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Silvio Rodríguez: "No me he olvidado del joven que fui"

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Silvio Rodríguez y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Amaury. Muy buenas noches, estamos en Con 2 que se quieran, ahora aquí, en 5ª Avenida y calle 32, en los maravillosos Estudios Abdala. Hoy, cerrando el primer ciclo del programa, un invitado especial, y especial para mí por varios motivos. Muchas veces se ha dicho que yo invito a mis amigos, bueno, ahora soy mucho más osado, ahora invité a un hermano, que en mi caso es mucho más que un amigo. Al trovador, Silvio Rodríguez.

Mi hermano, buenas noches.

Silvio. Buenas noches.

Amaury. Yo sé que en tu apretadísima agenda has hecho un esfuerzo grande por estar conmigo, lo sé, y, no nos hagamos sufrir. Tú me dijiste una vez algo que yo he utilizado mucho: "Estate atento a cómo te quieren y a cómo te tratan los hijos de tus amigos y así sabrás cuánto te quieren tus amigos".

Silvio. Realmente es algo que aprendí sin darme cuenta, o sea, con el tiempo, con los años, de pronto me percaté de que los hijos de mis mejores amigos me trataban muy bien y me había pasado también, que los hijos de algunas personas que yo creí amigos, y después con el tiempo resulta que no lo han sido tanto, guardaban cierta distancia de mí y entonces fue una cosa que aprendí de la vida. Lo aprendí observando lo que me pasaba.

Amaury. ¿Tú eres una persona de muchos amigos o de buenos amigos, pocos?

Silvio. Yo he querido a mucha gente, realmente. No te sabría decir si todos han sido mis amigos o no. Pero he querido a mucha gente y lógicamente a través de los años, también hay muchas personas que se han mantenido, traspasando las eras.  Entonces esos son los grandes amigos, aquellos amigos de toda la vida, que se suele decir. Pero de pronto hay amigos de etapas de mi vida que pasaron, amigos que hice en el Ejército; amigos que hice cuando estaba con los pescadores en el Playa Girón y que son personas que conocí circunstancialmente, en quienes deposité realmente grandes sentimientos y de quienes tengo una memoria extraordinaria y los recuerdo con un afecto tremendo, aunque no se hayan mantenido como amigos de toda la vida.

Amaury. En el caso hipotético en que tú tuvieras que exigirle cosas a un amigo, ¿qué le exigirías? Lealtad, agradecimiento...

Silvio. Que me soportaran.

Amaury. ¿Que te soportaran, nada más que eso? (risas)

Silvio. Me parece que no hace falta más. (risas)

Amaury. Tampoco es tan complicado soportarte, Silvio. (risas)

Silvio. ¡Bueno, imagínate tú!

Amaury. Hay gente que piensa lo contrario.

Silvio. Sí, posiblemente. "Yo sé que hay gente que me quiere; yo sé que hay gente que no me quiere".

Amaury. Cuando yo escucho tus canciones y no es un secreto que escucho mucho tus canciones, de toda la vida, siento que tus canciones están recorridas por un halo de tristeza. Incluso, las más optimistas, las más movidas, las que tienen los arreglos más vitales y la pregunta entonces sería (no me hables de la tristeza en tus canciones), sino ¿tú eres una persona triste?

Silvio. Hace poco una persona me dijo que yo era triste desde los tres meses de engendrado, que algo sucedió que me hizo triste. Yo creo que he sido triste y que he sido alegre. Es probable que sea maniaco-depresivo, para hablar un poco científicamente. Por suerte, mis fases maniacas suelen ser muy visibles, ¿no?, y las depresivas no tanto, porque me escondo. No me gusta que me vean triste ni nada de eso. Pero yo creo que todos pasamos un poco por las verdes y las maduras también, ¿no?.

Amaury. Pero te considerarías, por ejemplo...

Silvio. ...¿Especialmente triste?

Amaury. Sí.

Silvio. No me parece. ¿A ti te parece?

Amaury. Hummm. A mí me parece. Me ha tocado muchas veces verte triste, solo, dentro de ti mismo.

Silvio. Puede ser. A veces también uno no sale de uno mismo porque no se anima mucho por lo que ve afuera. Es una ventaja también poder tener un mundo interno, Amaury; o sea, es una ventaja como podría decir otra ventaja: tener el hábito de la lectura. Eso es una forma también de introspección. Poderse sumergir, tener un mundo abstracto, poder acudir a pensamientos, a conjeturas.

Amaury. Claro, lo que puede ser muy peligroso y esto me ha pasado a mí, es que no encuentres la llave después para salir de esa introspección.

Silvio. Eso son los esquizofrénicos, Amaury.

Amaury. Exactamente. ¿Tú me estás diciendo esquizofrénico? (risas)

Silvio. No, no, no, (risas) espero que tú no me lo estés diciendo a mí. (risas)

Amaury. Ya empezamos, ya empezamos... (risas)

Silvio. ...Pero esquizoide, a lo mejor, sí soy. (risas)

Amaury. Para muchos, y para mí, tú eres un fundador, sin embargo, tú te consideras un aprendiz.

Silvio. Es que la vida es una aprendizaje, todos los días uno aprende cosas. Muchas veces me di cuenta de que creyéndome que sabía, hacía "papelazos". Entonces llegué a la conclusión de que mejor era no creerse que uno sabía tanto, porque en definitiva, la vida, las experiencias te demostraban que siempre había algo nuevo que aprender y entonces ya, me lo quité. Me lo quité y ya más nunca me creí que era el bárbaro en nada.

Amaury. Sí, pero yo sé, me pasa a mí y le pasa a muchos de tus amigos, nos ocurre que nosotros vamos a hablar contigo, a pedirte consejos sobre determinados temas: artísticos, políticos, familiares, y tú tienes siempre una respuesta importante para cada una de esas preguntas que muchas veces son arriesgadas, porque uno está hablando de su propia vida. Eso ¿qué te lo da?: ¿los años, el instinto?

Silvio. A lo mejor ustedes no notan que la mayoría de las veces, yo lo que estoy es dialogando con ustedes, o contigo, si es el caso, y que realmente no te estoy dando respuestas, sino que estoy tratando en la interlocución de encontrar algún tipo de respuesta, incluso para mí mismo.

Amaury. Cuando hablábamos del aprendiz, eso, por supuesto, siempre lo remite a uno al dibujo animado Fantasía, ¿no?, y eso me va a llevar, entonces, a lo que tú has contado en tu blog, esa anécdota de tu tío que te llevaba al cine.

Silvio. ¿Angelito?

Amaury. Sí, Angelito. Háblame de Angelito y de esa fascinación que tú sientes todavía por los dibujos animados infantiles y por las películas de capa y espada, afición que compartimos.

Silvio. Bueno, Angelito era el hermano de mi padre. El único hermano de mi padre, que fue también mi padrino. Yo no le decía Angelito, ni Mary, mi hermana ,tampoco le decía Angelito; ambos le decíamos "Padrino". Fue Padrino hasta que nos dejó. Yo viví con él como desde los 6 hasta los 11 años, aproximadamente. Yen esa etapa en que uno se está empezando a abrir al mundo y comienza a ir al cine y a entender cosas, fue muy importante la relación con él. Todas las semanas me llevaba al cine y le gustaban las películas de aventuras, las películas de guerra, las películas del oeste, las películas de capa y espada, como tú dices. Pero, realmente, son todavía las películas que más me gustan, Amaury, las películas de aventuras son las que me gustan y las películas estrambóticas, fantásticas. Esas son las cosas que a mí me gustan, realmente.

