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Ideas creativas para desarrollar el vínculo familia, barrio, escuela y trabajo

Llegamos a la segunda temporada de los ejercicios de análisis y pensamiento creativo sobre problemas reales y actuales en nuestra sociedad. Hace algunos meses realizamos una convocatoria para proponer temas de interés.

Se propusieron 32 temas, y luego de la votación realizada por ustedes y un leve trabajo de fusión y cura editorial de mi parte, llegamos a los siguientes 10 temas, que iremos abordando mensual o bimestralmente, no necesariamente en este orden.

Para los que debuten en este tipo de ejercicio, recordamos que lo fundamos a propuesta de varios de ustedes, buscando contribuir a la solución de problemas que confrontamos en nuestra vida social.

Sabemos que algunos no participan, pensando que los decisores ni se involucran y tal vez ni se enteran de nuestro ejercicio intelectual analítico y creativo; pero les puedo decir que tengo evidencias de que esta realidad ha ido cambiando para bien.

Así que exhortamos a los parapensadores a dedicarle un tiempo a cada uno de los temas que iremos publicando entre 2019 y 2020.

Vamos a comenzar por un tema muy a tono y tiempo con el recientemente iniciado curso escolar 2019-2020.

Desarrollar el vínculo familia-barrio-escuela-centro de trabajo.

Es generalmente aceptado que la educación depende de varios factores y actores sociales, entre ellos los aquí señalados. Existen otros que ustedes podrán incorporar y comentar, pero nos centraremos en estos cuatro.

Vamos con un marco teórico general, como parte del método científico.

La familia es la primera, más directa en lo biunívoco, la iniciadora en la siembra de valores. Hay familias funcionales y otras rotas.

La escuela, desde el círculo infantil-preescolar-primaria, es de uno a muchos, tiene que trabajar con personitas de diferentes características personológicas en formación y la de sus padres y abuelos. En la escuela resalta la figura del maestro, junto al auxiliar pedagógico, directivos y demás trabajadores del centro.

El barrio, las personas que conviven en una demarcación territorial, suele llamarse como vecinos. La diversidad está asegurada. Como sucede en la familia, algunos barrios funcionan bien y otros pueden ser una fuente inagotable de conflictos interpersonales.

El centro de trabajo, es donde los padres o abuelos trabajan, bien como trabajadores simples, hasta el director general de una empresa, un ministro, u dirigente de organizaciones políticas y sociales.

Ahora viene lo bueno, sus consideraciones, criterios, convicciones, dudas, proposiciones.

Como siempre les digo si lo que escriban además de bueno es breve, será doblemente bueno.

Recuerden que:

“La única idea inservible es la que no se comparte”.

¡Manos, mente y corazón a la obra!