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En pocas palabras: Participa en nuestro V Concurso de Microrrelatos, un lustro con el poder de lo breve

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La fuerza de la palabra y la grandeza de lo breve vuelven a ser convocatoria en estas páginas digitales.

Cubadebate, el Instituto Cubano del Libro (ICL), Ocean Sur, la Asociación Hermanos Saíz (AHS), Claustrofobias y Cubaliteraria invitan a participar en la quinta edición del Concurso de Microrrelatos, que se organiza desde 2017 y este año dedicamos a las vivencias en tiempos de COVID-19.

Haz, de este reto, la oportunidad de compartirnos tus mejores letras. ¡Participa! Los ganadores obtendrán una colección de novedades literarias de varios sellos editoriales, presentes de los organizadores y la posibilidad de publicar tu obra en nuestro sitio web.

¿Cómo convertirte en ganador/a?

Solo debes escribir un texto que no exceda los 1 000 caracteres (sin contar los espacios), a través del cual podamos descubrir al escritor que habita en ti. Encuentra en la escritura la libertad que ningún confinamiento puede arrebatarte y compártenos cómo has vivido este difícil tiempo de pandemia.

Que la creatividad, el talento y la originalidad sean tus mejores credenciales a la hora de redactar un cuento, el inicio de una novela o testimonio para la actual convocatoria.

Deja tu propuesta como un comentario en esta entrada. El plazo de admisión concluye el 31 de marzo, fecha en que se conmemora el Día del Libro Cubano y el aniversario 62 de la creación de la Imprenta Nacional de Cuba, a las puertas de festejar los 54 años del ICL (el 27 de abril).

Letras que salvan: (Pre)textos para contar tu historia

El jurado estará integrado por reconocidos escritores a propuesta del Instituto Cubano del Libro. Serán seleccionados tres premios. Los resultados se darán a conocer el 7 de junio próximo, Día de los bibliotecarios y las bibliotecas en Cuba, en recordación del periodista e historiador que se considera padre de la bibliografía cubana, Antonio Bachiller y Morales.

Contactaremos a los ganadores mediante el correo electrónico que registren al enviar el comentario con su obra.

En el contexto del Espacio Virtual del Libro en Cubadebate, iniciado el 15 de febrero y a celebrarse durante todo 2021, será este un momento especial para romper, desde la libertad y el poder de la literatura, el encierro al que nos ha obligado la COVID-19. Ocasión, además, para premiar el talento de quienes sueñan y salvan con la virtud de sus letras.

Se han publicado 982 comentarios



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  • Ariel Hernández Reyes dijo:

    Micro-Relato enviandolo nuevamente por si hubo algún problema de recepción

    Titulo: "Simplemente espero"

    El día pasa, transito del cuarto para la cocina, de la cocina para la sala, eso todo el día y yo, simplemente espero.
    Recuerdo que hace unos días jugaba con la niña, ella alegraba mi día, no tiene dos años todavía y cuanto me alegra, pero ahora me entristece haber jugado con ella, estoy a la espera del resultado, saber si la contagié, eso es lo que me preocupa, sin ser religioso, cada día y a cada momento me arrodillo y pido al Señor que nada le suceda, que deseo ver nuevamente su carita riendo, quiero verla alborotando mi vida, sonsacandome el corazón.
    Sueño con el día en que esta pandemia terminé, verla riendo en un parque de diversiones, que vea los animales en el zoológico, los peces en el acuario, que vea todo lo bueno que la vida tiene, porque eso deseo para ella, que me pregunte por las cosas de la vida, aunque quizás no sepa que contestarle, simplemente hacer su vida más alegre cada día.
    El día pasa, transito del cuarto para la cocina, de la cocina para la sala, eso todo el día y yo, simplemente espero.