Amaury. Bueno, ya estoy en Angelito y entonces voy a irme todavía más atrás, voy a ir a San Antonio (de los Baños). Pero voy a llegar a San Antonio a través de los ojos de Malva, de tu hija más pequeña. Un día, y tú lo recordarás, o espero que lo recuerdes. Salíamos de casa de Sergio Vitier, de un cumpleaños de Sergio, y nos fuimos a San Antonio. Tú quisiste que pasáramos por San Antonio, y en un momento determinado, yo quise...

Silvio. ...¿Veníamos de Huachinango?

Amaury. Sí, y yo te dije que me enseñaras la casa donde tú habías nacido y nos paramos en la puerta y, Malva, que era muy chiquitica me dijo: ¿Y aquí nació mi papá? Como sorprendida porque es una casa de madera, una casa muy, muy humilde, y yo quiero que tú me hables de cómo fue tu vida, tu niñez, en San Antonio.

Silvio. Yo salí de San Antonio con cinco años. No tengo mucha memoria, tengo un poquito, pero todo dentro de la casa. No pude conocer el pueblo. Recuerdo haber ido al cine cuando muy chiquito, porque mi mamá me llevaba. Pero la gran memoria que yo tengo de mi pueblo es de cuando muchachito, que estaba en una escuelita, vivía en casa de una tía con un primo hermano y dos primas hermanas. Había un perro en la casa, y vivíamos al borde del pueblo, o sea, ya cuando empieza el bosque, el río.

Amaury. ¿Entonces no fue la casa que vimos aquel día?

Silvio. No, yo no recuerdo, Amaury, cuál casa fue la que yo te enseñé. Debe haber sido, a lo mejor, la casa en la que yo viví en esa época, es muy probable. ¿Era una casa que hacía esquina?

Amaury. ¡Sí, hacía esquina!

Silvio. Sí, esa es la casa donde yo viví esos años, como de los 10 a los 11, o a los 12 años. Y fue cuando aprendí a nadar, cuando me fugaba para el río, cuando andaba con un perro. Cuando empecé a conocer el monte, a buscar nidos de pájaros o a meterme en cuevas. En fin, cuando empecé a mataperrear, como quién dice, ¿no? Porque mientras viví en La Habana no podía mataperrear mucho, porque no se podía salir a la calle, estaban los carros y ese tipo de cosas. Cuando estaba en San Antonio, era como la libertad.

Amaury. Tú consideras a San Antonio el lugar esencial para ti, no solo en tu vida, sino en tus canciones.

Silvio. Sí, porque tengo memoria, la primera vez que vi a un hombre muerto, por ejemplo, lo vi en San Antonio y ya de paso puedes introducir la pregunta sobre la muerte.

Amaury. ¿Por qué tú sabes que venía?

Silvio. Porque te conozco, Amaury. Empezaste preguntándome si era triste y todas esas cosas.

Amaury. (risas) No, pero esa no te le imaginaste.

Silvio. Ya, ya, ya. Entonces, la primera persona que yo vi muerta fue Narciso, "el mocho".

Amaury. El del Papalote.

Silvio. El de "El Papalote", el personaje de "El Papalote". O sea, todas esas memorias... La cosa de andar con un perro, de tener un perro amigo, eso es una cosa importantísima para un niño, Amaury. Uno en gran medida conoce la amistad, la fidelidad, la intimidad, el cariño hacia otro ser, a través de los animales. Por lo menos a mí me llegó mucho a través de mi relación con los animales, con los perros, con los gatos, con una vaca, con un caballo, con cualquier animal. Me fascinaban, siempre me gustaron mucho los animales. Los pájaros, los pájaros me fascinaban, siempre me han gustado mucho los pájaros. Es probable que yo hubiera dado, quizás, un buen biólogo, ¿no?

Amaury. Un naturalista.

Silvio. Algo así. Tengo un amigo, Giraldo Alayón, que es biólogo, eminente, además, pero ese vivió toda su vida en San Antonio. A lo mejor si yo me llego a quedar en San Antonio, hubiera dado algo así como un científico.

Amaury. Sí, pero a lo mejor si te hubieras quedado en San Antonio no hubieras dado las canciones que has escrito.

Silvio. A lo mejor las hubiera dado mejores.

Amaury. Es que el hubiera sabemos que no existe. Pasó lo que pasó y no voy a ir a la pregunta de la muerte. Voy a preguntarte: ¿cuando recuerdas al niño, a aquel niño, Silvio, en San Antonio, tú te recuerdas mala cabeza? Porque después fuiste un joven mala cabeza. Cuando yo te conocí eras joven y eras mala cabeza.

Silvio. No, yo no fui un niño mala cabeza. Yo hice cosas normales que hacen los niños. Me fugaba de la escuela y me iba al río a bañarme, aprendí a nadar ahí en el río y bastantes palos que cogí por meterme en el río. (risas)

Amaury. ¿Y pasaste sustos?

Silvio. Tú puedes creer que no, chico.

Amaury. ¿No te pasó nunca nada?

Silvio. Jamás me pasó nada desagradable.

Amaury. ¿Y quién te daba los palos, Argelia, tu mamá?

Silvio. Sí. (risas)

Amaury. No me la imagino, no me imagino a Argelia dándote palos.

Silvio. Ya, ya. No, yo tampoco. (risas)

Amaury. (risas) Oye, voy a una pregunta que me sugirió Petí. Qué difícil debe ser -te pregunto-, ¿es difícil que tomen en serio todo lo que tú digas?

Silvio. Sobre todo siendo de San Antonio, que es un pueblo que le llaman además, San Antonio del Humor, ¿no?, que ha dado tantos humoristas y que se caracteriza por dar personas de buen humor y  gente desenfadada. Yo no sé realmente... eso es alguna gente, porque yo, a mí mismo no me tomo tan en serio, Amaury.

Amaury. Sí, pero yo he estado presente, bueno, durante los últimos cuarenta y tantos años que nos conocemos, y desde siempre te tomaban en serio. Tomaban literalmente todo lo que tú decías y eso provocó más de un equívoco.

Silvio. Bastantes, bastantes.

Amaury. Conmigo recuerdo uno, por ejemplo.

Silvio. Es terrible, porque que te tomen así al pie de la letra, es terrible... y con lo que me gusta a mí la metáfora.

Amaury. Bueno, eso ya lo sabemos. Ahora, ¿tú te consideras bueno haciendo chistes?

Silvio. No, ¡malísimo!. Yo soy un incomprendido haciendo chistes, profundamente incomprendido. A veces he tratado de hacer un chiste, incluso, al público, a la gente, y se ha transformado en un hito de mi leyenda negra. Sí, sí, sí, terrible, terrible.

Amaury. ¿Por qué tú crees que mucha gente, y puedo decir que los que no te conocen bien -esa es una acotación mía-, te considera un tipo difícil? ¿Por qué?

Silvio. A lo mejor es por eso mismo, porque me toman demasiado en serio.

Amaury. Háblame de tus hermanas.

Silvio. Mis hermanas. Mary, María de los Ángeles.  Me acuerdo el día que nació perfectamente. El otro día estaba hablándolo con Niurka, rememorando el día en que nació Mary. Me acuerdo que  mi abuela me estaba durmiendo, mi abuela paterna, en su casa que era como a una cuadra de la nuestra, y llegó mi tío Angelito y me dijo: vamos para que conozcas a tu hermanita, y fui para allí, y vi la cosita aquella chiquitica, así era Mary, a quien ya caballerosamente le había cedido mi cuna, que quedaba al lado de la cama de mis padres, y entonces a mí me pusieron en una camita en la sala. Pero bueno, ya eso era una cosa que estaba decidida desde antes que ella naciera.

