El gobierno intentará impedir que se repitan graves incidentes como los registrados el domingo pasado, cuando no pudo jugarse el clásico Nacional-Peñarol y fueron detenidas casi 200 personas. Foto: Archivo.
El gobierno de Uruguay anunció que prepara una serie de medidas contra la violencia en el deporte, para impedir que se repitan graves incidentes como los registrados el domingo pasado, cuando no pudo jugarse el clásico Nacional-Peñarol y fueron detenidas casi 200 personas.
"Nosotros queremos que vuelva la familia al fútbol, pero queremos que el fútbol además demuestre que está en condiciones de organizar un Mundial, y eso requiere la cooperación de los clubes y de la Asociación Uruguaya de Fútbol" (AUF), señaló el ministro del Interior Eduardo Bonomi, en referencia a la iniciativa anunciada por Uruguay y Argentina de organizar en sociedad el Mundial de fútbol de 2030.
Entre las medidas anunciadas se encuentra la colocación de cámaras de identificación afuera y dentro de los principales estadios, y un sistema de control dactilar para el ingreso.
La colocación de sistemas de cámaras es un tema controvertido en el fútbol de Uruguay, pues la federación y muchos clubes señalaron que no tenían fondos suficientes para su puesta en funcionamiento y demandaban que lo hiciera el gobierno.
Asimismo, se anuncia la organización del PADO (Porgrama de Alta Dedicación Operativa), con 300 policías especializados en asuntos vinculados al deporte y la supervisión de guardias privados. Los menores de 15 solo podrán asistir acompañados y la venta de bebidas será únicamente con vasos plásticos.
Este domingo el clásico no pudo jugarse por incidentes provocados por hinchas de Peñarol fuera y dentro del estadio Centenario, que provocaron saqueo de puestos de comida, choques con policías y agresiones a funcionarios.
(Con información de AFP)