Cuba denunció hoy en Naciones Unidas el daño ocasionado por el bloqueo de Estados Unidos a las actividades del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) en el país caribeño.
Ese cerco económico, comercial y financiero implantado desde hace casi 50 años afecta las acciones de esa agencia y viola su Estatuto, aseveró el representante permanente alterno de Cuba ante la ONU, Rodolfo Benítez.
Al hablar en una sesión de la Asamblea General, el diplomático sostuvo que el asedio estadounidense dificulta la adquisición por parte del OIEA de equipamiento especializado para proyectos en Cuba.
Apuntó que los nacionales cubanos tienen problemas para participar en entrenamientos organizados en territorio estadounidense y lo mismo sucede con la ejecución de proyectos sobre la lucha contra el cáncer que son una prioridad del OIEA.
Benítez recordó la condena casi unánime aprobada hace dos semanas por la Asamblea General de la ONU contra el bloqueo a Cuba, que ha ocasionado pérdidas superiores a los 100 mil 154 millones de dólares hasta diciembre pasado, según cálculos conservadores.
El representante cubano reconoció los esfuerzos de la Secretaría del OIEA para buscar alternativas y soluciones ante ese escenario.
Benítez apuntó que, pese a la crisis financiera, más de 60 países, la mayoría subdesarrollados, han expresado interés en incluir la energía nucleoeléctrica como una opción para el desarrollo energético sostenible.
Y rechazó cualquier pretensión de utilizar el suministro de combustible nuclear como medio de coerción política o económica con carácter discriminatorio o como mecanismo para consagrar el monopolio de unos pocos sobre su distribución.
En la misma línea, expresó preocupación por el clima de desconfianza fomentado en las labores de verificación del OIEA en Irán y Siria "como resultado de intereses geopolíticos y de dobles raseros de todos conocidos".
Indicó que las actividades de verificación deben respetar la soberanía e intereses nacionales de los Estados, lo cual conlleva una acción imparcial y profesional de los inspectores y el personal del OIEA, ajena a toda presión o interferencia.
Benítez reiteró la necesidad de respetar el derecho inalienable de los Estados al uso de la energía nuclear con fines pacíficos y el apoyo de Cuba a la desnuclearización de la península de Corea y a la solución negociada por los actores involucrados.
Igualmente, apoyó la creación de una zona libre de armas nucleares en el Medio Oriente y la convocatoria de una conferencia internacional en 2012 con ese propósito.
En ese sentido, urgió a Israel a adherirse sin demoras ni condiciones al Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares y a poner todas sus instalaciones de ese tipo bajo salvaguardias amplias del OIEA.
(Con información de Prensa Latina)