Mi hermana Anabell, la gran voz de la familia, la única voz, se pudiera decir, de la familia.

Amaury. No hay que exagerar, pero bueno.

Silvio. Me acuerdo también cuando nació. Recuerdo que era asmática cuando niña. Cuando yo llegaba del Ejército, venía a veces, cada quince días o algo así, me pasaba una sola noche en La Habana, y a veces esa noche me la pasaba con ella cargada. Y tuvo asma hasta los 7 años. A los 7 años se hizo un tratamiento con unas vacunas y se le quitó.

Amaury. No se le nota.

Silvio. Se le quitó, se le quitó. Bueno, esas son mis hermanas.

Amaury. Tú eres una persona hasta dónde sé agnóstica. ¿Tú estás adscripto a alguna religión?

Silvio. ¿Religión?, no.

Amaury. Sin embargo, hablas mucho de ángeles en tus canciones.

Silvio. Sí, pero bueno, tú sabes que eso es parte de la cultura del hombre.

Amaury. Recuerdo unas cuantas, Ángel para un final, no solo Cita con ángeles, que es tan conocida.

Silvio. Ohhh, muchas, muchas canciones mías hablan de ángeles.

Amaury. Y ahí sí viene la pregunta de la muerte. Porque además  de los ángeles, la muerte aparece mucho en tus canciones.

Silvio. Sí, en fin, es algo que nos pasa. Es como empezar a crecer. Uno empieza a crecer el día que se da cuenta de que todos nos morimos.

Amaury. Sí, pero ahí vendría la contra pregunta entonces, y esos ángeles, ¿qué son, los ángeles guardianes?

Silvio. Los ángeles son un símbolo, no hay que detenerse en el angelito con las alitas...

Amaury. ...No, no. Son como esos espejos de uno.

Silvio. ...sino en las casualidades y causalidades de la vida, que hacen que las cosas pasen o que no pasen ¿te das cuenta?

Amaury. Hablaba de eso.

Silvio. Hablando de causalidades y "Causas y Azares", está esa canción también, que no habla de ángeles pero es como si hablara de ángeles también.

Amaury. Cuando yo te llamé, debo decir que a la primera persona que llamé para este programa, cuando era un proyecto, fue a ti, no estoy mintiendo con eso, y tú lo sabes. Fuiste la primera persona a quien llamé.

Silvio. Y yo te recomendé que invitaras como a cuatro o cinco gentes.

Amaury. Sí.

Silvio. He visto a algunos en el programa.

Amaury. Casi todos los que me recomendaste han estado.

Silvio. Casi todos.

Amaury. En realidad, me faltaron, creo, que dos jóvenes que me recomendaste, pero los demás, todos, han estado.

Silvio. Te van a preguntar seguro quiénes eran, en el blog que ustedes tienen.

Amaury. No, que lo pregunten, yo no lo voy a responder porque no lo recuerdo. Sin embargo, ha resultado que has venido al último programa de la serie. Te llamé para el primero y al final resultó que terminaste viniendo al último. Y es curioso, porque antes que yo hiciera este programa de televisión, este y el anterior, tú habías tenido un programa en televisión, "Mientras tanto", donde tú, no solo cantabas, sino también hacías entrevistas, preguntabas, leías poemas, yo lo recuerdo bien. ¿Por qué ha sido tu reticencia en los últimos años, tanto en Cuba como fuera de Cuba, a hacer televisión?

Silvio. Supongo porque la hice bastante. Empecé por la televisión, como todo el mundo sabe. O sea, no me fue tan mal; porque la televisión te salva o te embarca, una de dos.

Amaury. ¡Dímelo a mí!

Silvio. Te salva o te embarca. A mí me hizo mucho bien la televisión. Enseguida que salí por televisión hubo gente que me preguntó ¿y cuándo vas a hacer otra cosa? Y alguna muchacha se enamoró de mí enseguida también y eso era agradabilísimo.

Amaury. La televisión trae eso.

Silvio. Es muy agradable, muy agradable. Sobre todo para esas cosas es para lo que más sirve, porque realmente en la televisión una de las cosas...

Amaury. ...¡Servía!. (risas)

Silvio. Servía, servía. (risas) Una de las cosas que más insoportable yo encuentro de la televisión, Amaury, es la cantidad de horas que hay que estar aquí para salir tan poquito después, es horrible, es espantoso.

Amaury. Sí, bueno, aquí no. En este programa no, pero es así.

Silvio. Hay cosas a las que yo le puedo dedicar mucho tiempo, pero me son un goce. Por ejemplo, una canción que dura tres minutos, yo puedo estar tres meses haciéndola, pero cada instante que le dedico a esa labor, a ese quehacer, lo disfruto.

Debe ser que los que hacen televisión disfrutan cada instante, como yo disfruto hacer una canción. Entonces de eso es de lo que se trata. Yo no disfruto esto. Yo lo que disfruto es hacer canciones. Tan sencillo.

Amaury. Oye, tú has escrito una cosa que leí el otro día en tu blog, respondiéndole a la cantidad de gente que te escribe, y me llamó mucho la atención. Es una frase importante, la apunté, la voy a citar: "Si para algo no hay nadie imprescindible, es para los reclamos".

Silvio. Eso lo dije en un contexto en que yo me tuve que ausentar durante algunos días del blog que tengo, pero en esos días en que no estuve, muchos de los que participan en el blog dieron opiniones, reclamaron, exigieron, se expresaron. Entonces, por eso escribí eso.

Amaury. Tú abriste este blog, que es un espacio de Internet donde tú pones fotografías, cuentas cosas, pones lo que se llaman post. ¿Tú lo abriste por una necesidad de polemizar o de establecer un puente con la gente?

Silvio. Yo lo abrí porque Cecilia Todd...

Amaury. ...La venezolana, la gran cantautora.

Silvio. ...la gran cantante venezolana...

Amaury. ...Cantante, cantante venezolana, sí.

Silvio. ...me escribió y me dijo: Mira este blog de este muchacho, que es un cantautor venezolano, y que había puesto una cosa muy cariñosa con respecto a mí. Y bueno, lo miré, lo vi, qué bonito. Me leí varias de las cosas que escribió y cuando iba a cerrar la página, miré arriba y decía: ¿Quiere hacer un blog? Pinche aquí y entonces yo dije: Bueno, no puede ser tan fácil.

Pinché y me abrió una página. Ponga su nombre, puse el nombre. Pinche aquí. ¡Ya usted tiene un blog! No, espérate, no puede ser así. Y fue así. Entonces hice un primer escrito, que le llaman post en el mundo de los blogs, y ya, y de pronto empezó a meterse gente, a decir cosas, a dar opiniones, a participar y bueno, de pronto ya hay más de...

Amaury. ...Sí, hasta hoy había seiscientos y pico mil de visitantes.

Silvio. De entradas: seiscientas y pico mil entradas.

Amaury. Que son muchas.

Silvio. Son muchas, sí, para nueve meses que lleva el blog.

Amaury. Yo pienso que tú eres tú, tus canciones y tu misterio, ¿revelar el misterio en público no será perjudicial para el resultado final de tus canciones?

Silvio. ¿Tú crees que hacer un blog es revelar algún misterio?

Amaury. En el caso tuyo, sí.

Silvio. Yo tengo entonces una enorme vocación reveladora. Realmente no tengo ningún misterio que esconder. Yo siempre he sido anti vedettístico, tú lo sabes. (risas)

Amaury. Yo lo sé. (risas)

Silvio. Para mí los misterios que pueda haber en un artista, son precisamente esos, el hacerse interesante, el artistaje. Además, ¿no empezamos diciendo que yo me consideraba un aprendiz?

