El bloqueo a las provisiones para las tropas de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) en Afganistán impuesto por Pakistán después del ataque de la OTAN el 26 de noviembre, que ha causado la muerte de 15 militares paquistaníes en la Mohmand Agency, superó ya las dos semanas.
La prohibición para los vehículos que transportan combustible, armas y otras mercancías para los militares extranjeros en territorio afgano fue una de las medidas adoptadas, junto al boicot de la Conferencia de Bonn, la suspensión de las líneas de provisión paquistaníes y la revocación de la autorización a Estados Unidos para el uso de la base aérea de Shamsi.
El Pentágono sostuvo que por el momento este bloqueo no incidió en la capacidad operativa de las tropas estadounidenses y de la ISAF, aunque el gobierno de Washington está presionando al de Islamabad para componer la crisis.
(Con información de ANSA)