Alrededor de ocho personas murieron y otras cien resultaron heridas en Siria este lunes, debido a explosiones en edificios gubernamentales en Idlib, aseguraron fuentes oficiales. La televisión estatal calificó los hechos como ataques suicidas, cuyas principales víctimas fueron efectivos militares.
Dos atentados idénticos volaron las fachadas de edificios próximos y dejaron cráteres en carreteras, según las imágenes de la televisión estatal, que mostraron a personas en el lugar de los siniestros condenando a los opositores armados a que luchan para derrocar al presidente Bashar al Assad.
La televisión pública dijo que los observadores del equipo avanzadilla de Naciones Unidas, enviados para supervisar un alto el fuego que dura 18 días, se encontraban de visita el lugar del ataque en Idlib.
El portavoz del Ministerio de Exteriores Jihad Makdissi dijo que el jefe de la misión, el general noruego Robert Mood, informó sobre "violaciones por parte de la oposición armada".
Medios de prensa locales emitieron un vídeo en el que se veían coches aplastados y cadáveres destrozados, cubiertos por lonas.
Un hombre, parado en medio de los escombros, dijo: "Mi esposa y yo estábamos durmiendo en la cama cuando se produjo una fuerte explosión. Sacudió toda la casa y nos despertó a todos. Mi esposa, nuestros hijos y yo corrimos al exterior".
"¿Es esta la libertad que quieren? Cómo puede la culpa de los niños? ¿Cómo se puede culpar a los inocentes?"
(Con información de Reuters)