  • lor dijo:

    Eran casi las 7 pm de una noche de marzo, corría el año 2020, siento el timbre del teléfono, respondo, era ELLA, -mi hermana estoy en la casa preparando las cosas, salgo para la habana mañana temprano, voy a integrarme a la Brigada Henry Reeve, no sé para donde me van a mandar, pero no importa-. –ni cocines que vamos para allá- agarré mis ollas con la comida que ya estaba hecha, las puse dentro de un bolso grande y le dije a mi hija – vamos que tu tía se va mañana de misión. Al otro día , entre 7 y 8 de la mañana estamos en el parque esperando la guagua que la llevara a la Habana. Se fue un poco antes del mediodía, hubo retraso en Holguín. Varios días de llamadas diarias, la despedida con su adorado retoño, la luz de sus ojos.
    5 de abril de 2020, día tristemente inolvidable para la familia (14 años de la partida de la madre amorosa y amada), día en el que siempre se nos escapan lágrimas de añoranza y tristeza, ELLA se monta en el avión que la llevará a su tercera misión. Serán solo 3 meses. Barbados los recibe agradecida.
    11 de marzo de 2021, ELLA aún no ha regresado, ELLA aún no sabe cuándo regresará. Nosotros, acá, seguimos cuidándonos y esperándola, con el corazón lleno de orgullo y amor por ELLA. Dra. Daymarelis

  • Ana Maria Fariñas Reinoso dijo:

    ¿Me pueden decir cómo enviar la obra al concurso?¿Cuál dirección de email?
    Espero que me respondan si no no podré participar. gracias

    • Scorpion dijo:

      Hola...
      Tienes que comentarlo así mismo...
      Saludos...

    • Scorpion dijo:

      Hola...
      Tienes que comentarlo aqui mismo...
      Saludos...

    • Rubén dijo:

      Envíe su microrrelato como un comentario

    • LisyQ dijo:

      Ana María, debe publicar su retrato justamente aquí .
      Saludos

    • FLY dijo:

      A este microrelato le daría un premio...

  • Ana Maria Fariñas Reinoso dijo:

    ¿O hay que enviarlo por esta página en este espacio de comentarios?

  • Scorpion dijo:

    El Imán del Sur..

    La conocí un 28 de oct, mis primeras palabras fueron.
    ¡Que detalle más hermoso tu frase de presentación, serás seguramente una mujer excepcional!
    La frase rezaba... "No es lo que siento por ti, es lo que no siento por nadie más"
    Agwecarri era su Nick, una argentina luchadora por la Unión de América Latina, una imagen del Che la guiaba por la vida y su fuerza para unir era tan colosal que me atreví a apodarla, "El imán del Sur". Amaba a Cuba y a su gente, era la dama de las listas.
    Un día desapareció de las redes, pasaban los días, la preocupación aumentaba entre sus seguidores, hasta que ocurrió lo insólito e inesperado, una repentina enfermedad cercenaba su vida dejando una estela de lágrimas y lamentos.
    ¡¡Noooo!! Decíamos todos, no queríamos creer lo inevitable.
    Lina Montenegro había pasado a otro plano, más, su gran sabiduría dejaba a miles, unidos para siempre.
    Te recordaremos #Agwecarri con tu frase favorita.
    "Vamos a lo nuestro, un me gusta y arrancamos"

  • Hairo dijo:

    “Breve historia familiar”
    Mis hermanos y yo, del miedo, no nos levantábamos por la noche.
    Decían que nuestra casa estaba embrujada. De madrugada los sillones se movían solos y en la cocina chocaban con estrépito los vasos y botellas. Magia negra, decían.
    Sólo después de unos años, siendo ya un hombrecito, me confesó mi padre que el amor sabe mejor si se hace a oscuras, en un sillón, que en la cama. Sobre todo si después se tiene un trago para apagar los ardores.

