Catherine Ibargüen volvió a ganar el triple salto en una final de la Liga del Diamante. Foto: Sitio del Weltklasse Zúrich
Zúrich, Suiza.- La ratificación de 10 de los 12 ganadores de hace un año y un récord para el circuito en la bala entre hombres fueron los primeros saldos de la definición de la Liga del Diamante 2018, que comenzó a vivirse en esta ciudad y cerrará mañana en Bruselas.
El Weltklasse acogió por novena ocasión consecutiva uno de los colofones de la afamada serie y lo hizo con su habitual esplendor competitivo y de organización.
La única plusmarca de la jornada la firmó el neozelandés Tomas Walsh con 22,60 metros en la impulsión de la bala. Monarca del orbe en Londres 2017, llegó aquí con registro líder de la temporada de 22,67, y con su triunfo repitió lo disfrutado en esta misma ciudad en el 2016.
Lo máximo para estos eventos era del estadounidense Joe Kovacs (22,56) desde el 17 de julio del 2015, y mucho más antigua para el Weltklasse: 22,42 metros que el también norteño Randy Barnes implantó el 17 de agosto de 1988.
La repetición de trofeos entre las mujeres fue perfecta. La sudafricana Caster Semenya (800 metros), la estadounidense Dalilah Muhammad (400 c/v), la griega Ekaterine Stefanidi (pértiga), la keniana Hellen Obiri (5000 metros) y la rusa –que compite bajo bandera neutral- Mariya Lasitskene (salto de altura) resultaron las responsables.
Pero si de todas ellas se esperaban esos reinados, también se suponía que la triplista colombiana Catherine Ibargüen recuperara el suyo, y aun sin acercarse a sus mejores registros –dominó con 14,56 metros- disfrutó como pocas su quinto diamante.
“No pensé en la marca, solo en ganar… Estoy feliz y esto no ha terminado, mañana voy por la longitud”, dijo con evidente satisfacción la ganadora consecutiva desde el 2013 al 2016.
Logró su registro en el segundo intento y casi se puso en peligro cuando en el quinto la jamaicana Shanieka Ricketts marcó 14,55 metros… pero hasta ahí llegó, porque una salida después no pudo ir más allá y la campeona olímpica de Río 2016 respiró con tranquilidad.
Una que festejó su primer reinado fue la velocista Murielle Ahouré, de Costa de Marfil, quien venía de dominar la clasificación con 37 puntos y esta noche se confirmó con 11.01 segundos en los 100 metros.
Por los hombres solo en la jabalina y la bala no se repitieron los monarcas, y entre los que cumlieron esa aspiración llamó la atención la aparente facilidad con que la logró el estadounidense Noah Lyles en los 200 metros.
Esa era una de las pruebas más promocionadas con anterioridad, pues se suponía que el turco Ramil Guliyev opondría mayor resistencia. Sin embargo el joven norteño de 21 años recién cumplidos no dejó dudas de su buen momento y ganó con 19.67 segundos sin necesidad de “mirar” a los lados cuando sobrepasaba la meta.
El campeón del orbe de Londres 2017 estaba muy lejos para alcanzarlo. Su tiempo fue de 19.98 segundos y más tarde declaró sentirse cansado, aunque contento con su segunda plaza. “He bajado de los 20 segundos cinco o seis veces en esta temporada, eso es bueno, porque además ha sido muy larga. Me confirma que voy por el camino correcto”, confesó el también rey de Europa.
El keniano Conseslus Kipruto “devoró” con inteligencia los 3000 metros con obstáculos, venció con solo cuatro centésimas de diferencia al marroquí Soufiane El Bakkali (8:10.15 minutos por 8:10.19) y fue de los “repetidores” de la jornada.
También se confirmaron el sudafricano Luvo Manyonga en el salto de longitud y el keniano Timothy Cheruiyot en los 1500 metros. El primero aprovechó la ausencia del lesionado cubano Juan Miguel Echevarría y ganó casi sin oposición marcando 8,36 metros, y el otro superó en casi un segundo completo a su compatriota Elijah Montonei Manangoi (3:30.27 por 3:31.16minutos).
En general fue otro espectáculo de buen atletismo en una sede en la que gusta este deporte. El estadio se colmó y la afición fue parte del show… Todo terminó con el habitual paseo de los ganadores en autos que forman parte del soporte a disposición de los organizadores y hubo pirotecnia de lujo.
Mañana la historia será muy parecida en el Memorial Van Damme de una Bruselas donde también hay tradición de organizar este tipo de citas. Allí se repartirán los otros 16 premios finales del circuito y sí habrá presencia cubana con las discóbolas Yaimé Pérez y Denia Caballero.
(Tomado de JIT)