Cubadebate

Serbia se impuso hoy 3-1 a Italia para conquistar la medalla de bronce del Mundial de Voleibol varonil en partido disputado en la sala Palalotomattica de esta ciudad.

El empuje de los serbios contrarrestó las aspiraciones de la escuadra local que después de su derrota de ayer ante Brasil, salió al tabloncillo dispuestos a todo por la tercera plaza.

Algo más de 9 mil 600 personas se dieron cita en la sala techada del norte de la capital italiana para presenciar un encuentro que se suponía iba a tener un desenlace mucho más parejo.

Sin embargo, los tanteadores favorables a Serbia (25-21, 25-20, 26-28 y 25-19) ilustran cómo se comportaron ambas selecciones.

Mis jugadores y yo estamos muy contentos por esta medalla de bronce. Aspirábamos a más pero no pudo ser esta vez. Creo que este tercer lugar es un magnífico resultado que nos reafirma en la vanguardia del mundo, dijo Igor Kolakovic, el director técnico de los serbios en la reunión con la prensa.

Si el sábado ante Brasil los italianos acusaron un juego disperso bien aprovechado por los suramericanos, este domingo mejoraron algunos aspectos en su desempeños y presentaron mejor disposición defensiva y ofensiva.

La escuadra azurri lo intentó todo e hizo lo imposible por el triunfo y tras perder los dos primeros parciales en 25 y 22 minutos, respectivamente, ganaron el tercero apretadamente para recibir el mayor aplauso de sus seguidores.

En ese set, los pupilos de Andrea Anastasi pudieron abrir una brecha en la defensa serbia amparados en el juego de su líder Alessandro Fei y el opuesto Simone Parodi, quienes se echaron encima todo el peso del equipo.

Un peleado empate a 26 dejó el camino listo para la selección serbia que con dos tantos más remataba las aspiraciones italianas, pero dos preciosas jugadas del equipo de casa les devolvió las esperanzas a su afición al ganar 28-26.

Obligado a conseguir un triunfo a toda costa, los hombres de Anastasi trataron de mantener el mismo ritmo de partido y no les fue bien, al aceptar un tempranero despegue rival 8-5, en la cuarta manga, mortal ante un plantel tan letal como el de sus rivales.

Otra vez el opuesto Ivan Miljkovic con 22 puntos fue una espada de Damocles sobre el bloqueo itálico que tampoco estuvo efectivo ante Dragan Satkovic quien les marcó 11 unidades.

Pero la suerte no acompañó a los italianos y no podría ser de otra forma frente a un equipo que supo jugar mejor los momentos ganadores del partido, controló mucho más las emociones y pudo vencer categóricamente ante la mayor cifra de espectadores que ha tenido este Mundial.