Seis personas murieron, cinco niños y una mujer, como resultado de una explosión de una bomba en la oriental provincia afgana de Paktika, informó este viernes Mukhlis Afghan, vocero del gobierno local.
La fuente explicó que el artefacto letal estaba escondido en casa de un jefe del movimiento insurgente del Talibán, llamado Abdullah, cuando alguno de los infantes activó el ingenio explosivo.
De acuerdo con Mukhlis, los compañeros de Abdullah fabricaron la bomba y la escondieron en su casa con el objetivo de colocarla posteriormente en una carretera para golpear a las fuerzas de seguridad.
Tras la ocupación en 2001 por un contingente internacional, luego relevado por la OTAN y Estados Unidos, Afganistán vive en la actualidad uno de los momentos más sangrientos del conflicto, en especial para la población común.
Según la misión de la ONU en el país asiático, en lo cinco primeros meses del año el número de civiles muertos o heridos ascendió a dos mil 499, 24 por ciento más respecto al mismo periodo anterior.
(Con información de Prensa Latina)