Una bebé sana, de 2 600 gramos de peso, alumbró Maidorkis Valier Creyón, una paciente que gravemente afectada por el virus de la influenza A H1N1, fue salvada en el hospital Doctor Agostinho Neto, de la ciudad más oriental de Cuba.
El nacimiento se produjo el lunes tras 39 semanas de un embarazo que entre las número 30 y 34 se complicó por contagio del virus, el cual la mantuvo en peligro de muerte por más de un mes.
Maidorkis ingresó el 16 de octubre en terapia intensiva, con tos, secreción nasal, fiebre e insuficiencia respiratoria, cuadro agravado por fallo completo de las funciones respiratorias y renal, además del ataque de microbios y hongos de gran agresividad y resistencia antibiótica.
La batalla por la vida de la madre unió voluntades multidisciplinarias de las ciencias médicas, que garantizaron también la evolución de la vida que palpitaba en su útero y que hoy goza de excelentes cuidados neonatales en el hospital Agostinho Neto.
Yadira Blanco Laborí, especialista en neonatología, explicó que la niña Milagros de la Caridad Valier Creyón, al cumplir hoy sus primeras 48 horas de vida, mantiene parámetros normales de salud y vitalidad, aunque todavía sigue en el pabellón de observaciones.
La ginecobstetra Karen Sánchez caracterizó el parto como fisiológico y normal, tras el cual la madre evoluciona satisfactoriamente, mientras a su tercera y más pequeña hija se le practican estudios evaluadores de posible repercusión por la gravedad materna durante el período gestacional.
Maidorkis subrayó que, casos como el suyo, constituyen un ejemplo de la importancia de estar alerta y acudir al facultativo, cuando se sospecha un estado gripal, y los síntomas aún no son alarmantes.
Añadió que los cubanos tienen el privilegio de contar con una Revolución que les garantiza la atención gratuita, sin dilación alguna, y gracias a ello disfruta junto a sus hijos y demás familiares, la realidad de encontrarse fuera de peligro, tras afrontar difíciles momentos.
(Con informacion de la AIN)