Los bailadores de Las Tunas tuvieron una noche de lujo durante un concierto de Adalberto Álvarez y su Son, en la Plaza Cultural, de esta ciudad, como parte de una gira nacional que culminará su primera etapa en Camagüey.
En el más importante escenario de la música popular del territorio, ubicado en el corazón de la ciudad, los tuneros corearon temas como A bailar el toca toca, Para bailar casino y Un pariente en el campo, junto a otros de la más reciente producción del grupo, titulada El son de altura.
Sobre su gira, Álvarez declaró a la prensa que la idea surgió durante la reciente edición del Cubadisco, que tuvo por sede a Santiago de Cuba, y que en una primera etapa abarca solamente la región oriental y la provincia de Camagüey.
Al concluir los compromisos de trabajo que para el verano tienen en Europa, retomarán la gira, que tiene el objetivo de propiciar un encuentro entre los músicos y el público como medio para conocer el impacto de su trabajo.
Sobre sus proyectos, el reconocido compositor señaló que continuará la línea creativa que lo ha caracterizado, en la que privilegia al son, como género musical autóctono, y al casino como su expresión danzaria.
El autor de A Bayamo en coche, se mostró preocupado ante el desplazamiento de la música popular cubana por otros ritmos más contemporáneos, un fenómeno que a su juicio no tiene precedentes en la historia sonora del país.
Otras veces han surgido movimientos como el rock o el pop, sin embargo, convivieron con los ritmos autóctonos, los cuales los asimilaron y enriquecieron.
A juicio de Álvarez entre los protagonistas de la solución están los DJs y medios de comunicación, que deben tener una mejor preparación sobre la cultura y política musical.
(Con información de la AIN)