Madrid.- El afamado escritor y Premio Nóbel de Literatura José Saramago, acaba de expresar que "no ha roto con Cuba", y en España muy pocos ciudadanos se han enterado de esa afirmación, simplemente porque en este país europeo se ha preferido silenciar la noticia.
Contrario a lo que sucedió hace unos meses cuando la frase de Samarago "hasta aquí llegué con Cuba" recorrió el Viejo Continente de punta a cabo, y especialmente la Península Ibérica, lo expresado hace pocos días por el Premio Nóbel de Literatura comentario alguno.
Pero, más, todavía hay quien ha citado el "hasta aquí llegue con Cuba", por supuesto, haciendo caso omiso a la reciente manifestación de Saramago de que no ha roto con la isla caribeña.
Eso sí, todos mis compatriotas saben que el presidente del gobierno, José Maria Aznar, será abuelo pronto, además de que recibió un premio en Nueva York por ser "un defensor de la democracia, los derechos humanos y la libertad de prensa y expresión". Si, esa trilogía repetida una y mil veces por quienes hacen la guerra en Afganistán e Irak, y nada dicen de los prisioneros que permanecen en la ilegal base norteamericana de Guantánamo, en Cuba, sin ser procesados con garantías.
¿Dónde está la libertad de expresión?, si ni siquiera se respetan las declaraciones de un Premio Nóbel de Literatura, hechas precisamente en Lanzarote, una de las islas del archipiélago español de Canarias, y que fueron difundidas en México, Cuba y otros países de América Latina.
¡Ah¡, si, los llamados disidentes en Cuba, alentados y pagados por Estados Unidos y algunos gobiernos europeos, son muy conocidos en España porque, según se dice aquí, "luchan por la libertad de prensa y expresión".
Mientras, cinco cubanos que permanecen en cárceles de Estados Unidos, después de ser victimas de juicios amañados en Miami, Florida, unicamente por defender a su país de la continuas agresiones terroristas planeadas desde ese territorio norteamericano, no tienen derecho a tener derechos humanos y libertad de prensa y expresión. De esos patriotas cubanos poco o nada se dice en los medios de comunicación del Viejo Continente.
Entonces, ¿Qué es y dónde está la libertad de prensa y expresión? ¿Solo pueden tener acceso a ello los seleccionados por Estados Unidos y el Viejo Continente? ¿Y el resto a que tiene derecho? ¿A ser manipulado o silenciado?