La plataforma de gas Aban Pearl, situada en el Caribe venezolano, se hundió en el mar el jueves de madrugada sin provocar víctimas y sin que exista ningún riesgo de fuga de gas, anunciaron fuentes oficiales.
Usando la red social Twitter, el presidente Hugo Chávez fue el primero en comunicar la noticia, que se produce tres semanas después del hundimiento en el golfo de México de una plataforma petrolera de la compañía británica BP.
"Con pesar les informo que se hundió la plataforma gasífera Aban Pearl hace pocos momentos. La buena noticia es que los 95 trabajadores están a salvo", difundió Chávez en su cuenta úchavezcandanga, durante la noche.
Poco después, en declaraciones a la televisión estatal VTV, el ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, garantizó que a diferencia de lo ocurrido en el Golfo de México, este hundimiento no representaba ningún riesgo medioambiental, ya que se trata de gas seco y fueron tomadas todas las medidas de seguridad necesarias.
"Se trata de una instalación grande y compleja, pero nos acompañan empresas especializadas en operaciones costa afuera, quienes nos han asegurado que no existe la posibilidad técnica de una fuga de gas", explicó Ramírez.
Hace tres semanas, una plataforma de BP explotó y se hundió Golfo de México. Once operarios murieron en el accidente, que desató uno de los peores derrames de crudo de la historia de Estados Unidos y no se ha logrado detener aún.
Según la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), el pozo fue sellado inmediatamente y se activaron todas las válvulas de seguridad para preservar también la integridad del pozo.
"En este caso el gran riesgo son las pérdidas humanas. Nuestros planes de contingencia se orientan a salvaguardar la vida de los trabajadores y así lo hicimos", agregó Ramírez.
Los 95 trabajadores fueron trasladados a un buque taladro cercano sin que sufrieran ningún daño.
Ramírez explicó que la plataforma Aban Pearl era "propiedad de la compañía india Petromarine" lo cual implica que las "responsabilidades están repartidas".
En 2008, la empresa Petromarine Energy Services, con sede en Singapur y filial de la india Aban OffShore, firmó un contrato con PDVSA para suministrarle esta plataforma semisumergible.
"Antes de empezar sus operaciones fue certificada de que estaba en condiciones para iniciar operaciones. Tenemos que ser muy cuidadosos en la investigación", declaró el ministro venezolano.
Ramírez detalló que se detectó una falla en el sistema poco antes de la medianoche y comenzó a sentirse una inclinación importante en esta plataforma semisumergible debido a un fallo en "el sistema de flotación". Tres horas después, la plataforma se había hundido completamente sin registrar víctimas.
La estatal PDVSA incorporó en 2009 la plataforma Aban Pearl, situada en el golfo de Paria, muy cerca de Trinidad y Tobago, al ambicioso proyecto de exploración y producción de gas y petróleo Mariscal Sucre.
La plataforma hundida medía 72 metros por 72 y permitía operar a más de 160 metros de profundidad, según PDVSA.
La semana pasada, el gobierno celebró la puesta en marcha de un nuevo pozo costa afuera en este ambicioso proyecto Mariscal Sucre, que sería perforado justamente gracias a la plataforma sumergible Aban Pearl.
El ministro de Planificación y Finanzas, Jorge Giordani, destacó precisamente a esta plataforma como un "motivo de orgullo" para la ingeniería venezolana y para PDVSA.
Venezuela tiene reservas probadas de gas por 200 billones de pies cúbicos (5,66 billones de metros cúbicos).
Según Ramírez, el gobierno trabaja para incorporar reservas probables y posibles, con las que se podría llegar a 400 billones de pies cúbicos (11,33 billones de metros cúbicos)".
Chávez confió recientemente en que Venezuela se convierta a medio plazo en una potencia del gas, con unas reservas probadas que lo situarán en el cuarto lugar mundial.