Cubadebate

El cubano Osniel Solís alcanzó una merecida ubicación entre los 16 mejores de los 66 kilogramos.. Foto: Emanuele Di- Feliciantonio.

“El judo es propiedad japonesa y los demás son intrusos con respeto”, dice un refrán popular por estos contornos. Y como si se tratara de una verdadera novela del deporte, Uta Ube e Hifume Ube hicieron historia en este deporte, con el primer doblete dorado de hermanos en una lid del orbe, jornada en la que el cubano Osniel Solís alcanzó una merecida ubicación entre los 16 mejores de los 66 kilogramos.

Si el día anterior la ucraniana Daria Bilodid se había robado el show, este viernes lo hicieron estos jóvenes nipones de 18 y 21 años, respectivamente, quienes para más espectacularidad le recetaron a sus rivales una exquisita técnica de uchimata —de libros dirían algunos especialistas—, para reafirmar a su país en la punta de la tabla con tres de los cuatro cetros puestos en disputa en la Sala Deportiva Nacional de Gimnástica, sede del XXXVI Campeonato mundial de Judo.

En el caso del único representante cubano en el segundo día de actividades, Osniel Solís (66 kg), su camino iba enfilado a una ubicación entre los ocho punteros hasta que le tocó enfrentar al israelita Tal Flicker, quien lo derrotó por wazari, como si estuviéramos viendo la misma película de la cita universal de Budapest en el 2007, cuando lo superó también, pero en la ronda de 32.

La pelea entre ambos siempre se antojó difícil desde que se conoció el sorteo, pues definía el avance de ambos a cuartos de final, es decir, entre los siete primeros, pues en el judo se entregan dos bronces e igual cantidad de quintos y séptimos puesto. Solís había asegurado que iría por la revancha de hace 12 meses y peleó por eso, pero fue sorprendido con una técnica Segoe-nae, sobre la que no tuvo defensa.

Vestido de blanco por vez primera en la competencia, el capitalino entró al tatami convencido de que podía cambiar el resultado contra el número uno del ranking del orbe en la actualidad y bronce mundial pasado (aquí finalizó quinto), pero lo amonestaron primero por pasividad y luego no pudo extender a regla de oro el combate, pues en los últimos segundos Flicker cambió la táctica y le marcó el wazari ganador.

“Sabía que se trataba de un combate muy complicado, pero me siento bien, a pesar del resultado, porque lo di todo por la victoria. Me hizo una técnica que nunca esperé porque en medio del combate cambió su táctica. No obstante, yo reitero que se le puede ganar, aunque sea una piedra en mi camino de los mundiales”, comentó Solís en la zona mixta.

Con anterioridad, el campeón centrocaribeño y panamericano había rendido dos buenas demostraciones tras quedar bye en la ronda inicial. Comenzó despacio su primera presentación, en la que fue subiendo de ritmo a medida que corrían los minutos. Dos shidos en el tiempo reglamentario para el iraquí Mohamed Alsaedi no bastaron para definir el éxito, lo cual consiguió con un perfecto wazari en regla de oro.

El próximo compromiso elevó la exigencia del antillano, dada la experiencia del belga Kenneth Van Gansbeke, a quien nunca había enfrentado, pero sí lo estudió muy bien junto a sus entrenadores, de ahí que pudiera marcarle wazari faltando 55 segundos con técnica de hombro, sobre la que no tuvo defensa el europeo.

“Di un paso de avance respecto al mundial pasado. Acumulé 320 puntos para el ranking y solo me quedo inconforme porque estaba preparado para más. Quiero seguir así para clasificar a los Juegos Olímpicos de Tokío 2020, mi meta superior”, declaró Osniel, primero de los cinco cubanos del elenco varonil que debuta en este campeonato mundial, con sede en la Sala Deportiva Nacional de Gimnástica de Bakú.

Este sábado saldrán al tatami por Cuba Anailys Dorvingny (57 kg), quien no competirá en la primera ronda por quedar bye, pero luego peleará con la ganadora entre la rusa Anastasiia Konkina y la rumana Corina Stefan. Por su parte Magdiel Estrada (73 kg) abre con el austríaco Lukas Reiter y de ganar enfrentará al rumano Alexandru Raicu. En su llave está el número uno del ranking del orbe, el japonés Soichi Hashimoto.

En esta segunda fecha del certamen del orbe tuvo lugar también, antes de la disputa de las medallas, una pequeña ceremonia inaugural con la presencia de Ilham Aliyev, Presidente de Azerbaiyán, y Marius Vizer, titular de la Federación Internacional de Judo.

Podio de Premiación (21 de septiembre)

52 kilogramos

1.- Uta Abe (JPN)

2.- Ai Shishime (JPN)

3.- Amadine Buchard (FRA)

3.- Erika Miranda (BRA)

66 kilogramos

1.- Hifumi Abe (JPN)

2.- Yerlan Serikzhanov (KAZ)

3.- Baul An (KOR)

3.- Georgii Zantaraia (UKR)

En el caso del único representante cubano en el segundo día de actividades, Osniel Solís (66 kg), su camino iba enfilado a una ubicación entre los ocho punteros hasta que le tocó enfrentar al israelita Tal Flicker, quien lo derrotó por wazari. Foto: Emanuele Di- Feliciantonio.

Uta Ube e Hifume Ube. Foto: Captura de pantalla de YouTube.