Amaury. Claro.

Silvio. ¿Qué misterio va a revelar un aprendiz? El aprendiz es precisamente el que está detrás de los misterios. Yo estoy detrás de los misterios, Amaury.

Amaury. Era solamente una apreciación mía y quise compartirla con los televidentes. Muchas veces fuera de Cuba, sobre todo, fuera de Cuba, tildan a algunos artistas que están con la Revolución, que están con el país, de ser artistas oficialistas y con especial interés te nombran a ti como a la cabeza de los artistas oficialistas. La primera parte de la pregunta sería: ¿si tú te consideras un artista oficialista y qué es para ti un artista oficial?

Silvio. Bueno, mira: si es de la Revolución Cubana, la Revolución que comandó Fidel y que han continuado tanta gente valiosa, Raúl, el Che, Camilo, toda esa gente, a mucha honra, mi hermano, a muchísima honra ser oficialista de esto. Yo, de lo que no puedo ser oficialista, es de los que les caen a bombazos a Iraq, a Afganistán. Ahora se están tratando de aprovechar de todos estos movimientos revolucionarios en el Magreb. Los que quieren invadir a Libia a toda costa. Los que han querido invadir a Cuba. Aquellos que gritaban: Ahora Iraq, mañana Cuba. Eso sí para mí es una deshonra y una vergüenza sería oficiar en favor de semejantes ideas.

Amaury. Y hay artistas que son oficialistas de eso.

Silvio. Absolutamente. Acuérdate que a cada rato iban a cantarle a Bush, algunos latinoamericanos también.

Amaury. Sí.

Silvio. ¡Lagarto!

Amaury. Tú hiciste primero la gira por las cárceles, de eso se habló en su momento, muchísimo. Pero ahora estás haciendo una por los barrios y es bien curioso lo de la gira por los barrios, y tú me lo explicarás, porque ahí sale entonces la pregunta de: esta canción que hacemos, ¿tú crees que todavía tiene una utilidad popular, o sea, que vale la pena llevar estas canciones a los barrios y que hay un público todavía que tiene interés en lo que nosotros cantamos? En este caso lo que cantas tú.

Silvio. No es que lo crea, es que la gente me lo está demostrando. Cuando vayas, el día que se te ocurra ir a una de estas actividades en los barrios, te vas a dar cuenta. La gente canta nuestras canciones, agradecen nuestra presencia. Además, hacer esto está más allá, yo creo, que de estar de moda o dejar de estar de moda, de estar en la televisión, o de ser pasado por la radio o no, Amaury.

Es una cosa que tiene que ver con nuestra realidad, con la realidad de nuestro país. Muchas entradas a los teatros para conciertos de gente como nosotros, lo que suelen costar son veinte pesos por persona y una familia más o menos normal, son cuatro, cinco personas; eso son ochenta, cien pesos. ¿Y cuánto gana una familia cubana normal al mes? Que una familia vaya una noche a un teatro representa la tercera, la cuarta parte, si es que gana cuatrocientos pesos, de su sueldo. Entonces yo creo que es algo también muy realista, muy realista.

Creo que hay que llevar la Cultura, sea cual sea. Ojala también sean las cosas que se pasan por la radio. Ojala también sean las canciones y la música con la que más se identifica la gente, que es en definitiva la que la radiodifusión promueve. Pero, bueno, yo lo hago y la gente va, y la gente canta las canciones y me aprendí las canciones, las dos o tres canciones infantiles que he hecho en mi vida y se las canto a los niños y yo no sé, de alguna manera los niños las recuerdan, porque las cantan. Yo no sé ese milagro en qué consiste, la verdad. Es algo para mí asombroso, es un misterio.

Amaury. Otro.

Silvio. Del que estoy detrás también, como aprendiz. (risas)

Amaury. A ver, en tu último disco, en tu último disco editado quiero decir, porque yo sé que hay una cantidad de discos que no han salido nunca ni se han mezclado, yo sé que hay un almacén de discos sin terminar.

Silvio. No, no son tantos.

Amaury. ¿Que no son tantos? Recuerdo los que hiciste con Diákara, con Afrocuba y si sigo más nunca terminamos.

Silvio. Uno y uno. Uno con Diákara y otro con Afrocuba.

Amaury. Bueno, en este último disco, en Segunda Cita, tú hablas ahí de cambiemos la R de Revolución.

Silvio. Sí.

Amaury. Y lo has dicho en entrevistas que se han publicado fuera de Cuba, lo has dicho en Cuba, en prensa escrita, pero nunca lo has dicho en televisión y yo creo que sería clarificador, iluminador que lo dijeras en televisión, porque es una cosa arriesgada y que muchos de nosotros, incluso muchos políticos, después la han citado.

Silvio. Yo lo dije porque la Revolución aparece de vez en cuando. Cuando hace falta una Revolución. Se produce en un momento donde se dan determinadas condiciones, pero la evolución tiene que ser constante. Ya hicimos la Revolución, ahora tenemos que seguir evolucionando.

Amaury. ¿Tú crees que lo que más daño le puede hacer a un país es el estatismo?

Silvio. Sí. El inmovilismo que hemos padecido durante años nos hizo daño, mucho daño y creo que hemos roto la inercia, afortunadamente, en muchas direcciones y tenemos que seguir avanzando. Me siento optimista, sin duda que me siento optimista, porque hemos roto la inercia, y porque estamos moviéndonos, que es un principio del Universo, ¿cómo vamos a estar estáticos cuando todo se mueve?

Amaury. Yo quería preguntarte por una amiga muy querida, que yo tengo, y que da la suerte, fortuna para ti, que es tu compañera: Niurka.

Silvio. ¿Niurka?

Amaury. Niurka. Yo sé que has tenido amores valiosos en tu vida, pero nunca te sentí más tranquilo, equilibrado y, debo decir en público, que enamorado, como te he visto de Niurka. Quiero que me hables de Niurka y de tus hijos, que además, a veces pierdo la cuenta de cuántos son, aunque los conozco a todos.

Silvio. Son siete, hace rato que son siete y me parece que se van a quedar en esa cifra.

Amaury. ¡Aunque uno nunca sabe!

Silvio. No, no, no: orinar contra el ventilador, no lo hagas nunca. Nunca digas nunca jamás... Chico, Niurka realmente es un regalo que me dio la vida, y realmente sí es cierto todo lo que tú dices. Encontrar de pronto un espíritu así, afín, una persona, no solo talentosa, sino también de una calidad humana especial. Porque si hubiera sido solo talento...

Amaury. ...Doy fe.

Silvio. ...Amaury, pero no era solo talento. Era talento musical, pero era, y es, talento humano también. Entonces, eso es muy seductor. Y nada, nos conocimos de casualidad, gracias a Leo (Brouwer). Leo me la mandó, me habló de ella para que grabara, porque nunca había grabado. Estamos hablando de quince años atrás, ¿te das cuenta? Y, bueno, así nos conocimos. Después, ella ya se iba para París. Yo estuve en su examen de ingreso en la Cité y estuve en su examen final, también. Ganó Diploma de Oro, o sea, ganó la máxima calificación. Y luego vino para acá e hizo el ISA, y un día la invité a que tocara con nosotros y, bueno, desde entonces  también colabora con nosotros.

Amaury. ¿Y cómo es el Silvio papá?

