Cubadebate

Foto: Archivo

Lázaro Martínez y Cristian Nápoles se colgaron las medallas de oro y plata en la final del triple salto, y protagonizaron la mejor jornada para Cuba en el Campeonato Mundial Juvenil de Atletismo, que se disputa en Bydgoszcz, Polonia.

Se sabía que poseen todo lo necesario para batirse por la cúspide, pero subsistía la interrogante sobre el ordenamiento definitivo de uno y otro, aunque el primero siempre sumó más votos como favorito.

Su respuesta fue contundente: 17.06 metros que inscribió como lo mejor de la temporada para esta categoría y retención de la corona conseguida hace dos años en la ciudad estadounidense de Eugene.

En noche de temperaturas cercanas a los 20 grados y constante algarabía de sus compañeros desde las gradas del Estadio Zawisza, Lázaro se encargó de poner a todos de pie en el tercer intento, cuando superó su primer “17” en lo que va de año.

Había iniciado con 16.59 que desde entonces le situaron en la punta, luego registró inferiores 16.07 y cometió foul en el cuarto y último, en busca del récord mundial (17.50).

“Ya tenía ganada la competencia, por eso salí a intentarlo sin otra presión”, dijo a JIT al pasar por la Zona Mixta acompañado por su principal escolta en el estrado.

“Sabía que tenía que pulir algunas cosas para que el resultado saliera y estoy muy contento”, aseguró refiriéndose al salto vencedor.

“Estoy feliz, no solo por mí, también por la plata de Cristian, pues era lo que queríamos y lo cumplimos”, sostuvo.

“Es mi tercer oro consecutivo, si cuento el de Cadetes en el 2013, así que esa es otra razón”, agregó el guantanamero que posee 17.24 metros como marca personal y competirá en los Juegos Olímpicos.

Fue la tercera ocasión en que triplistas cubanos se agencian el 1-2 a este nivel y Lázaro elevó a tres el número de coronados de su país en par de ediciones consecutivas, sin distinción de especialidades.

En la suya Yoelbis Quesada inició en 1992 y le siguieron René Hernández (1996), David Girat (2002) y Pedro Pablo Pichardo (2012) antes que él se impusiera en el 2014.

Por su parte, Cristian dominó el mundial para menores de 18 años de Cali 2015 y vino concentrado en otro estrellato, apoyado en registros estables encabezados por 16.92 metros borrados este jueves de la cima del escalafón anual.

Quizás el deseo de hacerlo mejor en la final le llevó a mostrarse algo ansioso, aunque le sobran motivos para celebrar un subtítulo que hizo suyo desde que abrió con los 16.50 mejorados hasta 16.62 en cuarta y última salida.

La medalla de bronce fue a manos del francés Melvin Raffin (16.37) y Austria estrenó marca nacional con los 16.25 que dejaron cuarto a Philipp Kronsteiner.

Con estas dos preseas y el oro ganado ayer en longitud por Maykel Massó, Cuba ocupa el segundo lugar del medallero junto a los anfitriones, y solo es superada por Estados Unidos (4-3-2).

Más de la jornada

Muy bien se presentó la heptalonista Adriana Rodríguez, que también rompió su marca personal en los 200 metros con 23.95 segundos para elevar a tres las cotas superadas en cuatro eventos.

No por gusto lidera la agotadora prueba con 3 691 puntos, separada a 181 de la austriaca Sarah Lagger (3 510).

En la mañana la pinareña de 17 años había actualizado sus registros máximos en 100 con vallas (13.69 segundos) y salto de altura (1.80 metros). Más tarde logró 12,65 metros en la bala y con ello permaneció en la vanguardia.

Este viernes competirá en salto de longitud, jabalina y los 800 metros, tres eventos a los que puede sacar buenos dividendos para intentar el oro y su mejor acumulado histórico (5 547).

En los 400 metros Roxana Gómez se ubicó sexta con crono pasado a la cima de su expediente: 52.24 segundos.

La cita ya inscribió un récord mundial en la bala entre hombres, varias cotas nacionales y sigue generando caídas de máximos para estos encuentros, los más recientes en el sector femenino con los 100 planos de la estadounidense Candece Hill (11.07 segundos) y el salto con pértiga de la suiza Angélica Moser (4.55 metros).

(Tomado de Jit)

Lázaro Martínez durante una entrevista en 2013. Foto: Archivo de la IAAF