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El diseñador belga, Olivier Debie, decidió llevar a los tribunales al Comité Olímpico Internacional (COI) supuestamente por plagiarle el logo de los Juegos Olimpicos de Tokio-2020.
Debie afirma que el logo de Tokio-2020 fue copiado de uno que él creó para el Teatro de Lieja (Bélgica).
Pese a que el diseñador japonés Kenjiro Sano salió a defenderse de estas acusaciones, el belga se mostró implacable: "tanto mi abogado y yo mismo creemos que el señor Sano no dio ninguna explicación que le permitiera demostrar el camino artístico de su creación", respondió Debie en un comunicado recibido por la AFP.
"Por lo tanto, en el estado actual, el señor Sano, en derecho internacional, no puede reclamar el concepto de creación independiente", añadió el diseñador de Lieja, que puntualizó que su logo fue ampliamente difundido por internet.
Los abogados de Debie y del Teatro de Lieja, Philippe Mottard y Alain Berenboom, respectivamente, enviaron el viernes una carta al COI y al Comité Olímpico de Japón, dándoles una semana para "cesar toda reproducción del logo de Tokio-2020".
"La primera fase del proceso judicial consiste en invitar al COI a comparecer delante de un tribunal civil belga", precisó el comunicado.
Por su parte, el COI, por voz de su vicepresidente, John Coates, juzgó que no "había ningún problema" con el logo de los Juegos Olímpicos de Tokio, señalando que esta imagen "no estaba protegida".
(Con información AFP)