Opositores egipcios gritan eslóganes en contra del Gobierno, ante el palacio presidencial en El Cairo.
El paradero del presidente de Egipto, Mohamed Morsi, es desconocido desde la emisión hoy de una declaración que revela un plan castrense para el gobierno de este país que puede extenderse entre nueve y 12 meses.
Un mapa de ruta del mando de las Fuerzas Armadas que incluye suspensión de la Constitución, nombramiento de un comité presidencial tripartito y de un gabinete de independientes, será informado al público por el Ministro de Defensa, el Imán de la mezquita de Al Azhar, el Papa cristiano copto y persnalidades de la oposición, según trascendidos.
Al caer la noche, transportes blindados de tropas y tanques se desplegaron en zonas de esta capital en previsión de incidentes violentos, poco después de que expirase el ultimátum que los militares dieron a Morsi para que abandonase el poder, en lo que parece un golpe militar contra el Gobierno elegido en las urnas.
Los militares han ocupado la televisión pública y, según informaciones de televisiones árabes no confirmadas oficialmente, retienen en estos momentos al presidente, el islamista Mohamed Morsi, al que, según el diario egipcio Al Ahram, le han trasladado que ya no es el jefe del Estado. La operación del Ejército se desarrolla tras cumplirse el ultimátum de 48 horas dado a Morsi para pactar. En una reunión con fuerzas de oposición y religiosas, las Fuerzas Armadas han cerrado un proceso de transición que, según algunas agencias, finalizaría en elecciones presidenciales y parlamentarias.
Medios de la Hermandad Musulmana (HM) dijeron que los contactos con el mandatario están cortados; lo último que se supo de él era que estaba en la instalación de la Guardia Presidencial en el palacio presidencial de Kuba, a donde se mudó desde el fin de semana pasado, precisaron.
Una declaración difundida por el Servicio de Información Estatal, que cita fuentes anónimas, afirma que influyentes miembros de la HM están bajo arresto domiciliario y a otras se les prohibió salir del país y que los arsenales de esa entidad están controlados.
Existe plena coordinación con países extranjeros respecto a las decisiones, dice la comunicación, que se abstiene de identificar a los estados en cuestión.
Los acontecimientos ocurren mientras multitudes de opositores del presidente siguen concentradas en la plaza Tahrir y frente al palacio presidencial de Ittihadiya y de partidarios en Ciudad Nasser y cerca de la Universidad de El Cairo, en la provincia de Giza, donde la víspera 20 personas murieron y 344 resultaron heridos en choques callejeros.
Un alto funcionario de la HM manifestó que los partidarios de Morsi se enfrentarán a los tanques, en desafío a la declaración adjudicada a los militares según la cual aquellos que se opongan a las medidas de excepción serán castigados con severidad.
(Con información de Prensa Latina)