  • Jorge Fernández Era dijo:

    POSITIVO
    Mi vecino ni se despidió el día que vinieron a buscarlo. Habíamos conversado horas antes a través del alto muro sobre su PCR y lo difícil de que un tipo tan huraño, sin gatico y con perrito, agarrara la covid. Pensé me conocía poco, pero antes de montar en la ambulancia amarró a su mascota en mi reja. Intuyó el poco apego por los animales que tuve hasta unos días después.
    Acogí al pastor con la seguridad del regreso del viejo tras el quinto día. La doctora arguyó que las cosas iban mal, que la complicación mayor era el ánimo por el piso ante la noticia de que ninguno de sus dos hijos había llamado, que una sonrisa a medias apareció en su rostro cuando una enfermera le enseñó la foto enviada por mí desde el patio minutos antes de que le instalaran el respirador artificial, el mismo del que salió dos días después ya muerto, sin apenas dar tiempo al barrio a especular con la posibilidad.
    Sus descendientes abren puertas y ventanas de la casa para ventilarla. No reaccionan a los ladridos del perro, que se aferra a mi pantalón y gime. Parece reclamar que no lo devuelva a una morada que ya le es ajena. Exige sea yo el que me cuide de una enfermedad que pudiera dejarlo huérfano de cariño.

  • Cheito Sil20 dijo:

    Amanece un viernes en Venus, como cada día a esa hora, se hace la luz. El universo viaja en espiral, cada instante es igual al anterior, muere Dios, y vuelve a nacer.
    En las cuevas, desgasta una vela las estalagmitas, cocuyos y azulados totíes danzan un vals. Un coro de sinsontes, sapos soprano y cotorras de Babel, gorjea contracantos que huelen a alquitrán y tierra mojada.
    Siete deshielos después, se subastan pieles de mamut, falos disecados y dientes de dinosaurio como amuletos. Las confituras y enlatados de la sociedad de consumo son simples antigüedades desordenadas sobre un tablero de ajedrez.
    Parpadea un pez, y cada vez, espacio y tiempo, son todo y nada. Deambula en su bola de cristal engullendo gusarapos que hacen copias idénticas de sí mismos, segundos antes de su destino final, siglos después de su creación.
    Magia negra, desnudos ligeros. Los alquimistas esculpen la utopía. Unas brujas atizan un caldero: azufre, polvo de estrellas, sangre azul, excrementos de unicornio, lágrimas de cíclope, recuerdos tenues de avestruz... Amanece viernes, se hizo la luz.

  • one girl dijo:

    Hice el equipaje para marcharme lejos d tu amor
    empaqué canciones tristes
    papel y lápiz
    tengo suficientes pañuelos
    versos para alimentarme y tener fuerzas en el camino
    para los recuerdos no tenía espacio

  • julioisacesar dijo:

    El conejo que comía uñas.
    Había una vez un conejo que parecía muy similar a los demás. Vivía en un viejo y olvidado campo de fútbol natural lleno de agujeros y hortalizas, abandonado después de la pandemia del 2020. Casi todos sus parientes se fueron norte arriba o sur abajo, buscando las porterías y opciones de grada para futuras definiciones de penales. Él se quedó en el comienzo del juego, muy cerca del círculo principal, lleno de dudas. Poco a poco empezó a relacionarse con los demás cuando el campo de fútbol empezó a ponerse muy chiquito para tantos conejos y se empezaron a achicar las distancias. Tenía que vencer el miedo, empezó a reír, cantaba, saltaba, y un día logró que lo contrataran en un negocio de belleza, le dieron confianza, empezó a trabajar de ayudante de almacén donde habían pinturas, lentes, espejuelos, extensiones, pestañas postizas de todos los colores y tamaños, uñas..
    Una noche el conejo estaba organizando mercancía nueva y sin darse cuenta por el cansancio y la hora se comió todas las uñas, la noticia corrió como pólvora y alguien le dijo al jefe por la mañana, enseguida lo removieron , no era confiable, y lo pusieron a trabajar en el comedor, dónde pocos hablaban con él y cada día además de fregar tenía que escribir el menú en una tablilla de cartón esperando cumplir la condena. Cuando fueron a entregarle la libertad y su perdón, el amigo conejo estaba muy nervioso, apenado, al estirar su mano, el jefe se asombró al ver que era un manojo de carne, pelo blanco y sangre, que se comía las uñas...

