La campaña electoral que decidirá quién será el nuevo presidente de Estados Unidos a partir de enero próximo mantiene hoy al republicano Donald Trump y a la demócrata Hillary Clinton como punteros de sus respectivos partidos.
Los resultados del supersábado que tuvo ayer como escenario a los estados de Nebraska, Kansas, Louisiana, Maine y Kentucky, también sirvieron para demostrar las pocas opciones de alcanzar la nominación republicana de Marco Rubio y John Kasich, a quienes Trump y Ted Cruz invitaron a retirarse de la campaña.
La disputa sabatina consolidó al magnate inmobiliario y al senador de Texas como los más sólidos aspirantes a conseguir la nominación por el partido de los elefantes, mientras que en las filas de los burros, Hillary Clinton sigue marcando distancia sobre su cercano oponente, Bernie Sanders.
El legislador tejano de origen cubano, Ted Cruz, logró superar a Trump en Kansas y Maine, mientras que el multimillonario neoyorquino venció cómodamente en Louisiana y Kentucky, destacaron medios de prensa norteamericanos.
Por su parte, el senador republicano por Florida -también de origen cubano- Marco Rubio, no consiguió imponerse en ninguno de los cuatro estados en disputa, relegándose a una tercera posición en la lista de preferencia de los rojos.
"Creo que Marco Rubio tuvo una noche muy, muy mala. Personalmente, le ofrezco que se retire de la carrera, creo que es el momento de que se retire", expresó Donald Trump, después que se dieron a conocer los resultados.
La renuncia de Rubio y de Kasich también fue sugerida por el precandidato Ted Cruz, cuando afirmó que "mientras el campo siga dividido, esto le da a Donald una ventaja".
Rubio despuntaba como la opción de los jerarcas del partido Republicano, los que no ven con buenos ojos el protagonismo de Donald Trump, que ya acumula 382 de los 1237 delegados necesarios para ser proclamado como el candidato oficial de su partido en la próxima convención nacional a celebrarse el 18 de julio, en Cleveland.
En las bardas demócratas, Hillary Clinton mantiene su ventaja sobre el senador por Vermont, Bernie Sanders, después de la contundente victoria en un estado tan importante como Lousiana.
A pesar que el candidato socialista se impuso en Kansas y Nebraska, la exsecretaria de Estado continúa avanzando segura por la nominación del partido azul, que se decidirá en la convención pactada para el 25 de julio, en Filadelfia.
(Prensa Latina)