Los manifestantes de “Occupy Wall Street” lograron recaudar un poco más de cuarenta mil euros por concepto de donaciones a través de la página Kickstarter para fundar un periódico llamado Occupy Wall Street Journal. El verdadero WSJ no se ha pronunciado respecto a la apropiación del nombre por parte de los “indignados”.
La experiencia se ha comenzado a reproducir en otras ciudades. El Occupy Boston Globe también es un medio paralelo que seria publicado en inglés y español. pero el Boston Globe original ha advertido a los manifestantes que no pueden usar su nombre o logo.
“Los manifestantes están en su derecho. El nombre Occupy Boston Globe es una parodia... y está protegido por la Primera Enmienda”, ha comentado al respecto el periodista e investigador Dan Kennedy en su blog Media Nation.
“Una consideración importante en casos de marcas registradas es si los lectores podrían confundir a la parodia con la original. No parece haber mucha posibilidad de que eso aplique en este caso”, apuntó.
(Con información de La Vanguardia, de España)