Silvio. El Silvio papá es bastante normal. Lamentablemente no he podido criar a todos mis hijos. Algunos hijos han crecido lejos de mí. He tratado de ocuparme de todos, Amaury, de todos, sin excepción, incluso de los que no son cubanos, porque hay dos que no son cubanos.

En el año 2007, me parece, los reuní a todos. Fue un alarde de coordinación internacional, una cosa impresionante. No sé cómo lo conseguimos, pero lo conseguimos. Y estaban todos y me los llevé. ¿A qué tú no sabes adónde me los llevé?

Amaury. No.

Silvio. Al río.

Amaury. ¡¿Al río?!

Silvio. Al Río Ariguanabo, y me senté con todos ellos allí, y nos hicimos fotos, y le di una foto de esas a cada uno de ellos para que tengan ese recuerdo. Siempre van a poder regresar al río Ariguanabo conmigo. Me parece algo maravilloso.

Amaury. En cualquier circunstancia, además. Yo vivo Silvio, admirado de la relación que tú tienes con tu mamá. Háblame de ella.

Silvio. Es que mi mamá es una persona bastante fácil en el sentido de que es muy buena para la música... Mira, ¡a esa sí nadie le pone en duda los chistes! y no es que no la tomen en serio. (risas)

Amaury. No, no, claro y se le tiene respeto.

Silvio. Y no es que no la tomen en serio, se le toma en serio y sin embargo le ríen los chistes, ¡mira tú! (risas) Mi mamá es así y ha sido un poco la mamá de muchos, de muchos amigos míos.

Amaury. De muchos de nosotros.

Silvio. A muchos les dio de comer, a muchos, muchísimos. A muchos los pelaba. Ahora mismo me vino a la mente mi mamá pelando a Luis Rogelio Nogueras, por ejemplo. Los pelaba, los inyectaba.

Amaury. Nos dio de comer muchas veces. Bueno, todavía lo está haciendo, de alguna manera.

Silvio. A todos los amigos y a algunos enemigos también. (risas)

Amaury. ¿Cómo tú llevas lo de los enemigos ya que dijiste eso? ¿Cómo tú llevas el tema de los enemigos, de los enemigos de tu obra, de los enemigos de tu persona, cómo tú manejas eso?, ¿es complicado?

Silvio. No, realmente, no.

Amaury. ¿Los pones a un lado?

Silvio. Sí, claro, a veces también se te atraviesan delante, ¿no? Yo trato de no empujar, pero no me gusta tampoco que me empujen.

Amaury. Claro. Tú fuiste un joven, y con esto voy a terminar, porque hacerte una entrevista a ti, podía durar cuatro horas y no tiene sentido porque sería una serie. (risas) "Amaury entrevista a Silvio".

Silvio. Después yo te entrevisto a ti.

Amaury. Sí, podemos hacerlo, tienes que tener un programa como este, entonces yo sí seré el primero. Tú fuiste, nosotros nos conocemos desde el año 69, un joven irreverente, polémico, un joven inquieto, sería el calificativo que se utilizaría ahora con cierto paternalismo.

Silvio. Conflictivo, era como se decía antes.

Amaury. Se decía conflictivo, ahora se dice inquieto. Conflictivo, un joven conflictivo.  ¿Serías capaz hoy de juzgar al joven que fuiste o cómo lo juzgarías si fuera capaz de juzgarlo?

Silvio. Sí, pero no socialmente. Quizás en su aprendizaje interior,  porque conozco a aquel joven perfectamente, no me he olvidado de él, no solo no me he olvidado de él, sino que trato de estar a su altura.

Amaury. Dije que era la última, pero debo terminar con otra. En estos 60 programas que hemos transmitido, ha habido, no siempre, pero ha habido una pregunta, quizás recurrente, y que algunas personas me han criticado y otras me han dicho que no la deje de hacer. ¿Qué estarías dispuesto a seguir haciendo por Cuba?

Silvio. No es un problema de veneración, es un problema de responsabilidad. Es un problema de sentirse parte de algo, ¿no?. No veo a Cuba como a un altar, ni como una Catedral a la que uno va. Es la cotidianidad, es lo que uno es, lo que uno quiere que sean las personas que uno quiere. Todo el bien que uno puede desear que tenga todo el mundo, ¿no? a quien quiere, el prójimo, como se solía decir. Yo uso palabras religiosas, aunque no soy religioso, porque tengo espiritualidad, pero no tengo religión, Amaury, porque las religiones, con mucho respeto a todo el que la tiene, siempre me parecieron un poco la burocracia de la espiritualidad.

Tengo mi espiritualidad. Es imposible vivir sin eso. Y parte de esa espiritualidad se debe a este lugar hermoso en el que me tocó nacer, que pudo haber sido otro, pero es este, con una historia hermosa, de mujeres, de hombres maravillosos, y que lo hacen a uno sentirse, no sé, orgulloso.

Amaury. Muchas gracias, muchas gracias por haber venido, mi hermano querido. Yo sé, como ya dijiste en algún momento que estas cosas no te gustan mucho, por tanto te lo agradezco el doble, y ya te lo pagaré, aunque tú no haces estas cosas para que te las paguen. (risas) Te quiero mucho, hermanazo. Nos vemos en la próxima serie, en la tuya o en la mía.

Silvio. Oye: he visto que ponen la canción aquella que grabamos, en todos los programas.

Amaury. En estos 60, sí, en todos.

Silvio. ¿Por qué no la cantamos?

Amaury. Ah, bueno, está bien, ya que es el programa final.

Silvio. ¡Final, no!

Amaury. ¡Final, no! El último programa de esta serie

Silvio. Esa es la cosa.

Amaury. ¿Hay una guitarra por ahí? Manolo, ven, échala para acá. Alan, ven ¿tú tienes un micrófono ahí?, ahí está, sentémonos. Es una manera bien bonita de terminar el programa.

(Cantan a dúo el tema de presentación y despedida del programa "Con 2 que se quieran")

CON 2 QUE SE QUIERAN ...

A.P.: Voz.
S.R.: Guitarra y voz.

Con dos de la misma celda o del mismo andén
con dos que alcancen el tope de la subasta
con dos que bailen sin casa en el mismo tren
con dos que resulten ser de la misma casta.

Con dos que entre tantos ecos se digan ¿quién?
con dos que se nos parezcan en la canasta
con dos que tengan el alma como de cien
con dos que se quieran bien, con dos que se quieran bien,
con dos que se quieran, basta.

AMAURY PÉREZ / La Habana / 2002

Silvio Rodríguez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio Rodríguez y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio junto al equipo de "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Silvio junto al equipo de "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Se han publicado 1073 comentarios



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  • sergio dijo:

    Fenomenal entrevista o mejor dicho conversacion entre dos grandes de la cultura Cubana y aunque fisicamente no vivo en mi Cuba si me siento parte de ella y programas como estos reunen verdaderos valores a imitar.Felicidades

  • ariadna dijo:

    Amaury : ¿Que escribir sobre este programa , el ùltimo de la serie .Soy de los jòvenes con 40 años que asistián a sus conciertos y conocián muchas de sus canciones.Por eso hace unos días me fui con mis tres niños al humilde barrio de Cocosolo a cantar Ojala y Canción del Elegido.
    Gracias por traernos a Silvio este martes por la noche y
    Ojalá que para el 2012 haya una nueva temporada
    Ojalá que Carlos Varela este entre tus invitados.

  • Laura dijo:

    Realmente un programa muy especial con la presencia de silvio rodríguez, artista que aún querido por unos u odiados por otros, es indispensable en la historia de nuestro país, y sobre todas las cosas cubano de pura cepa. felicidades por tan excelente entrega televisiva y saludos!

