos de Paulo Bento sacaron su ticket para las semifinales del torneo, y ahora esperan por el vencedor del duelo sabatino entre Francia y España.

PORTUGAL 1 -REPÚBLICA CHECA 0: CANTE USTED, DON FERNANDO

Los vaticinios se cumplieron al pie de la letra. Se decía que Portugal era mejor, y el terreno lo corroboró. Muchas voces aseguraban que Cristiano Ronaldo sería el eje de la victoria ibérica, y el de Madeira fue una erupción de lava, piedras y cenizas.

No obstante, el encuentro arrancó de otra manera. Las imprecisiones hacían su agosto en pleno junio, pero los checos le sacaban lascas al trabajo por las bandas de Pilar y Jiracek, un barbudo que aparecía, como Dios, en todas partes.

Sin posesión de la pelota ni bríos atacantes, Portugal se limitaba al sufrimiento. Que no llegaba al llanto porque del otro lado no alineaba Rosicky, a quien suplía, voluntarioso y poco más, el imberbe Darida.

Tuvieron que pasar once minutos para que Portugal dijera "estoy aquí" en Varsovia, cuando un centro de Nani sembró el pánico. El jugador del Manchester United, cuyas prestaciones habían estado por debajo en el evento, logró ser -esta vez sí- el escudero que Cristiano necesita en el equipo.

Un golpe de azar compuso el desenvolvimiento lusitano. Postiga sufrió una lesión, y la entrada de Hugo Almeida devolvió a CR7 -hasta entonces en funciones de delantero centro- a su jurisdicción natural por la izquierda.

A partir de ese instante, los paisanos de Fernando Pessoa comenzaron a escribir una historia diferente. Todavía sentían el rigor del pressing checo, y Gebre Selassie continuaba pegado como lapa a los botines del crack luso. Mas la luz se dejaba ver en la distancia, y cerca estuvo de amanecer para ellos en el descuento del movido primer tiempo, una vez que Cristiano bajó la pelota con el pecho, se dio vuelta y reventó el balón en uno de los palos.

Era el anuncio de lo que vendría. Y lo que vino fue un chaparrón de fútbol que cayó sobre las camisetas rojas, tan desgastadas en lo físico que debieron replegarse vulgarmente a la espera de un milagro.

El dominio se tornó abrumador. El peso completo machacaba repetidamente al minimosca, pero en este deporte los árbitros no abortan las masacres. Cristiano, fatal, volvió a ser víctima de un poste (¿no se acuerdan de Messi en el Mundial?), pero en el aire había olor a sangre y muerte checa.

Sin sosiego, los de Bílek olisqueaban la estocada, y aun mandaron a Baros, su único hombre en punta, a defender. Portugal ejercía el monopolio del balón, ganaba cada centro, disparaba misiles desde atrás... Nadie podía escapar de aquel acoso, y Cristiano Ronaldo, que tanto había ido a la fuente -mejor dicho, a la puerta- se encontró con un golazo indetenible para Cech, a gran nivel durante todo el choque.

Sí, Pessoa habría estado orgulloso de estos hombres que, a costa de los checos, acababan de reescribir su Libro del Desasosiego.

LOS VOTOS DEL AUTOR

Jugador del partido: Cristiano Ronaldo.

Arbitraje: Bueno.

Calificación del choque: 4 puntos.

FICHA TÉCNICA

Estadio de Varsovia, Polonia; Portugal 1 - República Checa 0 (0-0).

Portugal: Rui Patricio; Joao Pereira, Bruno Alves, Pepe, Coentrao; Raúl Meireles, Veloso, Joao Moutinho; Nani (Custódio, min.84), Helder Postiga, y Cristiano Ronaldo.

República Checa: Cech; Gebre Selassie, Kadlec, Sivok, Limbersky; Jiracek, Hubschman (Pekhart, min.86), Plasil, Pilar; Darida (Rezek, min.65); y Baros.

Gol: 1-0, min.80: Cristiano Ronaldo.

Árbitro: Howard Webb (ING). Amonestó con tarjeta amarilla a Nani (min.26), Veloso (min.27) en Portugal; y a Limbersky (min.90) en el conjunto checo.