  • Naranja dijo:

    El cuento:
    En estos tiempos de cuarentena, necesidades y medicamentos estoy haciendo la cola para comprar unas butifarras caseras, entonces me encuentro con una amiga de consulta de mi padecimiento de Claudicación Intermitente. Coincidíamos la muchacha rubia y yo, ella necesitaba tratamiento para coagulación de sangre y yo todo lo contrario. Ella sangraba, le salía sangre por las orejas, otras veces por la nariz, y así. Pasó el tiempo y no nos vimos más. Yo por suerte mejore mucho. En los 45 minutos de espera en la cola para que abriera el negocio de venta de aquellas morcillas ella me dijo que ha mejorado mucho también, pero que no fué más al médico, simplemente se adaptó y evolucionó, que unas de las cosas que provocaba más su sangrado era en el tiempo de menstruación, porque cuando se ponía el tapón, la sangre se le salía por cualquier otra parte. Yo me quedé asombrado, y le pregunté que como estaba resolviendo esa situación ahora y sin medicamentos, me dijo que simplemente se reinventó; entonces, en ese momento abren la puerta del negocio y la gente comienza a organizarse. Un empleado que la ve y le dice:
    - Jefa, estamos listos!

  • Dito Ferrer dijo:

    En una cama de hospital, Jesusito esperaba dentro de una jaula.
    El mundo afuera se difuminaba entre destellos de luces y períodos de sueño-vigilia. Muy débil, permanecía conectado a una pantalla que emitía un pulso constante, terrible.
    Respirar dolía en cada intento, una máscara ajustada a su boca, permanecía siempre fría y húmeda.
    Los médicos se movían a su alrededor, protegidos con trajes especiales. Un reloj digital pegado a la pared registraba el paso del tiempo.
    Solo una voz familiar disipaba la niebla de lo desconocido. Mamá estaba allí, y le contaba historias.
    Su preferida era la del jardín sin tiempo. Un niño había trepado un árbol y llegado al cielo. Un mago le explicó que "allá abajo" el tiempo se detendría hasta que regresara. Era un deseo concedido solo el último día de diciembre. Hizo una gran fiesta y se quedó allí durante todo un año.
    Mamá terminó la historia, quedó en silencio. Jesusito la sentía sollozar. Se imaginó levantándose y dándole un beso. Pensó en su padre, y se avergonzó. Lo había desobedecido. Se había escapado para casa de David a escalar árboles. Pero David estaba enfermo, y él también había enfermado.
    A través de las paredes escuchaba los ecos de la ciudad. Las personas celebraban.
    Dentro del hospital era diferente. Los médicos susurraban instrucciones para voltear, sacar sangre, hacer daño.
    Miró al reloj, se extinguían los últimos minutos del año. Debía apresurarse a pedir su deseo. Pero, ¿qué pedir?
    Tuvo un sobresalto y una punzada en el centro de la espalda. Quiso respirar pero no pudo. Automáticamente el pulso estable de la pantalla mutó a un sonido intenso. Lo rodearon siluetas blancas. Sintiéndose desvanecer aferró su mirada al reloj que marcaba los últimos compases del año. No había tiempo. Pidió el deseo.
    El mundo desapareció ante sus ojos.
    Despertó en un lugar agradable, rodeado de árboles y nieve. Mamá y Papá preparaban una fiesta, rodeados de amigos.
    Detenido sobre el cielo, un enorme reloj digital marcaba la 11:59:59. Cantaron, bailaron y rieron.
    Unos instantes después Jesusito abrió los ojos. A través de la ventana el sol acariciaba su piel. Escuchó una voz familiar y un beso cálido se posó en su mejilla. Sonrió.

