- Cubadebate - http://www.cubadebate.cu -

Anier García: Velocidad y precisión milimétrica (+ Video)

Foto: Archivo

Foto: Archivo

Por Abel Castillo Noriega                    

Hablar de Anier García es mencionar dosis de talento y dedicación en partes iguales. Su calidad lo llevó a conseguir grandes resultados en los 110 metros con vallas y a convertirse en ícono deportivo de la generación de cubanos que lo viera asaltar la gloria olímpica.

Esa mágica final de Sídney fue uno de los momentos más relevantes apreciados por quienes seguimos día a día el atletismo. Su fortaleza física se conjugó con la precisión milimétrica, al enfrentar cada uno de los obstáculos a lo largo de la pista. El pupilo de Santiago Antúnez puso énfasis en la técnica antes que en la velocidad y añadió su extra de campeón para conseguir la carrera perfecta.

A través de esta entrevista conoceremos sus valoraciones sobre aquella etapa, haciendo paradas en curiosidades como su relación profesional con el norteamericano Allen Johnson.

—Cuando se menciona a Anier García enseguida vienen a la mente los Juegos Olímpicos de Sídney. ¿Qué valor le confieres a tu actuación en esa cita estival?

—Sídney 2000 y Atenas 2004 fueron las actuaciones más importantes de mi carrera. El año previo a los Juegos Olímpicos había ganado los Panamericanos de Winnipeg y había obtenido buenos resultados en esa temporada.

Cuando arribé a la ciudad australiana me concentré en todo lo que debía realizar para lograr ubicarme en el podio olímpico. En la final corrí como lo hacía normalmente, salí a dar todo de mí y ya sabes el resultado.

«A Atenas llegué con problemas físicos producto de una serie de lesiones sufridas en momentos previos a las Olimpiadas. Esto imposibilitó que me preparara como cuatro años antes, pero saqué el extra y pude colgarme el metal bronceado. Esa medalla fue tan importante como la de oro porque estaba en el ocaso de mi carrera y muchos analistas deportivos no me ubicaban entre los favoritos. Me sirvió para retirarme con el honor de haber sido doble medallista en Juegos Olímpicos».

—Fuiste multimedallista en eventos mundiales y olímpicos, sin embargo no resaltaste por hacer grandes marcas. ¿A qué se debió esto?

—Yo entrenaba diariamente con la mente puesta en ganar todas las carreras a disputar pero no pensaba constantemente en las marcas. En varios momentos me sentí preparado mental y físicamente para lograrlo, pero desafortunadamente no me salieron.

Recuerdo una carrera en Zúrich que era para récord, en los últimos instantes perdí el ritmo con que venía, choqué con las últimas vallas y ahí se me escapó la posibilidad de realizar un buen tiempo. Esa es una de las cosas que no pude lograr en mi etapa de atleta y que desafortunadamente no podré resarcir.

—En el atletismo se está dando el fenómeno de atletas que obtienen resultados significativos en mundiales cadetes y juveniles, y cuando llegan al equipo nacional no se acercan a los resultados que consiguieron en estas categorías precedentes. ¿Qué mecanismos crees que deberían emplear nuestros entrenadores para revertir esa situación?

—Nuestros atletas y entrenadores se encuentran entre los mejores del mundo y una muestra de ello son los resultados alcanzados en las diversas categorías durante más de cincuenta años.

Hemos tenido varios campeones mundiales en las “cadetes” y “juveniles” que después no se insertan con éxito en la selección nacional, pero la clave es entrenar fuerte y ser dedicado a este deporte, para continuar el legado de las grandes figuras de la disciplina.

Los atletas cubanos están asesorados por entrenadores que tienen todas las herramientas para perfeccionar a estos valores que llegan al equipo nacional.

— ¿Cuán importante es en esta especialidad la relación entrenador- atleta?

—La relación entrenador- atleta es fundamental para conseguir buenos resultados en el alto rendimiento. Todos los entrenadores que pasaron por mi vida fueron determinantes en los resultados que alcancé a lo largo de mi carrera deportiva. Ellos me dieron las herramientas y aportaron su sabiduría en los momentos más importantes.

—Los seguidores del atletismo recordamos la rivalidad que sostuviste durante varias temporadas con Allen Johnson. ¿Cómo era la relación entre ustedes fuera de las pistas?

—Allen Johnson es en mi opinión uno de los mejores vallistas de la historia, un hombre que marcó una época dentro de esta disciplina. Entre nosotros había mucha paridad y ganaba el que mejor llegaba mentalmente a la competencia. La rivalidad que sostuvimos durante varias temporadas fue solamente en el ámbito deportivo porque fuera de las pistas somos buenos amigos.

«Después de que nos retiramos hemos seguido en contacto a través de las redes sociales y mantenemos las mejores relaciones. Él está laborando en la ciudad de Los Ángeles y recientemente me invitó para que impartiera una serie de conferencias».

—Hace un tiempo que asumió la responsabilidad de ser entrenador en la nación azteca. ¿Cómo asume este nuevo reto?

—Me encuentro trabajando en un Centro de Alto Rendimiento del Estado de Puebla, en México. La experiencia es muy enriquecedora y la estoy llevando bien porque aporto los conocimientos que me transmitieron los entrenadores en mi propia carrera. Es un proceso nuevo en el que tengo la alta responsabilidad de lograr que estos atletas se inserten en la élite de la especialidad.

Foto: Archivo

Foto: Archivo

Foto: Archivo

Foto: Archivo