Soeur Angele Rizzardo, la chef canadiense que viene a Cuba una y otra vez

Soeur Angele Rizzardo ya perdió la cuenta de cuántas veces ha visitado Cuba. Si le preguntas no sabe decirte. Más de 30, redondea. Pero si le pides una entrevista, ella, a sus 84 años te dice que sí, que claro, que en ese mismo momento, deja lo que está haciendo y se sienta a hablar.

La chef canadiense llegó por primera vez a Cuba en los años 90 y luego no paró de venir. No olvida nunca esos primeros viajes cuando hacía el programa Cocina al minuto con Nitza Villapol.

Después de eso le cocinaría a tres papas: Juan Pablo Segundo, Benedicto XVI y Francisco; y en medio de todo viajaría a Cuba, casi siempre con la cadena Meliá.

“¿Qué les cocinabas?”. Dice que comidas italianas fundamentalmente. También que para Benedicto XVI creó el queso “Fritz Keiser”.

Rizzardo, nacida el 11 de agosto de 1938 en Venecia, Italia, aprendió a cocinar a los 12 años. Nunca olvida cómo no podía faltar un día sin que, al salir de la escuela, fuera a practicar a un café llamado Bramezza.

Hoy habla francés perfectamente, pero lo aprendió en el Hospital Hotel-Dieu en Quebec, Canadá, luego de que llegara a ese país en 1955.

Dicen quienes la han entrevistado antes que 1975 marcó un punto de giro en su vida. Desde entonces y hasta 1980 recibió clases de cocina en el Instituto de Turismo y Hospitalidad de Quebec.

¿Y cuándo descubrió Cuba? Lo hizo cuando Fidel fue a verla a la escuela de Hotelería de Quebec y le pidió que viniera a asesorar culinariamente a Cuba.

Si hoy le preguntas te dice, sonriendo, que le gusta la personalidad de los cubanos, “simpáticos, muy generosos, inteligentes, creativo, prácticos, y con gran capacidad de invención”. No para de repetir la palabra creatividad. Tampoco “ayudar”. Dice que viene a Cuba a ello.

De la comida cubana prefiere ingredientes como los frijoles negros y el comino, aunque reconoce que sus fuertes son las cocinas italiana y francesa.

Soeur Angele ha dicho que su misión como chef consiste en “hacer comer bien a las personas con los productos que la tierra produce, porque un puñado de tierra es un puñado de vida”.

Por eso, a lo largo de su vida ha trabajado con fundaciones dedicadas a los niños y hospitales.

La chef se encuentra ahora mismo en Cuba como invitada de la cadena Meliá en FITCuba 2022, que cerró sus puertas esta noche de jueves en Varadero.

Vea además:

Cierra FITCuba 2022: La próxima feria estará dedicada al patrimonio cultural cubano en La Habana