  • yamil santana dijo:

    Fue lindo recorrer el camino,conocerlos a todos.ojala y la inteligencia nos lleve a reunirnos mas adelante.
    yamil

  • Armando dijo:

    Silvio:
    Tu entrevista me transmitió mucha paz espiritual y para nada tristeza alguna. Tuve el privilegio de estar en tu primer concierto para los barrios en “La Corbata”. A aquel concierto fui con mi hijo de 10 años, fue aquel niño que insistentemente te pidió que cantaras PIONERO, no sé si lo recordaras. Te estamos muy agradecidos por incorporar esta canción y otras infantiles en tu repertorio en estos conciertos. En la medida nuestras posibilidades te hemos seguido por los barrios, fuimos al Romerillo y al Fanguito. Mi hijo desea entregarte un dibujo muy bonito que hizo inspirado en varias de tus canciones. Con solo 10 añitos escucha tus canciones y no se separa de un cancionero con 100 canciones de la Nueva Trova que compró en una de las ferias del libro.
    Por favor no dejes de dar estos conciertos, los necesitamos. OJALA otros te secundaran en esta genial idea.
    Te deseo mucha salud para ti y tu familia y que regreses pronto de Alemania para que recomiences tus conciertos………… nos vemos en algún barrio de La Habana.

  • Olguita dijo:

    A veces lo que sucede conviene, no tuvo mejor cierre esta primera temporada, muy tierno y dulce final, por favor, comiencen los proyectos de la próxima serie de programas. Serían muchos los elogios, por ahora uno que lo recoge todo, Felicidades, a los de la idea inicial y a los que las llevaron a la práctica.

  • Eduardo Mora dijo:

    Amaury
    Tu programa es una necesidad para tu pueblo, no nos dejes sin el.
    Descansa recuperate pero regresa pronto y sin muchos cambios

  • Totí dijo:

    Me encantaría ver esta entrevista.

    Silvio es un Tipazo.

  • Rogelio Rivas dijo:

    Claro que ha sido un espacio muy importante, ojala pronto se pueda retomar porque no hay otro programa ni parecido en la TV, el de hoy con nuestro Silvio era de esperar que fuera tan bueno , a mí me pareció que duró solo 15 minutos, me quedé en eso como se dice popularmente. Bueno espero que esta no sea la despedida. Un agradecimiento especial a Amaury por todo cuanto ha trabajado y se ha esforzado, al igual que al colectivo del programa y a cubadebate, un saludo a todos los foristas, Gracias a todos.

  • Trock dijo:

    Mis respetos para Silvio. Todo el éxito del mundo a Amaury por regalarnos un programa que tanto necesitaba la televisión y que dudo que sea superado (por el momento). Soy ariguanabense también (gentilicio de los naturales de San Antonio de los Baños) y me conmovió mucho la parte en que hablo de San Antonio.
    Gracias por este programa, y es verdad que faltaron personalidades, ojala existan nuevas temporadas.

  • OTRO FELIPE dijo:

    Buen final, con ese otro Poeta Nacional de Cuba. Felicidades Amaury. Suerte.

  • Cornelia Limonta dijo:

    Amaury: Hoy me sentí especialmente orgullosa de ser cubana gracias a Silvio y a ti. Estoy un poco triste, te nos hiciste indispensable. Adios amigo querido. Estoy llorando ¿que me pasa?

  • Enmanuel dijo:

    me sumo al amor y a la entrega que los foristas durante 60 emisiones volcamos aquí para bien del programa. Este fue el puntillazo de oro para cerrar como la fortuna indica: Un poeta mayor hablándonos desde su humildad más publica televisada. Emociones, sentimientos agazapados y visibles, confesiones...el programa hizo de amaury una celebridad asequible y creó el milagro humano de expresarnos de tú a tú como dos buenos vecinos de barrio. Hizo más pero ya lo dirán mejor que yo los que analicen la historia de la TV Cubana.
    Que la buena suerte nos acompañe a todos y sigan entrando a Cubadebate a diario, que cada columna tiene este mismo espacio para opinar.
    Abrazo Cubano

  • Daniel Ortiz Linares dijo:

    Excelente tu programa Amaury. Lo he seguido a través de cubadebate y te felicito por lo que has logrado, por las personalidades que invitaste; pienso que esas 60 presentaciones forman parte de nuestro patrimonio cultural. Èxitos.

  • Sergio Ramirez dijo:

    AMAURY:

    MIS SALUDOS LAMENTABLEMENTE NO ME PUDE CONTENER CUANDO ANUNCIABAS A UN AMIGO TUYO PUES YA SABÍA QUE ERA NUESTRO SILVIO, A PESAR DE QUE MI FAMILIA ME DICE QUE NO PIERDA EL TIEMPO QUE USTEDES NO LEEN LOS CORREOS PUES NADA AL MENOS ME DI EL GUSTAZO DE EXPRESAR LO QUE SIENTO.

    TE DEJO PARA PODER VER EL PROGRAMA

    MIS SALUDOS FRANCIS NOY

  • Francis Noy dijo:

    Bueno Amaury ahora que ya terminó el programa podría decirte que nos contamos gracias a Dios entre los miles y miles de personas en este mundo que tocan el blog de Silvio entre otros espacios que sabes que tiene por fortuna para los que no contamos con la dicha de ser sus amigos , quizás mi esposo cuando yo termine de escribir este se siente y entre a su blog, pero de cualesquier modo quisiera comentarte QUE SI que todavía LOS 2 son capaces de mover multitudes y me pareció verdaderamente GENIAL la FABULOSA idea de ir por los barrios, nosotros vivimos en Jesús María y mi esposo y yo asistimos a su actuación en este y al de Atarés también y es impresionante COMO LA GENTE LO SIGUE aun de distintos niveles culturales, credos religiosos y todo lo que de algún modo pueda dar diferencias y mira la gente, digo, seguimos contando sus canciones, la única que no participó en eso fue mi hija de 15 años que no es que no se sepa la canciones de ustedes y en especial de Silvio P'UES COMO ELLA MISMA DICE FUERON SUS CANCIONES DE CUNA, de modo que cuando oye música de Silvio nos dice que si ya le llegó la hora de dormir?, no ocurre así con la tuya, la de Varela, los Feliú Pablito y otros tantos de esos tiempos.

    Decirte además que hay que darle un VIVA a la espiritualidad y yo creo que sí, que quizás desde lo alto lo ilumine su tío Angelito como a tí tus queridos padres.

    Bueno por último DARTE LAS GRACIAS DE TODO CORAZON pues en un correo anterior te lo pedí y DEMORASTE pero estaba SEGURO TÍ LO SABÍAS.

    Mil gracias una vez más por esta temporada que creo que FUE DE LUJO y desde ya esperamos la próxima y ojalá mantengas la capacidad de tenermos sentaditos todos los martes o el día que vaya a salir la segunda temporada . Por supuesto agradecer también a TODOS los que participaron contigo en la realización de todos estos programas .

    pOR ÚLTIMO DESEARTE TODO LO MEJOR DE ESTE MUNDO PARA QUE NOS PUEDAS DAR UNA SEGUNDA TEMPORADA.

    sALUDOS FRANCIS NOY

  • OTRO FELIPE dijo:

    Ah ! y agradecidos a las instituciones que pusieron plata, recursos y empeños como MINCULT y el ICAIC, especialmente a Abel Prieto Jiménez. Este proyecto a elevado la percepción de las masas sobre la vanguardia artística y su papel en la Cuba de estos tiempos. Pasará a la historia de la cultura cubana, a pesar de la ausencia en la prensa. Gracias una vez más.