  • Sandy Salgado Alonso dijo:

    Solo la distancia me separa hoy de mis hijas, de mi amor, de mi afecto a amigos, de ser el afable y empalagoso cubano que soy. Pero estoy contento... Ellos no están contagiados, ni lo estarán. Yo los cuido desde la distancia.... ¿Cuidas tu a los tuyos?
    Despierto y a mi lado estan mis hijas la epidemia pasó y es solo un amargo recuerdo, pero ellas están aquí.... Estamos

  • Isabelino dijo:

    Recuerdos de un tiempo oscuro.
    Como todas las tardes la ansiedad por llegar a casa me invadía al salir de la escuela. La curiosidad de un niño de 7 años por ver que regalo "robado" le tenía guardado su abuela, era tal, que al llegar a casa se olvidaba de dar las Buenas tardes. De súbito subía las escaleras para abrazar y besar a su abuela, lo del regalo era secundario. Ella lo esperaba cada tarde sentada en su sillón de mimbres frente a su ventana de vidrios cuarteados. -Un mango abuela, que rico- decía mientras simulaba comerlo. -Que no te vean tus hermanos que no tengo para todos- no entendía porque abuela mencionaba a otros hermanos si el único niño en casa era yo, ni porque le decía el nombre de abuelo a papa. En fin eran cosas que en ese momento no entendía. Y así sucedió tarde tras tarde, cucharas, periódicos viejos, papel sanitario, eran algunos de los regalos "robados" que mi abuela guardaba con celos en espera del beso y mi abrazo. De repente todo cambio, una cinta amarilla bordeaba la casa, unos hombres de batas blancas haciendo de todo Cómo para que me invadiera el pánico, no entendía que estaba pasando, solo la voz de mi abuela lograba calmar mi agitado corazón. A los pocos días nos llevaron a un hospital, yo lloraba desconsoladamente, no era conciente de cuanto había cambiado nuestras vidas. El tiempo pasó, un dolor se apoderó de mi, el sillón de mimbre estaba vacío, una flor sentada en el, marchita, un virus me había "robado" mi mas preciado regalo.

  • Isabelino dijo:

    El rostro del mañana.

    Y por fin lo pincharon, su rostro estrujado disimulaba el dolor. Tan sólo dos segundos tardaron en inocularle abnegación, soberanía, amor, patria y vida. Su semblante cambio, ahora sus ojos brillaban, una sonrisa se dibujaba en su rostro, estaba feliz, estaba satisfecho, estaba curado.

  • VNG dijo:

    "En tiempos de Covid"
    Ana contrajo el rostro, tomó el mando y mientras soltaba una palabrota apagó el televisor; acababa de ver la revista informativa que transmite Telecubanacán. Estaba sola en casa y sin percatarse hablaba en voz alta.
    _A quién se le ocurre suspender las clases y luego poner a los muchachos a cuidar las colas. Es mejor que no suspendan el curso. Para cuidar las colas está la policía no los estudiantes. Ahora mismo lo voy a compartir en facebook.
    Se abrió la puerta, llegó la niña de la casa, lavó sus manos, se desprendió del nasobuco y se desplomó en la butaca _ ?Me das un poquito de agua?
    Ana se acercó con un vaso entre sus manos _?para qué era la reunión? preguntó.
    _ pidieron disposición para organizar las colas en las tiendas y
    _!Habrás dicho que no! Repostó rápido la madre sin dejarla terminar.
    _No te preocupes, no tendré que organizar las colas, el lunes entro en zona roja, se necesitan voluntarios y di mi disposición.
    Ana se dejó caer en la otra butaca e intentó hablar pero su hija fue más rápida
    _Necesito llevar galletas y cosas para merendar, eso le toca a papi, tú me haces un pudin y una comidita rica el domingo que invité a Pepe a comer. !Ah! también, se quedará a dormir.

  • Lediher dijo:

    Despertó temeroso. Levantó levemente la cabeza y observó la impresionante cinta que con su amarillo semblante trazaba los límites entre su casa y todo contacto con la realidad de afuera. Esa realidad apenas distinta. Se volteó y dio la espalda. Un suspiro de alivio escapó de sus adentros. La alegría lo asaltaba y se regaló una media y cómplice sonrisa. Pronto llegaría nuevamente el médico a regalarle toda la ciencia y la bondad que necesitaba.

