La actitud del Presidente de Brasil para con los médicos cubanos, es inhumana, injusta, denota prepotencia y falta de humanidad. Realmente Bolsonaro, afecta a su propia gente y pone en riesgo la salud de los más humildes, los desposeídos, los que no tienen acceso al pago que demanda la medicina que ejercen los galenos privados. Obviamente, ese no es el presidente que el hermano Brasil necesita.
La actitud del Presidente de Brasil para con los médicos cubanos, es inhumana, injusta, denota prepotencia y falta de humanidad. Realmente Bolsonaro, afecta a su propia gente y pone en riesgo la salud de los más humildes, los desposeídos, los que no tienen acceso al pago que demanda la medicina que ejercen los galenos privados. Obviamente, ese no es el presidente que el hermano Brasil necesita.