Cuando nos adentramos en las bien redactadas y coherentes historias, nos sentimos como si Frank País reviviese ante nosotros. Foto: Cubadebate
Ese hombre que está frente a nosotros , ya entrado en años, sonriente, que muchos conocen simplemente como Pepito Cuza, nos da ahora su primer libro: “Historias en mi mochila" , donde ha podido atrapar en 205 páginas, 47 fotos y más de 15 momentos trascendentales heroicas acciones de la guerra revolucionaria en ciudades y montañas contra la tiranía de Batista.
Cuza de una extensa vida como revolucionarios comenzó como combatiente del Movimiento 26 de julio en Santiago de Cuba y alcanzó los grados de capitán del Ejército Rebelde en el Segundo Frente Frank País.
Después del triunfo se mantuvo en las filas de la Fuerzas Armadas Revolucionarias llegando a ser jefe de la Marina de Guerra Revolucionaria, donde alcanzó el Grado de Contraalmirante. Jubilado desde hace años, hoy nos trae momentos de la historia de aquellas luchas.
El texto presentado este lunes 9 de abril por la Editora del Instituto de Historia en la Sociedad Económica de Amigos del País es un importante aporte al conocimiento de la lucha insurreccional , narra además importantes hechos de los primero años de la revolución casi inéditos. Algunos de ellos fueron adelantados por primera en diferentes ediciones en CUBADEBATE.
Tienen el mérito de su gran valor testimonial, de quien actuó con valentía y desinterés para engrandecer la Patria poniendo por delante su vida y bienestar personal, que continúa de pié entre nosotros, en la Revolución.
Cuando nos adentramos en las bien redactadas y coherentes historias, nos sentimos como si Frank País reviviese ante nosotros. Ahí está mirándonos, hablando, disparando, el corajudo, inteligente y audaz maestro, que se convirtió en héroe siguiendo las lecciones de Martí e inspirándose en los luchadores del Moncada, liderados por Fidel Castro.
Así se presentan en un lenguaje fluido las acciones del 30 de noviembre. Con toda crudeza se describe el día que mataron a Frank.
Se trae ante nosotros a una verdadera heroína: América Domitro, su novia. Mujer combatiente de extraordinario valor.
Ella, joven bella, siempre con su sencillez y entrega, sin reclamar nunca reconocimientos materiales, ni medallas, ni pensó en ser diputada… Cuando Playa Girón sufrió un atentado de la contrarrevolución que le dejó dos heridas. Murió a los 35 años en 1963.
Pepito nos trae hechos desconocidos de la huelga del 9 de abril. Ahí están los luchadores clandestinos que la organizaron. Porque como él nos asevera: no fue un revés, fue una victoria.
Un lugar especial lo ocupan narraciones sobre el Segundo Frente Oriental Frank País, dirigido por su jefe el Comandante Raúl Castro Ruz, héroe del Moncada y el Granma.
En sus descripciones de los combates guerrilleros parece que las balas silban y rugen las ametralladoras. Así llegan, combate tras combate, hasta alcanzar el triunfo revolucionario a golpes de audacia, valentía y sangre derramada.
A Pepito le tocó, ser el jefe de la Policía Nacional Revolucionaria en el Palacio Presidencial. Allí lo mandó el comandante Raúl Castro en el convulso mes de marzo del año 1959 en medio de ataques, traiciones y movilizaciones de nuestro pueblo para que la revolución no se perdiera.
Toda aquella vorágine revolucionaria desfila hojas tras hojas con detalles íntimos, que causan el asombro. Así, el historiador detalla qué sucedió aquél 17 de julio de 1959 cuando Fidel renunció a su cargo de Primer Ministro. Fue testigo de primera línea.
Pepito Cuza estuvo en Girón disparando, junto a Fidel, que en determinado momento del combate lo cubrió con su ametralladora para que cambiara el cargador de su FAL. Ese hecho lo descubres leyendo a Cuza… ¡No se lo pierdan!
Después lo asignaron a la Marina de Guerra Revolucionaria. Ahí se aprecian sus experiencias, la lucha contra piratas, la organización de la Academia Naval de la Republica para formar oficiales y soldados de la marina de guerra, la mercante.,la Pesca y Tropas Guardafronteras.
Casi siempre una cobertura periodística comienza por versionar las intervenciones de los que hicieron uso de la palabra. Mensajes que expresan, claro está, ideas importantes sobre la obra y su autor.
Así fueron las palabras iniciales de Rosario Esteva Morales , editora de “Recuerdos…” , quien manifestó que el libro no solo tiene trascendencia para nuestro pueblo sino para la juventud a quien le toca seguir con la bandera de la Patria en alto. Porque tal vez no conocen en detalle esta epopeya que aparecen ahora escritas con un aire protagónico.