  • Ricardo dijo:

    Título: Deseo

    Guauu!! que mirada más seductora como si fuera suya, esos ojos color azul pero con picardía,sus labios atractivos y jugosos que de solo mirarlos me ponen a cien. Que deseo de hacerlo mio, de repente se acerca a mí, me pongo nerviosa, no se que hacer, parezco una niña al declararse a su primer amor, no lo puedo creer, estoy perpleja, que cuerpo tiene el galán, se acerca con esa mirada q tanto deseo. Cada vez se acerca más y yo me derrito pero no puedo mostrárselo, no puede notar lo nerviosa que estoy. Cuando está tan cerca pienso que me va a robar un beso y me vuelve loca de solo imaginarlo,pero me doy cuenta que se acerca a mí oído, y me susurra "Eres mia y solamente mía", esas palabras, que me ponen la piel de gallina de solo escucharlo, de repente siento que estoy húmeda y sin darme cuenta de cómo sucedió, mi cuerpo me pide a gritos que me entregué por completo a el, que me convierta en una bestia ,que saque mis más oscuros deseos. Que cumpla todas mis fantasías en la cama. Ya no aguanto más. En un segundo me agarra el pelo, estoy asombrada de lo fuerte que es pero a la vez gentil. Me domina por completo, mi cuerpo es suyo y él lo sabe.

  • Pparadise dijo:

    ENTREVISTA AL PESCADOR DE NUBES Periodista: ¿Cómo se siente pescar una nube?Pescador: Es como andar con el estómago vacío, los ojos llenos de nubes y la botas
    llenas de mierda y se sonríe ampliamente
    Periodista: ¿Tiene usted alguna sentencia en particular?
    Pescador: Sí. “Hágale caso a su estómago".
    Periodista: ¿ Para que sirve?
    ¿Tiene “búsqueda” pescar nubes?
    Pescador: No sé… nunca me he puesto a pensar en esa pregunta.
    Bajó la cabeza reflexivo y desconsolado. Sentí vergüenza, no debí preguntarle. Me sentí culpable con esa pregunta tenía la impresión que le había
    movido el piso, cuestionando su últimos años y lo inútil que era pescar nubes, como los niños que recogen vidrios molidos en la playa pensando que son
    esmeraldas. No podía evitar la ultima pregunta:
    Periodista: Bueno y entonces ¿Por qué lo hace?
    No se derrumbó. Irguió la cabeza con orgullo y
    me dijo con su voz metálica:
    Pescador: Con el mayor respecto, ustedes los periodista no pierden el habito de hacer
    preguntas estúpidas, ¡Es evidente!… ¿No ves cómo reflejan el alma de la ciudad?

  • Nordiel dijo:

    Ya puedo jugar con mis amigos,ya puedo besar a abuela,ya puedo volver a la escuela,ya me vacuné.
    -Niño,niño,despierta que ya es la hora de la teleclase

  • Carlos Javier Perdigón dijo:

    Allí, a lo lejos, donde el horizonte acaricia el pálido palpitar,; allí comienza a latir un intrépido corazón, un corazón maltratado por una tormenta despiadada, desechado aliento que entorpece la palabras. Allí, donde la tierra llora y donde el bienestar inquieta, allí está la mano salvadora, el ímpetu solidario y el alma honesta que lucha por destruir la pandemia que nos cala, allí, hermano, amigo, paciente está el aliento cálido de un médico cubano

  • Carlos Javier Perdigón dijo:

    Allí, a lo lejos, donde el horizonte acaricia el pálido palpitar,; allí comienza a latir un intrépido corazón, un corazón maltratado por una tormenta despiadada, desechado aliento que entorpece la palabras. Allí, donde la tierra llora y donde el bienestar inquieta, allí está la mano salvadora, el ímpetu solidario y el alma honesta que lucha por destruir la pandemia que nos cala. Allí, hermano, amigo, paciente está el aliento cálido de un médico cubano.

