- Cubadebate - http://www.cubadebate.cu -

Silvio: toda una vida

Silvio. Foto: Kaloian

Silvio. Foto: Kaloian

Para quienes tenemos el privilegio de guardar en nuestros recuerdos la imagen de un escuálido joven, con una elemental guitarra, sobre un set "de palo" de una pantalla de TV -en blanco y negro-, a finales de los años 60 del siglo pasado, no es una sorpresa.

Para quienes vimos aquel programa llamado "Y nada más...", y sin saber a derechas el significado de la palabra poesía, verso, lírica, sentíamos el placer de escuchar lo que queríamos y nadie nos sabía decir, no es una sorpresa.

Para quienes entendimos de amor, política, entrega, dedicación y otros tantos conceptos importantes de la vida gracias a sus versos, no es una sorpresa.

Para quienes sabemos que subió a un barco y se perdió en los mares del mundo buscando las emociones y el interior del ser humano, que hizo lo mismo en Angola, en Chile y en otros tantos sitios donde el dolor y la miseria le necesitaban, que ha hecho suya la causa de los cinco cubanos presos injustamente en Estados Unidos, no es una sorpresa.

Para quienes nos enamoramos y desenamoramos con sus canciones y  somos capaces de llorar con lo que escribió y cantó hace 30 años. Para quienes lo hemos seguido como músico y como poeta porque nos es imposible dejar de hacerlo y confiamos en su decir, no es una sorpresa.

Para quienes vemos oleadas de jóvenes generaciones sentir lo que nosotros sentimos, no es una sorpresa.

Para quienes lo hemos visto despreciar al imperio y al dinero tantas veces, y ver como declaró recientemente  a la prensa a propósito de los Grammys: "ninguna transnacional ganaría ni un centavo con un premio a mi música"...y "nunca he sido un fenómeno de ventas y no creo que a estas alturas vaya a empezar a serlo". No es una sorpresa.

Sinceramente, no me extrañó que Silvio Rodríguez Domínguez resultara el Premio ALBA de las Artes 2010. Porque ha sido artista, defensor de las causas de los humildes de América Latina y del mundo, porque aunque tenga todo el dinero que le cuentan sus detractores, es sumamente humilde.

Felicito al Jurado que otorgó este Premio (Pedro Calzadilla de Venezuela; Nelson Domínguez de Cuba; Jaime Galarza de Ecuador, Edgar Soberón de Panamá y Beatriz Stolowicz de México), por tan acertada decisión.

Doy mis felicitaciones a Silvio como artista y como hombre -en el más amplio sentido de la palabra- y mientras escribo estas notas creo que su mayor arte es haber sido consecuente con sus pensamientos y conceptos y saberlos transmitir al mundo.

Gracias Silvio, otra vez, por más de 40 años de canciones y lecciones, que te puedo asegurar van a perdurar por esta y muchas más vidas.

(Tomado del portal ALBA Cultural)