- Cubadebate - http://www.cubadebate.cu -

Strike 3: EL PNP del ALBA

Eriel, un veterano ilustre, no ha podido cumplir

Eriel, un veterano ilustre, no ha podido cumplir

Voy a usar hoy un mecanismo que solían emplear dos colegas amigos, Héctor Miranda y Rafael Arzuaga, para referir los puntos capitales del desempeño de un equipo beisbolero. Esto es, trataré de discernir lo más Positivo, lo más Negativo y lo más Preocupante (PNP) de lo que acontece con la escuadra nacional que toma parte en los Juegos del ALBA.

Positivo: La forma ofensiva de Ernesto Molinet. El santacruceño anda desbordado desde la preparación, y la lógica deportiva pide a gritos su subida a algún turno de más responsabilidad, toda vez que tercero, cuarto y quinto bates no han podido cargar con el gasto atacante de la tropa. A fin de cuentas, Molinet -que ya no es ningún niño en los trajines peloteros- está habituado a asumir turnos en la medular del line up de los Vaqueros. Y allí cumple.

Negativo: El rendimiento de Eriel Sánchez, que dista años luz de lo que antes aportaba en los diamantes. El espirituano ya no lleva dinamita cuando comparece al home plate, y para colmo también deja que desear con la mascota. Contra Nicaragua, las carencias de su brazo salieron a relucir una tras otra, mientras que versus Venezuela pudo "fajarse" mejor con el wild pitch de Freddy Asiel que acabó decidiendo el desafío. El tiempo no perdona: pasa un grande.

Preocupante: Como su antecesor de Rotterdam, este equipo no produce. Es más: a su similar de Holanda le tocó encarar en tres ocasiones al staff de Taipei, infinitas veces superior a los de estas versiones de Venezuela y Nicaragua. Ninguno -absolutamente ninguno- de los pitchers enfrentados en el ALBA, enseñó credenciales de jerarca. Ni los que eran tan lentos como el tren lechero, ni los que eran un poquitín más rápidos. El problema está en nosotros. Nos insisten con el rompimiento en la esquina de afuera, y allá vamos, golosos. Nos enseñan la recta en zona mala, y la embestimos. Peor, imposible.

Nota: Antes de que comience una "campaña de descrédito" de la pelota en uso, aclaro que el secreto está en pegarle bien. Si no, fíjese en Molinet, que la ha llevado lejos en varias oportunidades.