La exigencia de más organización y control en la agricultura cubana, y el señalamiento de insuficiencias que persisten, caracterizaron hoy, en Bayamo, a la asamblea de balance de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños en la provincia de Granma.
En la reunión, previa al XI Congreso campesino, José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, y vicepresidente de los consejos de Estado y de Ministros, recalcó la necesidad de planificar bien los procesos, para aprovechar los recursos y evitar los llamados picos de cosecha.
También explicó que en el sector agropecuario aumentó la parcelación del terreno, en áreas individuales y cooperativas, lo cual dificulta la aplicación de determinados avances de la ciencia y la técnica.
Puso como ejemplo a la producción arrocera, cuyos mayores aportes corresponden a Granma, donde se requiere escalonar las siembras de todos los cosecheros, para que la recolección no se concentre en períodos cortos.
Una situación similar, dijo, existe en la ganadería, porque ahora la mayor cantidad de reses está en manos particulares y de las cooperativas, lo cual crea diversos obstáculos a la hora de acopiar la leche.
La solución estará en crear suficientes puntos para recoger y enfriar el alimento, además de convertir esos lugares en centros de servicio, de cara a la mayor cantidad posible de necesidades de los ganaderos, añadió.
Machado Ventura respaldó la opinión de que es posible adelantar en dos años, y terminar en el 2018, el actual programa de renovación de los cafetales, planteamiento hecho por el cooperativista Alenay Aguilera, del municipio serrano de Guisa.
William López, presidente de una cooperativa de Río Cauto, afirmó que Granma posee tierra, experiencia y otros elementos necesarios para alcanzar los niveles deseados en la producción de arroz, pero necesita mayor integración entre las empresas y las agrupaciones campesinas.
En esta rama, priorizada por su peso en la sustitución de importaciones, la llegada tardía de los recursos a manos de los productores, obedece a problemas organizativos, admitió Lázaro Díaz, director general del Grupo Agroindustrial de Granos, del Ministerio de la Agricultura.
Julio García, viceministro primero del sector, recordó la utilidad estratégica de concluir la elaboración de los programas municipales de desarrollo, que incluirán los aspectos correspondientes a las cooperativas, y estas deben exigir el cumplimiento de lo planificado, acotó.
(Con información de la AIN)