Foto: David Vázquez Abella / Cubadebate.
El cantautor cubano Silvio Rodríguez logra una importante empatía con el público, sobre todo en México, donde ofreció recientemente un concierto gratuito en el Zócalo, comentó el escritor Eduardo Valtierra, al hablar sobre el libro ”Silvio: aprendiz de brujo”, del que sólo se publicaron mil ejemplares.
En entrevista para Aristegui CNN, abundó: “Me parece que Silvio es un hijo de la Revolución cubana, me parece que es en alguna medida aquella figura pública ideal que el Che Guevara había planteado como el hombre nuevo, yo no sé si este bien pero para mí Silvio Rodríguez encarna ese hombre nuevo que planteaba el Che, que es un hombre generoso, desprendido, sus canciones hablan de eso, ir contra el egoísmo, contra aquellos defectos que hacen que la gente se separe de su colectividad y vea por sí mismo, él aboga por la amistad, por valores más colectivos y creo que no sólo lo hace en su obra”.
El escritor afirmó que Silvio Rodríguez es “el mejor embajador de Cuba en México y en el mundo”.
Se refirió al cantante como un hombre excepcional, ya que es un “tipo congruente en su forma de decir, de pensar, de actuar, que eso no es muy común”.
“Mucha gente dice una cosa y hace otra, suele suceder que la obra de alguien no tiene nada que ver con su vida privada y de repente uno dice: me quedo nada más con la obra porque lo otro como que ya ni para que rascarle”, expuso Valtierra. Empero, con Silvio no pasa eso porque por ejemplo “me ha sucedido que tengo momentos de cercanía, por la gente que conocí que me hablaba de él, por lo que he leído y así, me parece un ser excepcional” ya que es “congruente, tiene claras sus convicciones y es consecuente con ellas”.
Valtierra recordó: “Después de que entrevisté a Silvio en el 96, a mi regreso a México él me dejó un disquete con una carta que escribió, una lista de correos que en ese entonces apenas empezábamos y ahí nos bautizó como la tropa cósmica y él se bautizó a sí mismo como aprendiz de brujo y creo que esa es un postura que él tiene, él se asume como aprendiz permanente en la vida, que está constantemente aprendiendo, él no se siente maestro de nada”.
“Desde niño le encantó la película Fantasía, por eso la portada, ese homenaje de aprendiz de brujo de Disney”, contó el escritor.
(Con información de Aristegui)