  • Yasel Toledo Garnache dijo:

    La culpa
    Estoy al borde de un precipicio. Veo el fondo del barranco y me asusta. Tengo demasiados recuerdos.
    Mi padre nunca me perdonó. Muchas veces me dijo asesino, monstruo. Me pegaba, y me pedía que se la devolviera.
    Dice que aún siente su aroma, escucha pasos en la sala, sus carcajadas en la cocina... Me tortura, me obliga a admitir que la culpa fue mía, pero la verdad es que yo hubiese preferido ni nacer. La culpa y el barranco, el barranco y la culpa….
    Hoy lo encontré tendido sobre el suelo, sin moverse, sin hablar, sin poder pegarme ni abusar nunca más. Había un papel cerca de él: "También muero por tu culpa, asesino". Y en eso sí tenía razón.

  • Dante César Pupo García. dijo:

    999.

    El alazán estaba exhausto de los espuelazos y los dos cayeron suavemente; pero el crepitar de las vértebras cervicales del jinete se escuchó a cientos de metros. En el hospital, cuando despertó, oyó a alguien decir que el cuadrúpedo tuvo la culpa. Intentó girar la cabeza y no pudo. Un enfermero con una cofia cónica se le acercó y, como para desconcertarlo, le dijo al oído:
    "Sabes que eres un espectro de lo que serás; un proyecto inacabado de lo que podrías ser; una hipótesis conjugada de pasado y futuro; casi todo, casi nada, casi algo..." Acto seguido (sin que nadie lo notara) le acuñó la cabeza con un número imprescindible para el viaje, diciéndole al mismo tiempo: Este es tu código de entrada, te espero en el Noveno Círculo; a lo que el jinete respondió muy sedado:
    "Sí, ya sé, en la cuarta zona, he estado allí anteriormente..."

  • Julio César dijo:

    El cuento:
    Anoche dormí un poco asustado, me acosté con una picazón en la garganta y de vez en cuando tosiendo, me dió por aguantar la respiración y controlar el tiempo, 45 seg pude aguantar, después aguanté 1 minuto. Sin dudas estaba asustado. En una de las veces llegué a la superficie tan asfixiado que desperté a mí esposa y casi me cuesta salir del cuarto. Al final logré dormir, pero me despertaba por intervalos, muy intranquilo.
    Estoy consumiendo muchas noticias del Coronavirus y todas son negativas. Llevo muchos días en casa, y la situación general indica que esta carrera de supervivencia es larga.
    Ahora pensando, creo que ayer de tarde también estuve un poco asustado porque me puse a hervir en una cacerola agua para inhalaciones, le puse mentol y alcanfor, me cubrí la cabeza con una toalla e hice 10 sesiones de 1 minuto cada una.
    Hoy me desperté temprano, a lo mejor también un poco asustado, me tomé la tensión, y fuí a desenterrar los papeles de la cuenta bancaria para poner un beneficiario, compartí las claves de las páginas web y me senté a mirar fotos viejas de una gaveta polvorienta.
    Ahora mismo creo que estoy un poco asustado, estoy escribiendo recostado en la hamaca y casualmente por ahí viene mi esposa:
    - Arriba, holgazán! Levántate! Que te toca hacer el almuerzo!

  • César dijo:

    El cuento:
    Resulta que todos los días, después del cañonazo a las 9:00 pm, todos nos paramos en los balcones, puertas y ventanas, y empezamos a aplaudir a los trabajadores de la salud.
    Exactamente a las 9:22 pm, mi Jevita está sentada en el balcón, y la vecina en el balcón de al lado empieza a aplaudir desordenadamente, María le dice:
    -Vecina, un poco tarde, pero la intención es lo que vale...
    -Niña! Has visto que mosquitera se ha despertao!
    Y yo me tiré pal piso y casi me ahogo ...

