El alfabeto griego. Imagen tomada de abcdario.org.
De una temporada ciclónica “extremadamente activa” en el Atlántico norte ya hablan los entendidos del Proyecto de Meteorología Tropical de la Universidad Estatal de Colorado y los del Centro de Predicciones Climáticas de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos; se está previendo, para este 2020, un total de tormentas nombradas entre 19 y 25.
De acuerdo con USA Today, Brian McNoldy, investigador de la Escuela Rosenstiel de Ciencias Marinas y Atmosféricas de la Universidad de Miami, dijo que es probable que haya más tormentas que nombres. Él se refiere a los veintiún nombres aprobados para la temporada en curso.
Hasta ahora se han formado nueve tormentas tropicales, por lo cual se han utilizado nueve nombres; otros doce están disponibles: Josephine, Kyle, Laura, Marco, Nana, Omar, Paulette, René, Sally, Teddy, Vicky y Wilfred.
Según el Plan Operativo sobre Huracanes para América del Norte, América Central y el Caribe, “si el CNH [Centro Nacional de Huracanes] utiliza todos los nombres previstos para un año determinado y necesita más nombres, deberá recurrir al alfabeto griego (alfa, beta, etc.)”. Por ejemplo, en 2005, después de la formación de Wilma se desarrollaron seis tormentas más (entre el 22 de octubre y el 30 de diciembre), y se emplearon los nombres de las primeras seis letras del mencionado alfabeto.
Una curiosidad: En 1972, tres tormentas híbridas (subtropicales) fueron observadas. La primera, formada en mayo, se llamó Alfa, y la tercera, en noviembre, Delta. En aquella temporada se utilizó el Alfabeto Internacional de Deletreo Radiotelefónico.
Aclaraciones, recomendaciones
El archipiélago cubano puede ser azotado o no por huracanes con independencia del comportamiento que la temporada tenga. Claro, preocupa que un período extraordinariamente activo de formación de ciclones tropicales coincida con un rebrote de COVID-19 y un complejo escenario económico.
Les sugiero que, en redes sociales, compartan informaciones claras en relación con determinado ciclón o la temporada en general. Apéguense a fuentes confiables. Y si ven que una depresión, tormenta tropical o huracán se está aproximando, no se sienten a esperar a que decreten la primera fase. Mucho se puede adelantar en casa (limpiar, amarrar, podar). Aprovechen los días de aislamiento social.