En la presentación se escucharon las improvisadas palabras de Raúl Roa Kouri (Raulito), experimentada figura de etapas de nuestra diplomacia revolucionaria, quien consideró que el libro parece dedicado para las nuevas generaciones.
Recordó lo que escribió, su compañero y amigo, sobre la Huelga de
abril de 1958. No fue una derrota, expresó, sino un motor de
movilización, al igual que el Moncada. Convirtió a Cuba en una gigantesca hoguera contra Batista.
Reflexionó Roa que quizás muchos jóvenes piensan que ahora no hay la posibilidad de luchar por defender a Cuba contra un enemigo con las armas en la mano, como entonces. “El imperialismo nos agrade de otra manera, lo que no significa que no podría agredirnos bélicamente otra vez”, afirmó.
“Ellos saben que en nuestro país existe un pueblo capaz de defender hasta la última gota de sangre su independencia y su soberanía. Eso lo sabe hasta el imbécil de Trump, que realmente lo es lo es “, dijo.
Hemos sufrido, entre otros a varios cretinos como Bush y Truman, este último un verdadero asesino. Con su sentido de racismo, de superioridad. Ordenó el lanzamiento de las bombas atómicas contra Hiroshima y Nagasaki. No eran para salvar las vidas de estadounidenses, sino porque Japón era un país “inferior”, así lo consideraban.
Expresó el diplomático que esa historia vuelve a repetirse con Trump, quien da marcha atrás al paso timorato de Obama, cuando reanudó relaciones con Cuba, aunque tampoco renunció a los intereses estratégicos de derrocar la revolución cubana, pretendía hacerlo por otros medios.
Roa felicitó al Instituto de Historia por el texto, pues ve la luz en un momento de la historia en que hace falta para las batallas que estamos librando y las que tendremos que librar.
Por su parte René González Barrios, director del Instituto de Historia, recordó las intervenciones de Cuza en el Centro Dulce María Loynáz , donde hizo gala de su patriotismo. Demostró su sapiencia, su capacidad de comunicación.
Recordó sus relatos expresados con mucha viveza. Los contó desde la perspectiva de un combatiente con mucha sencillez e hidalguía. Por eso
cuando concluyó una de sus intervenciones surgió la propuesta de los
presentes que se publicara todo lo que había narrado.
“Nosotros hicimos, lo que él se merece: hacer el esfuerzo para difundir parte sus memorias”, dijo.
Estamos convencidos que junto a las testimonios de los héroes de la independencia también deben publicarse las historias de la lucha clandestina y la guerra de liberación. Que los jóvenes no vean esas historias como lejanas, hay que rescatarlas, sostuvo González y adelantó planes del Instituto de Historia para publicar otras obras.
Para concluir la presentación de Recuerdos en mi Mochila, José Cuza expresó su alegría porque en el acto estaban amigos y compañeros de todas las etapas, desde que fue un niño hasta ahora .Recordó por sus nombres a algunos combatientes de diferentes momentos, que lucharon por la Revolución.
Exaltó a las mujeres que arriesgaron sus vidas cuando eran casi unas niñas trasladando armas, sufriendo persecuciones y torturas. Mencionó a algunas presentes, como fue a Mercedes Verdecía Fernández.
Presentó a su segundo en la lucha clandestina en Santiago de Cuba, Hector Asensio, quién un día como hoy, 9 de abril, hace 60 años estaba en los tenebrosos calabozos del Cuartel Moncada.
Destacó la presencia de tres de los casi 300 combatientes del Ejercito Rebelde, que junto a Fidel en la Sierra Maestra, derrotaron la Ofensiva de Verano u Operación Fin de Fidel de 1958, Roberto Hernández, Orlando Pupo y Alfonzo Zayas.
Resalto a sus subordinados y compañeros de las marinas, como fue al comandante Isidro Contreras, preso por los sucesos del 5 de septiembre de 1957 y ejemplar jefe de las principales unidades de la MGR.
Destacó al capitán de navío ® Alejandro Rodríguez Roque, quien combatió contra el contrarrevolucionario buque artillado REX en defensa de las costas cubanas; a varios Capitanes de la Marina Mercante, quienes transportaron en sus buques las tropas cubanas para cumplir las misiones internacionalistas en África.
Anunció que otro libro sobre el Segundo Frente Oriental “Frank País”, denominado “De combates e ilusiones”, mucho más detallado y extenso, al que dedicó varios años de trabajo, y que ahora está en revisión, y espera que aparezca en fecha no muy lejana, expresó.
Por ultimo exaltó la colaboración del sitio CUBADEBATE que dio a conocer estas narraciones en diferentes momentos, lo que lo estimuló a seguir escribiendo. Hoy todas ellas se presentan como un libro, que espero les sea de utilidad a todos los cubanos
Evocó a los que combaten en otras tierras, tal vez en condiciones más desventajosas que las nuestras, porque como decía Camilo: esos que luchan, no importa dónde, también son nuestros hermanos.