  • luis dijo:

    Excelente el final.
    Creo que los misterior de Silvio, no es la parte más importante de su vida.
    Silvio, fué, es y queremos que sea, un verdadero jóven rebelde.
    Los rebeldes nos dieron la libertad, los jóvenes rebeldes la continuidad de la Revolución, que lleva dentro la evolución.
    Para los camagueyanos Silvio es un paradigma. Primero se enfangó con los columnistas, luego creó el himno agramontino.
    La Canción al Mayor, es un himno de patriotismo, una novela, una evocación al amor , a la lucha, a nuestras raíces.

    Lo más importante de Silvio es su poesía, que brota de adentro.
    Sus canciones, las envuelve . Es una poesía comprometida, no oficialista.
    Debemos tratar de parecernos a Silvio, en su rebeldía.
    Fidel, Raúl y los grandes de nuestra historia, primero fueron rebeldes.
    VIVA SILVIO
    VIVA AMAURI.
    Luis Varcasia Era

  • Hortensia Rivera dijo:

    Amaury querido. Pensé esperar a mañana y meditar bien mi correo pero la emoción me ganó. Que clase de entrevista con el Silvio ser humano, padre, hijo, ahijado, hermano, nunca lo vi así de sencillo aunque admiro como casi todos y todas sus canciones desde siempre, fue un inolvidable regalo tu programa ¿tendremos otro así? lo dudo porque hay buenos periodistas y conductores en la televisión ninguno eres tu con el peso que te da tu estatura intelectual, política y artística. A ustedes dos también la Patria os contempla orgullosa, este no es mi correo final, volveré a intervenir para hilvanar algunas ideas, ahora no puedo. Besos.

  • Isabel dijo:

    Silvio… ¿Cómo no conocer el milagro del por qué cantan tus canciones
    ( jóvenes, no tan jóvenes y niños) en las giras por los barrios? El milagro está en el humanismo que transpiras, en tu sencillez y en tu empatía: admirable identificación con nosotros, los cubanos de la cotidianidad, comunicación perfecta entre artista y público.
    Gracias Amaury por tus entrevistas y por cuanto hemos aprendido con ellas, todas han sido Escuelas de Cubanía.
    Gracias Silvio, por vivir de frente a nuestra realidad por tu transparencia y tu decoro.
    Pulcra y necesaria entrevista para una clausura inolvidable de esta primera temporada.

  • YAIR HDZ. dijo:

    Simplemente maravilloso, gracias amaury por esta obra. Nos ha servido de mucho a las nuevas generaciones para entender cosas de nuestra patria que no están escrita en libro alguno.

    saludos
    YAIR HDZ.

  • Dra. Isabel dijo:

    Gracias Amaury, Gracias Silvio y el colectivo de CDQSQ.
    Amaury la serie fue muy buena y estoy segura que se repetirá, ha ganado la cultura cubana.
    Silvio, soy tu fans desde que era estudiante y asistía al estudio de televisión donde hacías Mientras Tanto, siempre amando tu obra.

    Feliz aprendiz de brujo que en cada obra dejas estela embrujada. Algunas veces hemos discutido entre compañeros si tus letras son o no mas complicadas, y concluímos, pueden ser más complicadas, tienen una mística especial, pero dime alguien no las ha entendido?. Recordemos Unicornio azul. A partir de esta canción hemos reconocido en algún momento como se nos ha perdido un Unicornio.
    Pensemos en canciones muy sencillas y hermosísimas como La gota de rocío, la intensa Ojalá, y la Masa. Hemos vibrado en cada concierto con cada nota y tu a veces más triste o más o menos complaciente haz ido recorriendo las eternas canciones con las que acunamos nuestros hijos.
    Yo no puedo olvidar el transitar hermoso de ..la hormiguita caminando por mi espalda.... Es increíble. Gracias la agradezco infinitamente.
    Sí creo que estuvistes bien en la entrevista no ví tensión alguna, he tratado de seguirte siempre en cada actuación creo que pocas veces te he visto tan tranquilo o risueño y se te vió muy sincero.
    Gracias por tu "Evolución" y el "Bolero" y las restantes del último CD.Gracias por Cita con ángeles, en fin.....
    Gracias por responder a tu generación que es la nuestra, Gracias Por tanta hermosura que nos haz dicho y de la forma qeu lo haz hecho y por tu valor como cubano donde quiera que haz estado. Mil gracias.
    El dúo final hermoso y la flauta de Niurka (supongo), indescriptible por su dulzura y el mensaje trasmitido.
    Amaury adelante con tu música queremos otro acuérdate pero de Junio, sigue adelante, eres bueno.
    Los quiero Un abrazo y éxitos,
    Isa.

  • Guidillo dijo:

    Amaury, llega a su fin el primer tramo de tu luminoso programa y no queda sino agradecer a todos los que te secundaron en este viaje. Final feliz este con Silvio, "hombre y amigo", "aprendiz de brujo" como se define a sí mismo, eterno querubín de la pureza. Puedo sentir el orgullo de vivir en esta tierra, y compartir los sueños de patria con gente de tanta valía.

    Termino con una valoración que ofrece Amaury en el libro de Valtierra:

    "El valor de la obra de Silvio es inmedible en términos humanos. Sencillamente, y para decirlo de una vez, es el compositor más importante en la historia de la música cubana. Y con el paso de los siglos, esta sentencia mía será una profecía."

  • NILDA B dijo:

    AMAURY, TE FELICITO, LLEGO EL FINAL DE TUS PROGRAMAS Y SOLO DEJE DE VER UNO, TODOS FUERON ESPECIALES , CUANTO VAMOS A EXTRAÑARLOS, FELICITACIONES A TU EQUIPO, SILVIO SIEMPRE HA ESTADO ENTRE MIS FAVORITOS. EL FINAL FUE MUY EMOTIVO, GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS. TE ESPERAMOS CON ANSIAS EN LA PRÓXIMA TEMPORADA. TE QUIERO SIEMPRE Y TE ADMIRO MUCHO MÁS.

    NILDA B

  • Jorge dijo:

    Gracias, Amaury, por este regalo que nos hiciste en la televisión cubana. Ojalá vuelvas con este mismo espacio o con el que te propongas realizar, que sé que siempre será muy bien acogido. Muy buen final de esta temporada al compartir con Silvio Rodríguez, para mi es la primera vez que conozco pasajes personales de la vida y obra del autor de Ojalá, Cita con Ángeles, No hacen falta alas...Y como nos revela Silvio en No hacen falta alas, tu lo has logrado materializa con Con 2 que se quieran, no hace faltan alas para hacer un sueño, no hacen falta grandes recursos para compartir en un set de televisión con quienes llevan la cubanía con alma, corazón y vida.

