Trump se dirige a ambas cámaras del congreso. Foto: Getty Images.
Los 535 miembros del Congreso, el gabinete presidencial en pleno y los integrantes del Tribunal Supremo, junto a decenas de invitados entre los que sobresalen algunos cuya presencia ha permitido a los medios adelantar los temas que serán abordados, asistirán este martes al segundo discurso de Donald Trump sobre el estado de la Unión, su primero en una Cámara de Representantes de mayoría demócrata.
Como señal de ese nuevo escenario de pérdida de mayoría en el Congreso, está el hecho de que durante la ceremonia -cuya sede es la Cámara de Representantes-, cerca de Trump estará la líder de la mayoría demócrata en el Congreso, Nancy Pelosi.
Un alto funcionario explicó a los periodistas en una rueda de prensa telefónica la pasada semana que el discurso girará en torno al lema “Eligiendo grandeza”, una especie de variación del “Make America Great Again” (Haz a Estados Unidos grande de nuevo), que marcó la campaña presidencial de Trump.
Además de la infaltable mención a Venezuela, un tema que muchos analistas mencionan en primer lugar es el de la inmigración. En la lista de invitados están al discurso -retrasado varios días debido al cierre parcial de la administración por varias semanas-, están la hija, la nieta y la bisnieta de Gerald y Sharon David, que este enero fueron asesinados en su casa de Reno (Nevada) por un inmigrante sin papeles.
A algunos el gesto les trajo reminiscencias de la campaña para las elecciones parciales de noviembre pasado, cuando los republicanos usaron la herramienta de criminalizar la inmigración como medio de movilizar electores.
Republicanos criminalizan inmigración como herramienta para movilizar a electores en Estados Unidos
Había dudas entre los analistas en torno a si Trump hablará también en el discurso -en el que generalmente se destacan logros y definen prioridades y cursos de acción- sobre el tema de la crisis fronteriza en la línea limítrofe con México y la necesidad de un muro que pare a los migrantes, cuya financiación fue el detonador de la falta de acuerdo en el Congreso en torno al presupuesto y llevó al cierre parcial de la administración.
Si Trump ha decidido invitar a familias afectadas por inmigrantes, los reportes indican que por el lado demócrata hay, entre los invitados, presencias no gratas al presidente: científicos expertos en cambio climático, inmigrantes, activistas por los derechos de la comunidad LGBTI, feministas y trabajadores federales afectados por el cierre parcial de la Administración.
Trump también invitó a Matthew Charles, que tras 22 años en la cárcel por vender drogas se convirtió en enero en el primer preso beneficiado por la reforma criminal que promueve el presidente, por lo que ese debe ser otro tema que tocará el presidente de EE.UU.
Otro punto en el discurso de Trump es la crisis por la adicción a los opiáceos, que causa cada día 200 muertos en el país por sobredosis y afecta a cuatro millones de estadounidenses, ya que entre los invitados de Trump está Ashley Evans, quien se ha recuperado de su adicción y recientemente celebró su primer año de abstinencia.
Uno de los puntos inciertos es si Trump aprovechará el discurso para anunciar la fecha de su segundo encuentro con el líder norcoreano, Kim Jong-un.
Según lo adelantado por la Casa Blanca, otros puntos que serán abordados en el discurso presidencial son los acuerdos que busca la administración Trump para equilibrar el déficit comercial, el aumento del gasto en infraestructuras, la reducción del costo del acceso a la sanidad y la política militar y diplomática.
(Con información de agencias)