El número de fallecidos en Gaza se elevó este sábado a mil 980 personas, con posibilidad de aumentar debido a la gravedad de muchos heridos durante las 38 jornadas de bombardeos israelíes, informaron fuentes médicas.
El número de heridos es ahora de mil 181, precisó Ashraf al-Qedra, portavoz del Ministerio de Salud de Palestina en Gaza, quien agregó que la cifra de fallecidos podría aumentar en las próximas horas.
Al estado de gravedad de los pacientes se suman otros factores entre ellos la falta de suministros médicos adecuados, facilidades para los pacientes lesionados, los cortes energéticos de 18 horas.
Diversos hospitales reciben electricidad a través de generadores habilitados para la emergencia, pero también están afectados por la escasez de combustible para mantener el suministro.
Un total de 17 hospitales y siete clínicas recibieron daños durante los ataques, otros 10 hospitales y 44 clínicas de atención primaria de salud fueron cerrados por carecer de condiciones y 22 ambulancias quedaron destrozadas.
Los recursos humanos médicos también sufrieron los efectos de las agresiones de Israel, al reportarse que 19 miembros de brigadas sanitarias murieron y que otros 83 resultaron heridos.
Antes del inicio de la actual crisis los recursos sanitarios se encontraban a un 70 por ciento de su volumen por el bloqueo impuesto a la Franja de Gaza desde hace ocho años, que impide también la importación de insumos sanitarios.
La mayoría de los medicamentos esenciales ya se agotaron y se brinda asistencia con los suministros que llegan en los envíos solidarios.
Pacientes necesitados de atenciones especiales y cirugías son evacuados a diario hacia Egipto por el paso de Rafah abierto para ese tipo de urgencias.
También tras larga espera, Israel permitió envíos similares hacia Jerusalén Este y Turquía.
La capacidad hospitalaria rebasó sus límites permisibles en Gaza y a falta de camas muchos pacientes tuvieron que dormir en el suelo.
(Con información de agencias)