  • Israel Castellanos Jiménez dijo:

    C2QSQ llega a la meta con muchas historias y nuevos bríos

    Hablando en broma, si fueran a dar una medalla de “Televidente Fiel” de Con 2 que se quieran, yo podría optar por ella, ya que al concluir su primera temporada, he visto todas sus transmisiones. No hablaré de las variopintas opiniones que han aparecido en su concurrido foro; la mayoría dadas por personas inteligentes y constructivas. Otros criterios, desgraciadamente han sido superficiales o caprichosos, y algunos injustos o irrespetuosos, xenófobos y hasta mal intencionados. Pero son el muestrario real de una población con gustos distintos y diferentes niveles de apreciación estética y actitud social.
    Admiro y felicito la eficiente y laboriosa tarea realizada por el equipo del programa, que ha marcado pauta en la TV; la consecuente y meritoria labor de Amaury como conductor, y su paciencia y comedidas respuestas en un foro de estas características. Y no puede faltar el reconocimiento a Cubadebate por alojar esta feliz iniciativa. Pero hay algo en lo que quiero detenerme, y creo que es lo fundamental: el saldo que nos han dejado todos los programas.
    Han movilizado la disposición de los televidentes a escribir y opinar sobre los temas debatidos, incluso son muchos los que confiesan hacerlo por primera vez. Y hasta se han convertido en foristas habituales, motivados por el interés creciente despertado en ellos.
    C2QSQ ha sido una GRAN ESCUELA DE CUBANÍA, DE DEFENSA DE LO NUESTRO, DE ÉTICA, COMPROMISO SOCIAL, Y REAFIRMACIÓN DE LOS MEJORES VALORES HUMANOS Y PATRIÓTICOS. Ha demostrado que hay una forma fecunda y hermosa de vivir y de servir a Cuba, en cualquiera de las actividades en las que uno se desempeñe; ha sido fiel reflejo de lo más puro de la amistad basada en los principios y no en interesen mezquinos. Y ha dejado un elevado sabor de optimismo en toda alma honesta.
    Más de medio centenar de programas salidos al aire me incitan a hacer una amplia recapitulación, pero trataré de no ser demasiado extenso, aunque Martí nos enseñara que mientras quede algo por decir nada es largo.
    Simplemente y como apretado y rápido pase de revista, diré que hay muchas respuestas, revelaciones y anécdotas contadas que se han quedado en los archivos de mi memoria y en las fibras del corazón.
    Son incontables los ejemplos de buen sentido del humor que hemos disfrutado en esos diálogos, no sólo con aquellos entrevistados como Virulo, Antolín, Aurora, Natalia Herrera o Doimeadios (por solo citar algunos), que son profesionales del arte de hacer reír, sino por otros, que de modo espontáneo han dejado escapar esa gracia natural del cubano.
    Viendo el programa he reído y —por qué ocultarlo— hasta he llorado. Me conmovió hasta la última fibra ver a Carlos Alberto Cremata evocando la imagen de su padre vilmente asesinado por los terroristas al servicio de la CIA; y cuando el Dr. Manuel Calviño contó el trágico accidente de aviación en que se vio inmerso, y la anécdota de aquel pasajero soviético que agonizando quemado, en carne viva, le pedía ayuda; o con la hermosa espinela que usó para despedir su entrevista el poeta y escritor Alexis Díaz Pimienta.
    He sentido trémula el alma cuando Aurora Basnuevo y Digna Guerra hablaron con tanto amor de sus respectivos hijos discapacitados. O cuando le escuché decir a Marta del Río que su mamá murió un día en que a ella le tocaba hacer un personaje en una novela radial que se transmitía en vivo. O sobre el trabajo del doctor Jorge Pérez con los enfermos de SIDA, dándoles apoyo y consuelo en los tiempos en que ni siquiera se conocían las causas de la terrible enfermedad. Me he sobrecogido al imaginar lo que debió experimentar el actor Enrique Molina, al tener que rehacer su vida humilde en el campo, tras el ciclón Flora; y aún más cuando, después sufrir varias operaciones en su rostro para poderse parecer a José Martí en un filme, se le comunicó que, producto del naciente período especial, ya no podría hacerse el rodaje de la película.
    Les cuento además, que la entrevista a Reinaldo Taladrid fue sencillamente fabulosa, de principio a fin. Otras también nos resultaron demasiado breves para tanta obra acumulada y genial personalidad, como las de Alfredo Guevara y Eusebio Leal, esos dos colosos del trabajo (aunque al primero le molesta el uso de los pseudónimos, y al segundo no le gusta que lo saluden dándole la mano).
    Me resultó de mucho interés la entrevista a Gerardo Alfonso y el debate sobre las manifestaciones individuales de racismo, que aún se perciben en nuestra sociedad; el destaque de los valores de nuestro folclore afrocubano que nos brindaron Natalia Bolívar y Manolo Micler; la desbordante pasión por su labor artística manifestadas en sus casos respectivos por Rosita Fornés, Alicia Alonso, Carilda Oliver, Lizt Alfonso, María Dolores Ortiz, Vicente Feliú, Liuba, entre muchos otros entrevistados.
    Disfruté muchísimo el encuentro con Raúl Roa Kourí; y también con esa simpática cubana de altos kilates: Sara González. De igual modo, con el escritor Reynaldo González y con Miguel Barnet. Mucho me satisfizo ver a la actriz Eslinda Núñez revelando los pormenores de los desnudos en las filmaciones, y cómo se le “congelaron” los pies la primera vez. Y no pude menos que admirar la sentida honestidad de la hermosa Broselianda Hernández cuando declaró: “yo necesito ese amor que… me vuele la tapa de los sesos y que me levante del piso”.
    Las dos entrevistas finales fueron un broche de oro. Aunque confieso no ser creyente, tengo en alta estima a Monseñor Carlos Manuel de Céspedes y me gustó mucho su entrevista; y la de Silvio Rodríguez me resultó muy emotiva y gratificante. Con ella el programa tocó la cima del Turquino.
    En fin, son tantos los que debiera y quisiera mencionar, por su talento y sus méritos, que harían interminable esta lista, y aún me quedaría en deuda con algunos. Por eso, reitero un global reconocimiento a todos. Y creo que la mejor manera de completar este panorama, honrarlos, conocer de sus secretos, y nutrirnos de sus ejemplares trayectorias, es aprovechando la oportunidad que todavía nos da el sitio Cubadebate, de leer textualmente las entrevistas. Descubrir así cuán grande es la cantera de amigos que tienen Amaury Pérez y todo el pueblo de Cuba. Y prepararnos para una segunda temporada.

    Israel Castellanos Jiménez

  • Barbara dijo:

    Silvio primero fue humano y después empezó a escribir canciones, esas que escuchamos una y otra vez y repetimos entre amigos, en nuestra cotidianeidad. Silvio más que triste, es hombre tímido, y no es de andar con medias tintas. Lo de la espiritualidad...quedó como tenía que quedar!!! por eso es Silvio, no?
    Por qué Amaury estaba tan tenso?

  • Cristina María dijo:

    Primera vez que escribo por un programa, ahora lo hago por 60. Fabulosa aventura a la que nos llevaste Amaury. Genial el recorrido que nos mostraste. Tienes un alma grande, fuerte, carismática, dulce, brillante.
    Estoy en las nubes después de este último con Silvio. Me siento en paz. Voy a dormir feliz hoy.
    Mañana ya empezaré a ver como lleno los huecos de cada martes a las 8:30 pm.. ¿qué haremos en casa?
    Por ahora, Amaury, te envío todas las buenas energías que existen en el Universo. Te necesitamos de vuelta pronto. No nos abandones.
    Gracias de todo corazón a Silvio, Amaury y todos los que hicieron posible el milagro.

  • Barbara dijo:

    Ahhh!!! las fotos? me las quedo todas. Petí, tremendos perfiles!!! Gracias!!!

  • reynaldo dijo:

    Amaury:
    Le pones la vara bien alta a los muchachos de la tv...que pasara ahora los martes a las 8.30 pm?
    MAGNIFICO CIERRE..COMO UN BUEN CAMPEON!!
    FELICIDADES!!!

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Amaury Pérez Vidal

Amaury Pérez Vidal

Cantautor cubano. Fundador de la Nueva Trova. Ha conducido varios espacios exitosos en la televisión nacional. Ha escrito varias novelas y poemas.

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