La desigualdad es un factor común en las protestas, al igual que el deseo que tiene la gente de ser escuchada, dijo el secretario general de la ONU. Foto: Noticias ONU.
“Es claro que hay un déficit creciente de confianza entre la población y el establishment, además de que aumentan las amenazas al contrato social”, afirmó en días pasados el secretario general de la ONU, António Guterres, al comentar sobre la ola de movilizaciones sociales que ha sacudido a varios países del mundo.
Guterres, quien urgió a los Gobiernos a respetar los derechos de los manifestantes a expresarse pacíficamente, enfatizó que “no puede haber excusas para la violencia” y llamó a los líderes a escuchar los problemas de la gente y a abordar la creciente desigualdad que motiva muchas de las protestas.
La oleada de manifestaciones que hace noticia diariamente en distintos países del Medio Oriente, América Latina, el Caribe, Europa, Asia y África tiene un detonante común, pese a que cada situación es única, dijo el secretario general de la ONU en declaraciones a la prensa en Nueva York.
"La gente quiere igualdad de condiciones y que los sistemas sociales, económicos y financieros funcionen para todos. Quiere el respeto de sus DDHH y tener voz en las decisiones que les afectan".
-- @AntonioGuterres sobre la ola de protestas en el mundo. https://t.co/PwKHkGpNxo pic.twitter.com/XidfAhrAkQ
— Naciones Unidas (@ONU_es) 25 de octubre de 2019
Al mismo tiempo, el mundo sufre el impacto de la globalización y las nuevas tecnologías, “que han incrementado las desigualdades en las sociedades”, consideró.
Guterres señaló que algunas protestas son motivadas por cuestiones económicas como las alzas de precios, la persistente inequidad o los sistemas financieros que benefician a las élites, mientras que otras se deben a demandas políticas, la corrupción o la discriminación.
Sin embargo, la desigualdad es un factor común en todas ellas, al igual que el deseo que tiene la gente de ser escuchada.
La gente -señaló- quiere justicia social y económica, respeto al ejercicio de sus derechos humanos y participación en las decisiones que les afectan.
“Urjo a los líderes de todos los países a escuchar los problemas reales de la gente real”, dijo, y agregó que el mundo precisa ambición para lograr una globalización justa, para fortalecer la cohesión social y para mitigar la crisis climática, como lo plantea la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
“Con solidaridad y políticas inteligentes, los líderes pueden mostrar que lo han entendido y optar por el camino hacia un mundo más justo”, sostuvo el secretario general de Naciones Unidas.
(Con información de Noticias ONU)