Como regla consideramos ingeniosas las respuestas que inventan sin contradecir a lo dicho en el texto, ya que de lo contrario sería otro el problema.
Estamos estimulando el pensamiento lógico-creativo.
Vamos por parte.
- El hombre solitario
Un hombre vivió solo en una casa durante dos meses. No recibió visitas ni nunca salió de la casa. Al final de los dos meses enloqueció. Una noche apagó el fuego y las luces y salió de la casa. Como consecuencia de su ida murieron 100 personas.
La pista es que el hombre tenía una responsabilidad cuyo incumplimiento podía originar un accidente masivo. Vivió solo en una casa. El fuego y las luces son señales luminosas. Asociando esas condiciones, se puede pensar en una torre o faro que da señales a las embarcaciones. Entonces viene una respuesta clásica: Era el torrero, que dejó desamparada a una embarcación que con más de 100 personas a bordo tuvo un trágico accidente.
Hubo respuestas creativas, pero con menor grado de coherencia. Por ejemplo suponer que la persona era responsable desde su casa de la calefacción de más de cien personas. Y otras que no comentaré.
- Hombre en el bar
Un hombre entró en un bar y solicitó al camarero un vaso de agua. Nunca antes se habían encontrado. El cantinero sacó un arma de debajo del mostrador y apuntó al hombre. El hombre dijo: “Gracias” y se fue.
Se dice que es uno de los acertijos más ingeniosos de todos los tiempos.
Loa aspectos clave serían; petición de agua, apuntar con una pistola al solicitante. Que sea un bar o cualquier otro establecimiento, incluso una casa particular, no resulta esencial, aunque ayude a dar colorido a las interpretaciones.
Un vaso de agua se pide por tener sed imperiosa, para tomarse una pastilla grande, porque se atragantó con algo, o porque tiene hipo, entre otras.
Se sabe que el hipo suele quitarse dándole un susto al que lo padece. Esa contracción muscular que provoca el susto puede cortar la continuidad del hipo.
Por tanto la respuesta clásica es que la persona que pidió el vaso de agua evidenció tener hipo.
Hubo respuestas ingeniosas con algún gazapo lógico.
- Los que imaginaron a un prófugo de la ley, a un asesino, a un bandido peligroso, fueron creativos, sobre todo quienes supusieron que el cantinero quiso perdonarle la vida.
- El arma era una pistola de agua. Con ella, el cantinero le sirvió el agua al otro hombre. Yo digo: Si hubiese apretado el gatillo, la respuesta hubiese tenido más sentido, solamente le apuntó. Ah tal vez era una pistola inteligente que al detectar un rostro se dispara.
- Una carrera de moto diferente
En esta carrera de motos, gana la moto que llegue en el último lugar. La carrera se realizó exitosamente.
La importancia de leer e interpretar. No se trata de que gane el motorista sino la moto.
Entonces la respuesta más convincente, sin dejar de ser creativa, es que la regla consista en que ningún motorista vaya en su moto, así cada cual intentará llegar primero para que su moto pueda ser la última en llegar.
El verdadero rompecabezas sería que dijera que gana el motorista que llegue en último lugar. Lo interesante es que algunos fue así como lo entendieron y dieron respuestas que en este momento prefiero no comentar.
Como de costumbre hubo quienes asociaron las tres situaciones con humorismo y chispazos cerebrales. Los disfrutamos mucho.