El manager de los campeones declaró que estaba muy feliz y que habían disfrutado mucho jugar juntos. Foto: WSBC
El equipo de Venezuela venció 4x0 a la selección nacional de México y se proclamó campeón mundial en la categoría sub 23 por primera vez desde que se organizan este tipo de eventos.
Los comandados por Carlos Garcia, el “Almirante”, anotaron un par de carreras sucias en la misma primera entrada que fueron suficientes para que el lanzador Wikelman Ramírez asegurara el éxito, al caminar toda la ruta a ritmo de cuatro ponches y un solo boleto donde apenas pudieron conectarle un trío de sencillos.
Sendas marfiladas del camarero Reivaj Garcia y del antesalista Keven Lamas después de dos outs, les abrieron las puertas del plato a los sudamericanos, sin dudas el mejor equipo de los que se presentaron en esta Copa Mundial.
Dos capítulos más tarde dieron el tiro de gracia cuando Jesús Lujano pegó doblete al jardín izquierdo, avanzó a tercera por una rolata por el cuadro, Romer Cuadrado lo trajo a casa con un elevado al central, y Juan Fernández sonó un estacazo de cuatro esquinas completó la producción de los morochos por el resto de la jornada.
Saúl Castellanos fue el derrotado al permitir todas las acciones productivas de sus rivales en 2.2 episodios.
“No jugamos lo suficientemente bien para vencer a un equipo como Venezuela”, dijo al final del partido el manager de los anfitriones mexicanos Enrique “Che” Reyes.
“En cuanto a nuestro equipo, estoy muy contento con nuestros lanzadores. Nos faltó algo en la defensa. Pero déjame decir que en un juego ganas y pierdes. En general lo hicimos bien”, agregó.
Por su parte el manager de los campeones declaró que estaba muy feliz y que habían disfrutado mucho jugar juntos.
“Mis jugadores realmente querían este título mundial. Lo he buscado durante bastante tiempo, pero rara vez trabajé con un grupo de jugadores tan inspiradores”, agregó.
