Unos 100 millones de años tardó la formación de la Tierra, concluye un reciente estudio geológico que reemplaza una anterior teoría sobre su creación.
A nuestro planeta le tomó mucho más tiempo del estimado para su formación tras el nacimiento del sistema solar hace cuatro mil 567 millones de años.
Es 70 millones de años más joven, puntualizan científicos de la universidad británica de Cambridge, autores del estudio, en un artículo publicado en Nature Geosciences.
Estimada su creación en unos 30 millones de años, ocurrió mediante la acreción, una combinación de gas, polvo y otros materiales, explican los académicos.
En su artículo también señalan que este planeta creció 60 por ciento de su tamaño actual de manera rápida, pero el proceso se ralentizó y tardó millones de años más en alcanzar su desarrollo total.
Para llegar a estas conclusiones, compararon elementos químicos del manto terrestre con los de meteoritos de la misma edad del sistema solar.
Una serie de colisiones entre enormes trozos de desechos estelares provocó la llamada acreción, explicó John Rudge, líder de la investigación.
Estas generaron enormes niveles de calor, causantes de un derretido en el interior del planeta, que segregó metal fundido hacia el centro para formar el núcleo, señaló.
Durante este proceso, añadió, la Tierra creó una división entre su núcleo de metal fundido y su manto, o sea, la capa que lo cubre.
Recientes estudios describen que el proceso de acreción finalizó cuando un cuerpo del tamaño de Marte chocó contra la Tierra y causó el desprendimiento de parte del planeta para formar la Luna.
(Con información de Prensa Latina)