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“Nunca más”, un día sin mujeres en México

Una mujer yace en el suelo durante una protesta para conmemorar el Día Internacional de la Mujer en la plaza Zócalo de la Ciudad de México el 8 de marzo de 2020. Foto: Mahe Elipe/Reuters.

Un gran vacío se observa hoy en ciudades de todo México por el paro nacional que tiene casi sin mujeres calles, comercios, oficinas y todo lugar público en las que habitualmente están por decenas.

Este lunes se cumple el día sin mujeres en protesta no solamente por el feminicidio de que son víctimas las mexicanas y que es documentado con el expediente de tres mil 200 asesinadas en tres años y de cuyos casos apenas un uno por ciento o menos ha sido procesado judicialmente como doloso o feminicidio.

La horrorosa cifra incluye a varias niñas de primaria, violadas y torturadas por sus captores antes de asesinarlas.

Aunque hay discrepancias y muchas mujeres no se suman al paro, diversas fuentes -porque no hay un centro organizador del paro- estiman que lo acatarán unos 40 millones de féminas.

La protesta sigue a una jornada muy complicada por el Día Internacional de la Mujeres cuando salieron en masa a exigir sus derechos, pero como en otras ocasiones, las demandas y marchas fueron enrarecidas por actos de violencia y vandalismos que distorsionan los objetivos de las protestas.

La convocatoria para Un día sin mujeres fue emitida por la colectiva Brujas del mar, con el fin de crear conciencia sobre el papel de ellas en la sociedad, y se fueron sumando agrupaciones de toda naturaleza y partidos políticos de forma espontánea o dirigida en un ambiente aparentemente caótico pero in crescendo.

Además de ser una protesta contra la violencia de género que se vive en México, donde en enero fueron asesinadas 10 mujeres diariamente de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se extiende a todo tipo de discriminación que siembra una insoportable desigualdad en contra de ellas.

La iniciativa es inédita para México, pero no para el mundo, pues es copiada y adaptada a las condiciones nacionales de algunos países donde las mujeres se han organizado para exigir sus derechos.

La experiencia que más se destaca aquí es la de Islandia, que implementó el Día libre de mujeres en 1975 cuando alrededor de 90 por ciento de ellas faltó al trabajo y a sus escuelas, exigiendo el respeto a sus derechos y libertad.

También se hace referencia a Estados Unidos donde se llevó a cabo un movimiento conocido como DayWithoutAWoman en 2018, tras una serie de comentarios misóginos emitidos por el presidente Donald Trump, y otro movimiento similar en Polonia para protestar en contra de la penalización del aborto en octubre de 2016, conocido como Lunes Negro.

El paro de hoy no es un día de asueto sino de lucha, según sus voceras, que inundan con mensajes las redes sociales hasta saturarlas, sino un espacio para reflexionar sobre la violencia que se vive diariamente en México.

En los mensajes por las redes se recomienda a las que estén en las calles que lo hagan llevando una prenda morada o un pañuelo para demostrar que están de acuerdo con el movimiento, aunque por la naturaleza de su trabajo tengan que acudir a este.

Las mujeres denuncian que la Fiscalía General de Justicia capitalina, por ejemplo, abrió 170 carpetas de investigación en nueve meses, pero judicializó menos de uno por ciento y los crímenes quedaron impunes.

En nueve meses, añaden, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Ciudad de México solo vinculó a proceso a cuatro personas por el delito de feminicidio, a pesar de esa cantidad de expedientes de investigación abiertos.

Ante la ineficiencia para acabar con el feminicidio, organizaciones de la sociedad civil, entre ellas el Observatorio Nacional Ciudadano de Seguridad, Justicia y Legalidad (ONC), exigen medidas concretas que prevengan y erradiquen la violencia criminal y la desigualdad.

Para ellas, los feminicidios son solamente la punta del iceberg de un problema de discriminación más grave y del incumplimiento del deber del Estado, pues la administración no ha demostrado que los feminicidios, la discriminación por sexo, la desigualdad y otras violencias contra las mujeres sea un tema prioritario, declararon.

En una evaluación de la situación actual de la mujer, el presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró que su gobierno es respetuoso de la libre manifestación de las ideas de la ciudadanía, pero ellas exigen menos retórica y más acciones para que los problemas denunciados, sean eliminados. Es el sentido de la demanda del “Nunca más”.

(Con información de Prensa Latina)