En el país más rico del mundo, John duerme en su carro
Por Juan-Guy Allard
John cuenta como, por falta de pagar a tiempo sus impuestos, el sistema de fiscalización federal, el IRS, lo obligo a deshacerse de su casa. Lo que le condenó a vivir en su vehiculo hasta que aparezca, si aparece, un trabajo “decente”.
El oficial Dan McCormack de la Policía de Colorado Springs está desesperado: la prohibición municipal de las "ciudades de tiendas de campismo" ("tent cities") alrededor de la ciudad provoca a la vez la ira de los vecinos de estas zonas, porque la medida se aplicará solo en tres semanas y que reclaman que se elimina "esto" rápidamente, y el pánico entre los ciudadanos sin recursos que, con la crisis, no tienen otra forma de alojarse.
Para millones de norteamericanos, los niveles record de desempleo y la escasez de puestos de trabajo decentemente remunerados se traduce por la pérdida de su alojamiento hipotecado con un banco y la tragedia de tener que inventarse una "casa".
La situación la describe El Colorado Springs Gazette que se pregunta como se resolverá, en esta temporada de frio, el alojamiento de los cientos de "sin casa" teniendo en cuenta que la ciudad dispone solo de unos cuartos para albergar a adultos con problemas de droga o enfermedades siquiátricas.
Por su parte, el Star Tribune de Minneapolis, Minnesota, relata como "John, de 50 años" - no quiso dar su identidad - como mucha otra gente, vive en su carro que parquea, noche tras noche, en una "area de descanso" de la autopista.
Titulado "Sin domicilio, con ruedas: el parqueo es su hogar", el reportaje cuenta como otras victimas de la crisis también han solucionado su situación al vivir en su vehículo, por falta de tener un trabajo que le permita pagar un alquiler o una hipoteca bancaria.
Para enfrentar el frio, John pone cartones en los cristales y, de vez en cuando, arranca el motor para elevar la temperatura gracias al sistema de calefacción, mientras a fuera se calienta una sopa con un horno de campismo.
Duerme luego sobre una plancha de "plywood" en un saco de camping. Y se ducha de vez en cuando en un gimnasio al cual suscribió por 50 dólares al mes.
John cuenta como vive de esta manera, al lado de la autopista, desde agosto. Los demás "regulares" de esta "área de descanso" lo hacen también porque se perdieron la casa y no tienen forma de conseguir otra.
Las informaciones periodísticas no auguran nada bueno para John y sus "vecinos".
Según un sondeo Gallup publicado este martes, cerca de 20 por ciento de la fuerza de trabajo en Estados Unidos, supuestamente el país más rico del mundo, no tiene "empleo adecuado" para enfrentar el alto costo de la vida.
Dando una imagen de la situación económica mucho mas sombría que las estadísticas oficiales, el estudio de Gallup valora a unos 30 millones los norteamericanos sub-empleados, es decir sin empleo o con trabajo a tiempo parcial.
Comentando la noticia en el sitio web del Huffington Post, un lector precisa que estos datos no incluyen, entre otros, a los militares desmovilizados ni a los presos - teniendo en cuenta que Estados Unidos tiene la población carcelaria más elevada del mundo.
Tuve una experiencia similar, no tan masiva, en Madrid, cuando por las mañanas caminaba a comprar el periódico; costumbre que solo abandone desde que hay que madrugar para adquirirlo; veía a una persona saliendo de un auto y recogiendo los periódicos que le habían servido de cobija; lo que hacia este caso más crítico es que el auto era un uve dobleuve, como dicen los españoles, siempre me intrigó como amanecería aquel hombre que pasaba la noche encogido dentro de ese pequeño vehículo, lo de los periódicos lo comprendía en mis movilizaciones al campo aprendí que es lo que más resguarda del frío y estábamos en noviembre.
..................mas de lo mismo...y lo que les falta todavía.......ese es el gran capitalismo que ellos promueven como ..lo mejor del mundo.....!!!!el hombre lobo del hombre!!!!!....