El Papa Benedicto XVI se prepara para su viaje apostólico a México estudiando la realidad del país, escribiendo los discursos que ofrecerá y rezando, reveló uno de sus principales colaboradores.
El responsable de revisar todos los días con el Papa los temas de mayor interés desde su cargo de sustituto para los Asuntos Generales de la Secretaría de Estado del Vaticano, Angelo Becciu, descartó que la visita del pontífice a México y Cuba pueda considerarse como un "viaje difícil".
El Papa Benedicto XVI realizará su primera visita a México del 23 al 26 de marzo y a Cuba del 26 al 28 de marzo, ambos países fueron visitados por su antecesor Juan Pablo II.
"El deseo es que la visita del Papa Benedicto XVI pueda ser un éxito, que se pueda dar a México y a Cuba la oportunidad de acoger su mensaje que será de reconciliación, de empeño por el progreso de la Iglesia y de la misma sociedad, tanto cubana como mexicana", dijo Becciu.
"Será un signo de amor hacia estos dos pueblos. No diría que se trata de un viaje difícil, el Papa está tranquilo, muy confiado y sereno. Se prepara estudiando la situación, escribiendo los discursos y rezando", dijo Becciu a un grupo de periodistas.
El prelado hizo sus consideraciones tras participar en una ceremonia en la que el zoológico "Bioparque" despidió a un cocodrilo cubano que regresará a la isla caribeña en coincidencia con el viaje pontificio y tras permanecer por más de un año en el parque en Roma.
Al ser consultado sobre la posibilidad de que el obispo de Roma reciba en México a las víctimas del sacerdote pederasta Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo, Becciu sugirió que dicho encuentro sería improbable.
Aunque no lo rechazó por completo insistió en que el programa de la visita a territorio mexicano "ya fue publicado". Diferente fue la respuesta cuando se le preguntó sobre un posible encuentro del pontífice con Fidel Castro en Cuba.
"El Papa está abierto a todo", dijo el funcionario vaticano, quien se desempeñó como nuncio apostólico (embajador papal) en La Habana entre 2009 y 2011.
Becciu confirmó que tanto la altitud de la capital mexicana como la necesidad de visitar un sitio donde no hubiese estado antes un Papa fueron las razones que pesaron para la selección de Guanajuato como sede de la gira por México.
"También la altitud puede influir, puede influir ciertamente, pero el Papa debía ir a un lugar donde nunca antes haya estado un pontífice", precisó.
(Con información de Notimex)