El oleaje que se registró esta mañana en las costas de California como consecuencia del terremoto que se sintió en Japón.
El gobernador de California, Jerry Brown, declaró hoy el estado de emergencia para los cuatro condados del norte del estado afectados por el tsunami del Pacífico cuyo impacto dejó numerosos destrozos en puertos y playas.
El maremoto originado por el terremoto de 8,8 grados de magnitud en la escala de Richter que asoló el norte de Japón causó inundaciones en zonas costeras de Hawai, así como en puntos de los estados de Oregón y California.
Uno de los lugares más afectados por el oleaje fue la localidad de Crescent City, situada en una bahía del condado Del Norte conocida por ser vulnerable a los tsunamis.
Su puerto quedó destruido por la marea y las embarcaciones sufrieron importantes daños, lo mismo que algunos edificios.
Una persona fue arrastrada por el agua en esa ciudad y se encuentra desaparecida. Además, varios vecinos tuvieron que ser evacuados por las autoridades.
Hawai también sufrió los efectos del tsunami en la mañana del viernes y algunos puntos de Big Island y Maui experimentaron inundaciones cuando olas de 2 metros golpearon la costa.
En Oregón, cuatro personas resultaron heridas al ser arrastradas por la marea.
Las autoridades mantienen la alerta por el maremoto en previsión de que con la marea alta se produzcan nuevas crecidas del mar.
La declaración de emergencia del gobernador Brown entró ya en efecto para los condados Del Norte, Humboldt, San Mateo y Santa Cruz que podrán acceder ahora a los recursos estatales para hacer frente a los destrozos y a las necesidades de la población.
En 1964, 17 personas perdieron la vida en la costa oeste de EEUU, 11 de ellas en Crescent City, como consecuencia de un tsunami.
(Con información de EFE)