  • María dijo:

    El cuento:
    El peo del conejo perdido
    Hubo una vez alguien de dientes grandes que apodaban "Conejo", a quien todos trataron de ayudar y nunca se dejó. Hablaron con él, le dejaron señales, mensajes, pero no escuchó. Bebía mucho, trasnochada, no estudiaba. Cuando pasó el tiempo de aprender todos empezaron a olvidar hasta su nombre. Y se oyó decir:
    - Ese no va a llegar lejos
    - Ese se cree cosas
    - Ese es carne de cañón
    - A ese lo coje la rueda
    Ya a nuestro conocido le llamaban "S", ni Conejo, ni zanahorias.
    Pero nunca es tarde para encontrar el camino, S nunca bajó la cabeza y nunca se rindió.
    - Tú sabes a quién ví ayer de voluntario en el hospital atendiendo a pacientes de Covid 19?
    - Ni idea
    - Al Conejo
    - Y quién es ese?
    Tampoco se rindieron sus mejores amigos, por eso S logró insertarse en el título del cuento desde el principio, no una, sino el doble de veces, y logró cambiar su destino. Entonces se pudo leer:
    "El peSo del conSejo perdido"

  • L.R,A dijo:

    El relato està en mi imaginaciòn, al hoy ver en las noticias la muerte de dos niños en un naufragio que su madre pensando solo en esa mujer que era, saliò corriendo en una lancha que su amado trajo para llevàrsela sin darse cuenta del crimen que cometia al separar esos àngeles de sus abuelos, de su escuela, de sus amiguitos.
    No le diò tiempo a recitar en La Florida el texto aprendido para pedir el "axilo polìtico" tan socorrido y obligatorio que le exigen los defensores de los derechos inhumanos para otorgarle el permiso luego de un año con un grillete en el piè , como tatuaje permenente recordando que ellos mandan, allà claro.
    Que pena con los que se quedaron.
    Todo el amor del mundo a un hombre, no vale el sacrificio de arrastrar a dos hijos por el mar.
    No siempre hay delfines que te empujan hasta la orilla.

  • César dijo:

    Cuento:
    La estación espacial internacional orbita la tierra a unos 400 km de distancia. Hay capacidad para 15 módulos. Tres cosmonautas estaban en ella antes del 2020, y desde el 9 de abril, se les unieron dos rusos y un americano. Actualmente se encuentran en la estación espacial internacional 6 personas. Tres rusos varones y tres estadounidenses de los cuales hay una mujer.
    Ella se pasaba horas mirando la tierra, pensaba en su familia. Desde que llegaron los tres últimos astronautas ha existido un poco de miedo por temor a que el Coronavirus también hubiera viajado sin boleto al espacio. Han pasado 5 días, y ella empezó a toser desde muy temprano.
    El equipo decide aislarla por temor. Pero ella no pudo contagiarse sola en caso de ser posible un contagio por el Covid 19.
    Ya han pasado 10 días.
    - Aquí tierra, llamando a Estación Espacial
    Ya han pasado 15 días
    - Aquí tierra, llamando a Estación Espacial
    El mundo está convulsionado pidiendo respuestas. Se ha hecho un llamamiento para voluntarios a ir a rescatar a los astronautas. No hay muchas personas disponibles, y empezaron a preparar un cohete.
    - A ver ustedes, sí, ustedes, de dónde son?
    - Nosotros somos cubanos!
    - Y son Astronautas?
    - Oye mira acere, nosotro vamo pa cualquier lao, acere que te pasa? Pa dónde hay que ir? Tú no nos conoce a nosotro! Apúntano ahí. Que te pasa, eh.

  • Julio dijo:

    El cuento 25:
    Abril se va. Se está yendo el cuarto mes, por mayoría el más impulsador, pero esta temporada no rindió, a tal punto que puede ser bajado a triple A. No dió jonrones, se ponchó muchas veces, no llenó los stadiums, y de seguro se queda sin trabajo. Este mes abierto se ha mantenido cerrado todo el tiempo. Mi prima Vera que viene todos los años, no llegó. Pero no se va solo el cuarto mes, se lleva a decenas de miles de una vez. Nos deja un aplauso, una esperanza, nos deja un encierro, una máscara, un miedo grande. Abril se va, pero no es para tanto, tendremos un reemplazo y vendrá otro Abril lleno de flores para otra temporada, o para otra, o para otra, con mucha gente, y si Dios quiere con nosotros, oyendo el béisbol:
    - Noooo, no, no, no, no, no, díganle que no a esa pelota...
    Y mayo?

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