- Cubadebate - http://www.cubadebate.cu -

Rogelio Cruz “no defendió a nadie”, valora el fiscal cubano Fernández

CIUDAD DE PANAMÁ -"Yo todavía estoy preguntándome a que se refirió Rogelio Cruz, el abogado defensor de los terroristas, en su alegato: ¡Sencillamente, no defendió a nadie!", comentó el Fiscal cubano Francisco Fernández Guerra, al ser interrogado sobre el juicio a Posada Carriles y sus cómplices que se terminó este miércoles en Panamá.

 

 El letrado habanero observa el caso Posada desde sus inicios y ha sido el fiscal designado por las autoridades judiciales cubanas para proveer asistencia a la justicia istmeña con todos los elementos de prueba que pudieran ser requeridos por Panamá. El jurista cubano también asistió, como observador, a los procedimientos judiciales que han tenido lugar en el Tribunal Marítimo de esta capital.

 

  "Un diario de Panamá, La Estrella -¡por supuesto que es un error¡- fue hasta decir que los abogados defensores pidieron 20 años contra los acusados", contó el especialista al analizar .

 Comenta que en esa vista, se pusieron de manifiesto "las contradicciones, la falta de argumentos, de solidez, de coordinación entre los propios abogados de la defensa".

 

 Señaló como Luis Posada Carriles y Gaspar Jiménez Escobedo se declararon inocentes del delito de falsificación cuando uno de los argumentos que utilizaron es justamente que  necesitaban utilizar una identidad falsa para poder escapar del supuesto seguimiento que les hacían los servicios de seguridad cubanos. Su otro argumento fue que era para probar si efectivamente esa identidad falsa servía para ocultar su verdadera identidad y entrar al territorio panameño.

 

 Hubo nada "que le diera racionalidad, que le diera coherencia, que hiciera creíble los mecanismos que utilizó la defensa"., indicó el fiscal cubano.

 El defensor Rogelio Cruz "trató de demostrar que hizo algo para defender pero no lo logro".

 

 "El problema es que no le quedaba más que hacer eso o otra barbaridad porque no tenía argumentos".

 

INVENTARON UNA CUARTADA

 Cruz y los demás defensores "no se defendieron de la acusación sino que inventaron una cuartada que nada tenia que ver con lo que se esta imputando: que la seguridad cubana les perseguía, que un general de los servicios de seguridad cubanos iba a desertar, que fue una trampa que le tendió el Gobierno cubano para capturarlos aquí".

 

  El error radica, señala Fernández Guerra, en que, en un proceso judicial , "tu no puedes defender a alguien de lo que no se lo acusa".

 "Estas son el tipo de errores, el tipo de inconsistencias que tuvieron los argumentos de descargo de la defensa.

 

 Trataron de politizar además el juicio, precisa. "Ellos mismos, como dijo el fiscal, manifestaron en todas sus declaraciones, en todos los documentos que aportaron, su visceral odio al mandatario cubano, al sistema político cubano y al pueblo cubano".

 

 "Irónicamente, no se apreció en más de 40 tomos y 21 000 paginas un solo planteamiento que calzara la tesis de que efectivamente ellos habían sido inducido para venir a buscar un general cubano desertor".

 

ÉTICA Y PROFESIONALIDAD DE LA FISCALíA

 El fiscal cubano subrayo que, a su juicio, la Fiscalía panameña actuó con ética y profesionalidad y agotó todas las diligencias posibles para demostrar que, efectivamente, Posada y los otros terroristas incurrieron en los delitos que se le imputaron: posesión de explosivos en su modalidad agravada, falsificación de documentos en el caso de Posada y de Jiménez, asociación para delinquir y delito contra la seguridad publica y colectiva.

 

 "La imputación fue absolutamente objetiva", afirmó. "No hizo consideraciones de naturaleza subjetiva en ningún momento. Es decir: ¿Posesión de explosivos? Ahí están los explosivos ocupados; ¿Falsificación de documentos? Ahí están los documentos falsificados. ¿Peligro común? ¡Quien después de escuchar un informe de expertos en explosivos que indican que la carga de C-4 que iban a utilizar tiene un rayo de acción letal de 200 metros y mas de 1000 con consecuencias también importantes, va a pensar que no constituye un peligro de haber trasladado eso desde la frontera con Costa Rica durante 500 kilómetros!"

 

 "Y cuando este automóvil con la carga destructiva esa pasó por el Puente de las Américas: ¿Qué pasaba si eso, por alguna casualidad, explotara? Ya no vamos hablar del Paraninfo de la Universidad de Panamá. Estamos hablando de cualquier lugar donde circuló esa carga explosiva que por algún error hubiese explotado", dijo el fiscal habanero.

 

 Al concluir sus observaciones, Fernández Guerra no dejo de señalar que las piezas oratorias del fiscal Arquímedes Saéz y de los abogados querellantes "además de objetivas, de contundentes, fueron verdaderas piezas oratorias magistrales en derecho". •